Es imposible parar el avance de la inteligencia artificial, una herramienta que puede cambiar mucho nuestras rutinas de trabajo. En el ámbito académico, como en cualquier otro, brinda oportunidades y genera desafíos. Puede ser un riesgo para la integridad del proceso si se utiliza para evitar o facilitar las inevitables instancias de evaluación, pero también puede ser una increíble herramienta para mejorar el aprendizaje y la tarea a realizar. Es lo que tratan estos profesores de la Universidad de Connecticut en este paper: Cosgel, Metin M. and Langlois, Richard N. and Miceli, Thomas J., “Teaching Economical Writing in the Age of AI: A Process-Based Framework” (June 10, 2025). Available at SSRN: https://ssrn.com/abstract=5287865
“La creciente presencia de la inteligencia artificial (IA) generativa en los cursos de redacción de economía de grado presenta tanto oportunidades como desafíos. Los profesores se enfrentan a preocupaciones sobre la integridad académica y la evaluación del esfuerzo estudiantil; sin embargo, un enfoque de redacción basado en procesos ofrece una solución viable. Este artículo aboga por la enseñanza de la redacción de economía como un proceso estructurado e iterativo —que abarca la lluvia de ideas, la descripción, la investigación, la redacción, el análisis, la revisión y la reflexión—, en lugar de como un producto final singular. En cada etapa, la IA puede integrarse estratégicamente para mejorar, en lugar de reemplazar, las habilidades esenciales de razonamiento, análisis y comunicación económicos. Presentamos un marco basado en dos principios fundamentales: alinear las herramientas de IA con las habilidades análogas definidas por los objetivos del curso y diseñar evaluaciones observables y altamente correlacionadas con estas habilidades. Además, presentamos estrategias prácticas para el aula y abordamos las preocupaciones en torno a la originalidad, la equidad y la evaluación. El artículo también explora implicaciones más amplias para la producción académica, incluyendo el papel de la IA en la reformulación de las ventajas comparativas entre la inteligencia humana y la artificial en el trabajo académico y su intersección en evolución. En última instancia, este enfoque reinventa la pedagogía de la escritura para alinearla tanto con el pensamiento disciplinario como con las realidades de un panorama educativo mejorado por la IA.”