No aparece en el podio de liberales para muchos pero Edmund Burke es un clásico, muy respetado por F. A. Hayek, por ejemplo. Era un “liberal conservador” si es que vale tal clasificación. En un interesante artículo en The American Mind, The Claremont Institute, titulada “The brave moderation and manly prudence of Edmund Burke”, Daniel Mahoney lo considera: https://americanmind.org/features/the-courage-to-see/
“No seré el primero en apoyarme en la defensa de Edmund Burke de Winston Churchill contra la acusación de inconsistencia. Como escribió Churchill en su ensayo magistral de 1932 «Consistencia en la política», los espíritus «mezquinos y mezquinos» no pueden apreciar cómo Burke luchó contra «un monarca dominante y una corte corrupta y un sistema parlamentario» en casa como líder intelectual del Partido Whig y, sin embargo, simpatizó con las justas demandas de los colonos americanos, luchó contra los abusos imperiales en la India y se opuso a la opresión de los irlandeses (con quienes tenía profundas raíces ancestrales[1]) mientras, al mismo tiempo, luchaba con toda su elocuencia y poderío contra “ turba brutal y secta perversa” que estaba destruyendo Francia y desatando la guerra en toda Europa. Churchill agrega, con una elocuencia que coincide con la del propio Burke, que “nadie puede leer el Burke de la libertad y el Burke de la autoridad sin sentir que aquí estaba el mismo hombre persiguiendo los mismos fines, buscando los mismos fines de la sociedad y el gobierno, y defendiendo de agresiones, ahora de un extremo, ahora del otro”. Churchill, un conservador liberal en la tradición de Burkean, como era de esperar, llega al meollo del asunto. Vio en Burke una mezcla de principios y prudencia al más alto y honorable nivel. En esto seguramente tenía razón.”