Con los alumnos de la UBA Derecho vemos uno de los temas donde más se ha desviado la política argentina de los principios establecidos originalmente en la Constitución. Así explica Alberdi como eran éstos:
“El gasto público de la Confederación Argentina, según su Constitución, se compone de todo lo que cuesta el «constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad»; en una palabra, el gasto nacional argentino se compone de todo lo que cuesta el conservar su Constitución, y reducir a verdades de hecho los objetos que ha tenido en mira al sancionarse, como lo declara su preámbulo.
Todo dinero público gastado en otros objetos que no sean los que la Constitución señala como objetos de la asociación política argentina, es dinero malgastado y malversado. Para ellos se destina el Tesoro público, que los habitantes del país contribuyen a formar con el servicio de sus rentas privadas y sudor. Ellos son el límite de las cargas que la Constitución impone a los habitantes de la Nación en el interés de su provecho común y general.
Encerrado en ese límite el Tesoro nacional, como se ve, tiene un fin santo y supremo; y quien le distrae de él, comete un crimen, ya sea el gobierno cuando lo invierte mal, ya sea el ciudadano cuando roba o defrauda la contribución que le impone la ley del interés general. Hay cobardía, a más de latrocinio, en toda defraudación ejercida contra el Estado; ella es el egoísmo llevado hasta la bajeza, porque no es el Estado, en último caso, el que soporta el robo, sino. el amigo, el compatriota del defraudador, que tienen que cubrir con su bolsillo el déficit que deja la infidencia del defraudador.
Para mantener la Constitución y llevar a cabo los objetos de su instituto que hemos señalado más arriba, la misma Constitución instituye y funda el gobierno, cuyo costo se extiende y divide como los servicios de su cargo, y las necesidades públicas que deben satisfacerse con el Tesoro de la Confederación.
Según esto, los gastos se dividen primeramente en gastos nacionales y gastos de provincia.
Teniendo cada provincia su gobierno propio, revestido del poder no delegado por la Constitución al gobierno general, cada una tiene a su cargo el gasto de su gobierno local; cada una lo hace a expensas de su Tesoro de provincia, reservado justamente para ese destino. Según eso, en el gobierno argentino, por regla general, todo gasto es local o provincial; el gasto general, esencialmente excepcional y limitado, se contrae únicamente a los objetos y servicios declarados por la Constitución, como una delegación que las provincias hacen a la Confederación, o Estado general. Este sistema, que se diría entablado en utilidad de la Confederación, ha sido reclamado y defendido por cada una de las provincias que la forman. (Constitución argentina, parte 2a, título 2°, y pactos preexistentes invocados en su preámbulo.)
RESUMEN:
Alberdi plantea que el gasto nacional argentino se compone de todo lo que cuesta el conservar su Constitución, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad. Todo dinero público gastado en otros fines estará malgastado y malversado; el Tesoro Nacional, tiene un fin santo y supremo, no es el Estado el que soporta el robo, sí el compatriota, que tienen que cubrir con su bolsillo el déficit de la infidencia del defraudador.
El sistema argentino es una descentralización discreta, se reconoce a la Nación el derecho de exigir y gobernar como suya cierta parte del Tesoro que cada provincia ejercía por sí; se dividen los gastos generales en ordinarios y extraordinarios. Para clasificar y dividir los ordinarios se dividen cinco ministerios (Ministerio del interior, Ministerio de Relaciones Extranjeras, Ministerio de Hacienda, Ministerio de Justicia, y de Guerra y Marina). Y por otro lado, los extraordinarios, según se refieran a cualquier de estos departamentos, la obra o la necesidad urgente y extraordinaria los motive; gastos efectuados en obras públicas: caminos, muelles, puentes, edificios para el servicio nacional; los gastos ocurridos en el sostén de la defensa común contra ataques de guerra dentro o fuera del país; pueden ser de utilidad para el aumento del Tesoro si se hacen de modo reproductivo, fecundando el Tesoro.
IMPORTANTE:
Notable la manera en que una vez más enlaza conceptos y muestra su aplicación práctica y los desfasajes a lo largo de los tiempos
Lo simple y a la vez singular de su manera de explicar las funciones y propósitos de cada Ministerio
La profundización en lo referido al gasto público y al Tesoro Nacional, su formación y uso.
Por último, muy sensata y profunda una de las frases con las que cierra el capítulo, la cual me atrevo citar “El gobierno era antes el amo, hoy es el sirviente; he ahí toda la diferencia de la colonia a la República”, demostrando con total simpleza lo que fuimos en tiempo pasado y lo que fuimos también en tiempo pasado, tan alejado de nuestros tiempos en los que lamentablemente la Constitución Nacional, sus principios y garantías fueron vulnerados en reiteradas ocasiones con mayor o menor gravedad pero vulnerados al fin.
Es de reflexionar lo que ahora, finalizada su obra entiendo debido a la finalidad del texto constitucional.
PREGUNTAS:
1) ¿Qué opina respecto el porcentaje de Tesoro Nacional utilizado en la actualidad en obras públicas?
2) ¿Qué medidas tomaría al respecto?
3) ¿Opina que los Ministerios cumplen las funciones por usted detalladas?
JUAN BAUTISTA ALBERDI – PABLO ALTMANN – COMISIÓN 0682
OBJETOS DEL GASTO PÚBLICO SEGÚN LA CONSTITUCIÓN ARGENTINA
CLASIFICACIÓN Y DIVISIÓN GENERAL DE LOS GASTOS
“EL GASTO NACIONAL ARGENTINO SE COMPONE DE TODO LO QUE CUESTA CONSERVAR SU CONSTITUCIÓN…”
“TODO DINERO PÚBLICO GASTADO EN OTROS OBJETOS QUE NO SEAN LOS QUE LA CONSTITUCIÓN SEÑALA COMO OBJETOS DE LA ASOCIACIÓN POLÍTICA ARGENTINA, ES DINERO MALGASTADO Y MALVERSADO…”
¿QUE SIGNIFICA QUE UN GOBIERNO DEBA DESTINAR LOS DINEROS EN INVERTIR BIEN Y CORRECTAMENTE ?
SIMPLEMENTE EN NO DEFRAUDAR A SUS CIUDADANOS. EN CUMPLIR CON LOS QUE CONFIARON EN EL Y LO VOTARON
LA MALVERSACIÓN DE LOS FONDOS PÚBLICOS HA SIDO MONEDA CORRIENTE EN CASI TODOS LOS GOBIERNOS ARGENTINOS.
POR INEFICACIA, POR DESIDIA O POR APROPIARSE INDEBIDAMENTE DE LOS FONDOS QUE NO ERAN SUYOS, QUE SON EN DEFINITIVA DEL PUEBLO ARGENTINO.
LOS CIUDADANOS CON SU SUDOR Y SACRIFICIO PAGAN EN GENERAL SUS IMPUESTOS, QUE ES UNA DE LAS FORMAS DE RECAUDAR.
LOS MALOS GOBERNANTES, LA BUROCRACIA Y LOS MALOS ADMINISTRADORES DILAPIDAN EL DINERO DEL PUEBLO SIN RENDIR LA DEBIDA CUENTA.
SE ESCUDAN EN JUECES CORRUPTOS ,QUIENES LOS PROTEGEN, SIN SABER A CIENCIA CIERTA SI UN DÍA NO SERÁN A SU VEZ JUZGADOS POR OTROS JUECES MÁS PROBOS QUE TAMBIÉN COEXISTEN EN LA NACIÓN ESPERANDO TAL VEZ EL MOMENTO DEL “CAMBIO DE GOBIERNO”, DEL CAMBIO DEL PODER, PARA PODER ACTUAR AL FIN, SIN LAS REPRESALIAS DE LOS MALOS GOBERNANTES.
ALBERDI EXPRESA REITERADAMENTE LAS DIFERENCIAS ENTRE LOS DINEROS GASTADOS PARA MANTENER A LAS TROPAS EN NUESTRO PAÍS Y EN LA HERMANA REPUBLICA DE CHILE
LA INCONGRUENCIA DE UN PAIS PEQUEÑO CON MENOR CANTIDAD DE HABITANTES QUE MANTIENE UNA CANTIDAD DE TROPAS ACORDE CON SU DEMOGRAFÍA, CUIDANDO LOS DINEROS DE SU PUEBLO, INVIRTIENDO CUIDADOSAMENTE EL ESFUERZO DE SUS CIUDADANOS, CONTRASTANDO CON LA ARGENTINA, DONDE SE DILAPIDAN LOS FONDOS EN EL MANTENIMIENTO DE CUANTIOSAS TROPAS.
LOS CAUDILLOS COMO ROSAS Y QUIROGA GASTANDO FORTUNAS EN SUS GENTES.
¿PARA QUÉ?, PARA EL USO INDISCRIMINADO DE SUS PODERES, PARA MANTENER EL MIEDO CONSTANTE ENTRE SUS GOBERNADOS, PARA LA LUCHA FRATICIDA…
¿HEMOS APRENDIDO LAS LECCIONES DE LA HISTORIA?
TENGO MIS SERIAS DUDAS…
HOY, ARGENTINA, NOVIEMBRE DEL 2015, HAY UNA NUEVA ESPERANZA EN NUESTRA PATRIA.
PARECE SER QUE LA VISIÓN Y LOS DESIGNIOS DE ALBERDI SE VEN REVERDECIDOS POR UN HÁLITO DE ESPERANZA. LA ESPERANZA DE QUE POR FIN LA CONSTITUCIÓN SE CUMPLA, SE VEA RESPETADA…
NI MAS NI MENOS, COMO LO SOÑABA JUAN BAUTISTA ALBERDI…
¿PREGUNTAS? NO, NO TENGO PREGUNTAS, LOS ARGENTINOS HOY, MÁS QUE NUNCA DEBEMOS DAR RESPUESTAS AL SUEÑO ALBERDIANO, NI MÁS NI MENOS…
PS : HOY NO CREO QUE DEBA HACER COMENTARIOS SOBRE NUESTROS DESEMPEÑOS PRETÉRITOS, CONSIDERO QUE DEBEMOS CONCENTRAR TODOS NUESTROS ESFUERZOS EN MIRAR PARA ADELANTE…
TRABAJANDO NUESTRO PRESENTE FORJAREMOS NUESTRO FUTURO, NO TENGAMOS TEMOR, ALBERDI NOS GUÍA…
RESUMEN
En el último capítulo de su obra, Alberdi refiere al gasto público desde la óptica de la Constitución y como según los objetivos de ésta consagrados en el prólogo deben destinarse a la unión nacional, la justicia, paz interior y bienestar general, es decir, a su propia conservación, Ya que cualquier tipo de gasto fuera de dichos objetos es dinero malgastado.
Realiza clasificaciones del reseñado gasto, dividiéndolo en gastos de provincia y nación, ordinarios y extraordinarios de los que resulta un mayor orden y una mayor transparencia en pos de incluirlos en la ley de presupuesto. Ley por su parte que tiene el poder de evidenciar la calidad del país y su orientación si se observan detenidamente la distribución y magnitud de las partidas presupuestarias que la incluyen.
Posteriormente toma los cinco ministerios en los que se divide la administración y desarrolla los gastos especiales que cada uno de esos órganos debe realizar para cumplir debidamente su función, dándole a la Corte, aunque no es un ministerio, una importancia fundamental en el logro de la paz y seguridad ya que con sus fallos puede reemplazar a los ejércitos en la consecución de esos fines.
Párrafo aparte le dedica a los gastos extraordinarios individualizándolos enunciativamente y asegurando que tienen una gran utilidad para el aumento del Tesoro, si se realizan con juicio y prudencia.
Sin embargo, este tipo de gastos debe realizarse con el excedente de los ordinarios, cosa que no sería posible en un país en formación como la Argentina y por eso pide a las leyes que no recarguen al Estado con éste tipo de erogaciones sino que se las encarguen a los privados, dándoles el monopolio de su explotación.
NOVEDOSO
Es interesante lo que revela Alberdi en lo referido a los gastos de la hacienda pública pero que creo que puede resultar análogo a todos los ámbitos del Estado.
Asegura el autor que un medio de economizar los gastos de los sueldos de los empleados, es emplear pocos agentes, hábiles y honrados. Conceptos que de ninguna manera pueden aplicarse hoy en día a mi entender y que sí son más acordes los que reproduce posteriormente y en forma negativa, es decir, “muchos ineptos y sospechosos”.
Como no se consiguen servicios de hombres de notable capacidad y respetabilidad sino por compensaciones dignas, los sueldos pagados a la aptitud deberán ser considerables para disminuir la cantidad de ineptos y solo quedarse con los más útiles a los fines propuestos, con la consiguiente reducción del gasto.
No puedo sino compartir con aplausos esa afirmación y reflexionar sobre lo que sucede actualmente. Sobrepoblación en el Estado, déficit, miles de empleados que solo cobran su sueldo sin generar ningún tipo de servicio, que en muchos casos (o en la mayoría) llegan por contactos y no por aptitudes. Circunstancias todas que generan, a mi entender, una pérdida de la cultura del trabajo y de la eficiencia en el actuar del Estado.
PREGUNTAS
1) ¿Considera prudentes los gastos que se realizaron estos últimos años? ¿Como se explica el déficit en que se encuentra el país?
2) ¿Qué opina de la distribución que se realiza en las leyes de presupuesto? ¿Son acordes a las necesidades de la Nación?
3) ¿Qué piensa de la capacidad que tiene el jefe de gabinete de re distribuir las partidas presupuestarias en la etapa de ejecución de la ley?
Comentario sobre la Tercera Parte, Capítulo VII
• Resumen
El gasto Público es la erogación de los recursos provenientes del Tesoro con el objeto de constituir la unión nacional, afianzar la justicia, asegurar la libertad y promover en bienestar general, entre otros. Este se divide en Nacional y Provincial, según los recursos provengan de los Tesoros locales o el Nacional . A su vez, se lo puede clasificar en gastos ordinarios y extraordinarios. Los primeros se dividen en los siguientes ministerios:
1. Interior: Tiene a su cargo consolidar la paz interior, estrechar la unión nacional, y promover el bienestar general, para lo cual realizará obras públicas y costeará la policía.
2. Relaciones exteriores: Debe promover la inmigración extranjera y de capitales además de fomentar el comercio, para lo cual el gasto en publicidad es clave.
3. Hacienda: Es su finción dirigir, recaudar y contabilizar los recursos del Tesoro, para lo cual costeará la estructura necesaria (establecimientos y personal) para tal fin.
4. Justicia, culto e instrucción: Sostiene el culto nacional, es decir la Iglesia Católica (curas, establecimientos, seminarios); la justicia nacional (Corte Suprema y tribunales inferiores) y la instrucción (gastos de educación secundaria y superior, bibliotecas y museos, entre otros)
5. Guerra y marina: Es el gasto necesario para proveer a la defensa común y consolidar la paz interior a través del sostenimiento de fuerzas materiales al servicio del poder.
Por otra parte, el gasto extraordinario es aquel destinado a obras públicas de infraestructura como muelles y caminos, gastos de defensa extraordinarios por guerra y subsidios por urgencias provinciales, entre otros. Estos no son regulares y periódicos como los ordinarios.
• Cuestiones Relevantes
Alberdi ve en la sobriedad del gasto público una de las claves para lograr el desarrollo de la República. Es interesante ver este punto en la comparación entre el gasto de los EE.UU y Argentina: mientras la primera lo destina a obras de infraestructura e instrucción (léase inversión para el desarrollo de riqueza), nosotros lo hemos destinado casi en su totalidad a sufragar el mantenimiento de ejércitos innecesarios, manteniendo a tiranos y traficantes de influencias que nada aportan al desarrollo de la Nación, situación no muy distinta a nuestra realidad actual, por lo menos hasta el 10 de Diciembre. Mientras más ineficiente y mayor es el gasto público, más erogaciones deben hacer los particulares y menos recursos les quedan para promover su propio bienestar, que es el que verdaderamente contribuye al desarrollo. En definitiva, sobriedad implica más y mejores posibilidades para los particulares y eso implica más y mejor libertad.
• Preguntas
1. ¿Cómo podría aplicarse el concepto de sobriedad en el gasto público teniendo en cuenta el paradigma social de la actualidad?
2. ¿Considera útil la clasificación entre gasto ordinario y extraordinario? ¿Cómo lo aplicaría en función de la estructuración del presupuesto nacional actual?
3. ¿Considera necesario que el sostenimiento del culto sea a cargo del Tesoro Nacional?
Alejandro Fabián Dávila
El tesoro público se conforma con la contribución de las rentas privadas y tiene como finalidad cumplir con los objetivos planteados constitucionalmente, los hombres que al gobernar malgastan los caudales públicos, se desvían del rumbo señalado por la Constitución Nacional.
Debe tenerse en cuenta, que todo lo recaudado resulta en provecho de la población por lo cual todo aquel que no aporta a la conformación del tesoro, produce un mal a sus compatriotas.
Los gastos se dividen en nacionales y provinciales, cada provincia sostiene sus propios gastos locales mediante su propio tesoro independiente del tesoro nacional, a la vez los gastos nacionales se dividen en generales y locales de carácter federal.
Los gastos generales se dividen en ordinarios y extraordinarios, de acuerdo a la posibilidad de preverlos al calcular el presupuesto nacional.
Los gastos ordinarios se dividen en:
Ministerio del interior: son para pagar los sueldos de agentes civiles y militares que sirven a la nación para lograr la integridad nacional interior, mantener el orden y la paz interior, el personal policial es sostenido económicamente por cada provincia, la obra pública a nivel federal, es sostenida entre nación y cada provincia.
Ministerio de relaciones extranjeras: los gastos tienen como objeto, atraer elementos de países extranjeros, que resulten útiles a la prosperidad de la nación, para lograrlo deben traducirse en diferentes lenguas, el contenido de las leyes nacionales, estadísticas nacionales y noticias que informen sobre la realidad nacional, los cónsules y vicecónsules serán los encargados de transmitir toda esta información, a los fines de poder estrechar relaciones con países extranjeros a través de tratados internacionales.
Ministerio de hacienda: Los gastos de este ministerio se componen del pago de los servicios de empleados, adquisición de casas y establecimientos para prestar sus servicios, para economizar gastos es recomendable y preferible contar con una pequeña dotación de empleados hábiles, honrados y especializados a los que conviene pagarles bien, antes que un plantel numeroso de empleados ineptos y deshonestos. Otros de los gasto de hacienda, es mantener al día el pago de los intereses de deudas contraídas y la amortización de la deuda pública, la devolución del crédito solicitado, es garantía de pago, el gobierno que incumple con sus compromisos no es merecedor de confianza.
Ministerio de justicia, culto e instrucción: El gasto de este ministerio se basa en sostener la religión católica apostólica romana, dado que es la mayoritariamente practicada a nivel nacional, el Estado sostiene éste culto, por considerarlo una herramienta útil para gobernar en paz, educar a la población e integrarla socialmente, incluyendo en este proceso a la integración de las comunidades indígenas. La religión cura la intolerancia política planteada entre los habitante de la nación durante décadas, la efectividad requiere que los niños desde pequeños vayan recibiendo sus primeras enseñanzas religiosas, a su vez nuestra constitución es clara y justa al permitir que otros cultos distintos a la religión principal, puedan ser de libre práctica.
La justicia es otro de los gastos abordados por el tesoro público, que deberá sostener el funcionamiento de la Corte suprema y tribunales inferiores, la instrucción pública primaria será responsabilidad de cada provincia, quedando la secundaria y superior a cargo de la nación, el gobierno deberá en ese monopolio que ejerce sobre ambos niveles educativos, ampliar la oferta educativa a otros conocimientos distintos a la medicina y el derecho, a los efectos de no entrar en contradicción con lo expresado en el art. 14 de la Constitución nacional que menciona la libertad de enseñan y aprender.
Ministerio de guerra y marina: El objeto de éste gasto es la defensa de ataques exteriores y lograr la unión nacional pacíficamente, ambas cuestiones se encuentran resueltas por lo que la parte proporcional aplicada a gastos de defensa, es desmesurada con la realidad nacional, resulta de superior utilidad, invertir en acercarse a potencias extranjeras antes que alejarse de la posibilidad de progreso y prosperidad.
En lo referente a gastos extraordinarios, construir infraestructura útil al progreso nacional, es más beneficioso que aplicar ese gasto a la defensa de un país en convivencia armónica tanto interna como externa, cada nueva construcción de puente, muelle, camino, edificio, representa prosperidad nacional, al principio es recomendable encomendar tales obras a particulares que tendrán la posibilidad una vez construidas de explotarlas por un determinado período de tiempo.
Al utilizarse el dinero público, debe entenderse que la mejor inversión es en obra pública, en acercar el progreso proveniente de otras tierras y no en alejarse del mundo como muchos de los habitantes de la ciudad que guardan en su persona antecedentes de la colonia piensan, estos enemigos del progreso son los que consideran que es mejor recibir sin hacer nada, el mejor estilo de la relación planteada entre el colonizador y el sometido.
Lo importante
Alberdi vuelve a traer a la vista situaciones que en la actualidad el propio gobierno sostuvo en su política de estado, éste planteó relaciones comerciales y diplomáticas con determinadas naciones, en algunos casos países que lamentablemente están ubicados del otro lado de las civilizaciones que intentan superarse y se alejó de las naciones que supuestamente intentan ayudarnos, a su vez en sus distribución del presupuesto nacional, lo dividió a su antojo y conveniencia, aplicándolo en áreas totalmente estériles al progreso nacional y utilizando el dinero público a nivel federal como premio o castigo de sus aliados o imaginarios enemigos.
Preguntas
¿Qué pensaría Alberdi de premiar o castigar a los habitantes de las provincias, según la fidelidad de sus gobiernos al gobierno central?
¿Estaría de acuerdo con la ley de coparticipación o plantearía un sistema más práctico?
¿Considerando el avance de diversos cultos y la necesidad de no discriminar a nadie, seguiría manteniendo un apoyo económico exclusivo al culto católico apostólico romano?
GUIA DE DISCUSION ALBERDI TERCERA PARTE CAPITULO VII
RESUMEN: Alberdi expresa que el gasto publico de la nación se compone de lo que cuesta conservar la Constitución, es decir cumplir con los objetivos que ella ha tenido en miras en su preámbulo (constituir la unión nacional, promover el bienestar general, proveer a la defensa común, etc.) Todo el dinero que no se destine para estos objetivos es dinero mal gastado y malversado e implica un robo y una defraudación al contribuyente. Luego clasifica los gastos en gastos de provincia y de la nación; el primero es el gasto ordinario que ocurre por regla general mientras que el segundo es excepcional y se contrae con el objeto de cumplir la constitución. Luego habla de gastos ordinarios y extraordinarios que son realizados por los diferentes ministerios.
IMPORTANTE: Considero que muchas veces el gobierno nacional no sigue los principios constitucionales del preámbulo para efectuar el gasto publico ni a la hora de autorizar el presupuesto porque éste no resulta eficiente ni deviene en una mejor calidad institucional y servicios para los ciudadanos. El estado tiende a gastar demasiado y eso termina generando déficit fiscal que provoca crisis económicas, quizás una mayor austeridad y realizar las erogaciones siguiendo los principios y bases constitucionales resulte mas beneficioso.
PREGUNTAS: ¿ que medidas se podrían tomar para evitar la malversación de fondos por parte de los funcionarios públicos?
Gastos como el de «fútbol para todos» ¿ cumplen con las condiciones que tenia en miras Alberdi para realizar gasto publico?
Con el sistema de coparticipación federal tal como existe en la actualidad, ¿las provincias no se ven limitadas a la hora de poder realizar sus gastos públicos locales?
DANIEL SAAL
PUNTO 1
Alberdi en el último capítulo de su obra, hace referencia acerca del gasto público. Menciona que las erogaciones que realiza el estado debe ser para todos aquellos fines que consagra la CN y más precisamente el preámbulo: “constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad”. Cualquier gasto realizado fuera de esos fines lo considera dinero malgastado. Todos aquellos gastos innecesarios y malgastados que se realizan son un atentado al bolsillo de los contribuyentes ya que son ellos los que constituyen al financiamiento del tesoro mediante el pago de sus impuestos. Alberdi hace distinción entre gasto nacional y provincial, entre gastos ordinarios y extraordinarios. Estos últimos el autor los enumera y alguno de ellos son los que el estado realiza para la construcción de infraestructura, para conflictos bélicos, cuando deben realizar erogación en pos de una emergencia. Si bien son gastos necesarios, Alberdi plantea el hecho de que tomando en cuenta la condición del país (recién desarrollándose) se le empleen esas actividades en manos privadas. Al contrario de estos, los ordinarios son aquellos que el estado realiza de manera periódica y constante. Están a cargo de cinco ministerios, que son: el Ministerio de Interior, que es aquel que tiene a su cargo consolidar la paz interior, promover el bienestar general y establecer la unión nacional. El ministerio de Relaciones exteriores es aquel que debe promover la inmigración extranjera y de capitales y fomentando las relaciones bilaterales afianzando el comercio entre ellos. En tercer lugar está el ministerio de Hacienda que tiene como función principal la dirección y organización de los recursos del Tesoro. Luego está el ministerio de Justicia, culto e instrucción, que tiene la responsabilidad de fomentar, educar a los habitantes de acuerdo a la religión adoptada, afianzar la justicia otorgando y garantizando el acceso a justicia de los habitantes y por último el Ministerio de Guerra y marina que será el encargado de proveer a la defensa común y consolidar la paz interior a través del poder de policía que tienen de manera monopólica.
PUNTO 2
Alberdi sostiene que tanto el gobierno cuando administra mal los recursos del tesoro y cuando las personas roban o eluden sus obligaciones de contribución lo que están generando es un mal inminente a la nación que impacta directamente a todos los compatriotas ya que ellos son los que deben soportar con su bolsillo el déficit que generó el defraudador. Y así también cuando un gobierno de turno se sobrepasa con el malgasto de recursos, con la emisión de deuda, emisión monetaria lo que genera es una gran responsabilidad y un daño muy difícil de reparar para los gobiernos siguientes. Si la persona antes de accionar se pondría a analizar el daño que puede causar y la complejidad que conlleva su reparación debería no estaría dispuesto a realizarlo. Pero como dice Alberdi esto es causa directa del “egoísmo llevado hasta la bajeza”. Lamentablemente nuestra realidad es ésta. Nos acostumbramos a la impunidad, a la corrupción sin tener el coraje de salir a defender nuestros derechos. Es realmente inconcebible que funcionarios públicos elegidos por la voluntad popular se desvíen de los intereses públicos priorizando los propios. Todas aquellas libertades que el autor remarcó durante toda su obra, entiendo que muchas de ellas no se cumplen, alegando el beneficio de la Nación pero no estoy seguro de que realmente respondan a esa justificación sino más bien a un modelo que genera una dependencia de la población hacia la merced del gobierno, que limita el accionar de las personas, controlando y ejerciendo presión en los aspectos más intrínsecos de la persona, como la economía de ellos.
PUNTO 3
Cree que el egoísmo que tienen las personas al evadir impuestos responde a una especie de reclamo o respuesta por la mala administración y la corrupción de los funcionarios públicos?
A que ministerio le destinaria más recursos para lograr un desarrollo mayor en nuestros días?
Existe alguna responsabilidad por el dinero malgastado? Como se podría lograr una rendición de cuentas efectiva?
Economía Política y Economía Argentina
Oscar D. Almaras
Comisión 0746
Resumen:
En el capítulo VII nos describe los objetos del gasto público según la Constitución Argentina. Explica que el gasto público es lo que le cuesta al estado cumplir con los fines de la constitución, es decir, lo que necesita para hacer efectivos los propósitos enunciados en la misma.
Advierte también, acerca las posibles anormalidades que se pueden dar en la formación, el manejo o la aplicación de los recursos fiscales, ya sea a través de la mala inversión por parte del gobierno o del fraude a la contribución que le impone la ley, cometido por el ciudadano, y que en definitiva sus efectos terminan recayendo sobre el resto de la ciudadanía que tiene que cargar con todos los costos de estas maniobras.
Por otra parte, hace la distinción entre los gastos que corresponden al gobierno federal según su organización y los que corresponden a cada provincia, clasificándolos también en ordinarios y extraordinarios conforme a las cuestiones que deban atender.
Lo Novedoso:
En la visión de Alberdi los recursos del estado estaban para satisfacer las necesidades del gobierno en el cumplimiento de los propósitos enunciados por la Constitución Nacional, pero ya en esa época nos advertía acerca de la malversación que se podía hacer de estos fondos ya sea por la mala inversión o por dar a esos fondos un destino distinto al previsto por la norma por ejemplo para satisfacer intereses personales o de un grupo determinado.
Otra cuestión importante es el destino de la inversión. En este punto hace una comparación con los Estados Unidos, señalando que gran parte de su gasto público estaba destinado a la construcción de caminos, canales, a la instrucción y reformas útiles que hacen a la producción, en tanto que en nuestro país, las tres cuartas partes del gasto nacional se destinaban al ministerio de la guerra y no al desarrollo de la infraestructura necesaria para mejorar la producción. Actualmente se observa que gran parte se destina a sostener un aparato estatal improductivo.
Preguntas:
1. ¿Cree que los gobiernos tienen responsabilidad en el aumento de la actividad comercial informal debido a la gran presión impositiva que ejercen?
2. ¿Considera que el gasto destinado al servicio de las personas empleadas por el estado para conseguir los fines de la CN, es adecuado?
3. ¿Cómo vería Alberdi la participación del estado en el gerenciamiento de empresas como Aerolíneas Argentinas considerando los recursos asignados para ese fin?
Resumen:
El gasto público se compone de todo aquello que sea necesario a los fines de cumplimentar los principios y garantías que prevé nuestra Constitución y todo el que sea efectuado por fuera, se considera dinero mal gastado.
Es importante destacar que el dinero que se utiliza para hacer frente a tal gasto público proviene de las rentas privadas de los habitantes de la Confederación que, en virtud de ello, están obligados a contribuir. Todo aquel que no cumpla con este deber se considera en clara infracción a la ley, a la vez que estaría perjudicando a sus pares por cuanto estos últimos tendrán que cubrir con sus bolsillos el déficit generado por el defraudador.
Novedoso o importante:
Me parece importante señalar como Alberdi sostiene que el gasto efectuado en caminos, muelles, puentes -obras públicas más precisamente hablando- no supone una disminución del Tesoro en sí mismo sino que más bien se lo debe entender como una forma de fecundarlo y multiplicarlo.
Sin embargo esto es así en tanto y en cuanto la Nación de que se trate haya cumplido en la forma adecuada con los gastos de carácter ordinario que son de su competencia, pudiendo ocuparse entonces de los gastos de segundo rango por así decirlo. Dado que en nuestro caso particular esto no sucede, las leyes deben ser más sobrias en lo que respecta a cargar al Estado de la obligación de cumplir con estas cuestiones más aun teniendo en cuenta que dichas obras pueden ser llevadas a cabo, al menos por un tiempo, por empresas de índole privada que tomen a su cargo el deber y el compromiso de efectivizarlas.
Tres preguntas al autor:
1)- Para lograr un exitoso orden en lo que a economía actual respecta ¿qué cuestiones serían más precisas que se atendieran primero?
2)- ¿Cómo reducir el gasto público sin perjudicar a los más necesitados?
3)- ¿El nuevo gobierno debería ubicar en su agenda de tareas una discusión respecto a la “Ley de Coparticipación Federal” actual?
En el capitulo VII se habla de la Clasificación y división general de los gastos.
Según la Constitución, el gasto público de la Confederación se compone de todo lo que cuesta constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, preveer a la defensa común, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad, es decir, todo lo que cuesta el conservar su Constitución, encerrado en ese fin el tesoro Nacional.
Los gastos se dividen en Nacionales y de provincia. Cada Provincia tiene a su cargo los gastos de su gobierno local, a expensas de su Tesoro de Provincia, cabe distinguir que hay gastos de provincia propiamente dichos y los nacionales ocasionados en provincia. También se dividen los gastos ordinarios y extraordinarios.
Para clasificar y dividir los gastos, la Constitución nos da la regla en su art. 84 dividendo en 5 Ministerios.
1) Gastos del servicio o Ministerio del interior; compuestos d ellos que cuesta el estrechar la unión nacional, consolidar la paz interior y promover el bienestar general, son ejemplos de esto la necesidad de pagar el servicio de agentes militares, costear trabajos y obras públicas, policia, etc. Para esto debe tener presente que la constitución felizmente exige pocos empleados ya que un gran numero de estos no garantiza el buen servicio.
2) Gastos Del servicio de las relaciones extranjeras; orden de trabajo que este debe poner en obra para dar a conocer las ventajas de la Confederación , para atraer poblaciones extranjeras. Para mantener la amistad con otras naciones, la Constitución, en su art. 27 establece un sistema que consiste en firmar tratados generosos de igual tener con todas las naciones.
3) Gastos del servicio en el Ministerio de hacienda, constan principalmente de lo que cuesta el servicio de los agentes empleados en al dirección, recaudación y contabilidad de las rentas del Tesoro, para economizar los hay que emplear pocos agentes.
4) Gastos del Ministerio de justicia, culto e instrucción; destinados a satisfacerlas necesidades dela Confederación de orden intelectual, moral y religioso, se componen de quecuesta el sostenimiento del culto nacional, el sueldo de los empleados,y los establecimientos de la administración de justicia, los tos muchos establecimientos, trabajos y empleados destinados a propagar la instrucción útil en el pueblo de la confederación.
5) Gastos del Ministerio de guerra y marina; compuesto de lo que cuesta proveer a la defensa común, radicar la unión nacional y consolidar la paz interior, por el sostenimiento de fuerzas materiales al servicio del poder encargoado de hacer efectivos los fines de la Constitución
Como Gastos extraordinarios, caracteriza a los efectuados en obras públicas, como caminos, muelles, etc. los cuales pueden ser de gran utilidad para el aumento del tesoro.
Termina enunciando que no todo el gasto público consiste en el que satisface las necesidades de la sociedad de orden publico por conducto del gobierno, sino también el que hace la misma directa e inmediatamente por la mano de sus habitantes, sin intermedio de la autoridad. Es gasto es obra exclusiva del espíritu público.
Alberdi termina el capitulo diciendo que la diferencia entre colonia y República es que el gobierno era el almo, y hoy es el sirviente.
1) teniendo en cuenta que el autor cuando se refiere a lso gastos de los Ministerios siempre hace hincapié en la necesidad de contar con poco personal, Considera excesivo el número de empleados estatales?
2) Que cambios cree necesarios en la ley de coparticipacion federal?
3) Que opinión le merece el reciente fallo de la Corte Suprema en relación a la inconstitucional de la detracción del 15 por ciento de la masa de impuestos coparticipables que realiza el Estado nacional desde 1992 para financiar a la Anses, que favorece a las provincias de Santa Fé y San Luis?
Alberdi nos dice que el gasto público, según la Constitución, se compone de todo lo que cueste constituir la unión nacional, afianzar la justicia, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad. Todo dinero gastado en otros objetos es dinero malgastado y malversado. El tesoro público es el resultado de las contribuciones de sus habitantes con el servicio de sus rentas privadas y sudor. Debe considerarse un crimen si el gobierno lo invierte mal o si el ciudadano defrauda su contribución.
Los gastos se dividen en nacionales y provinciales. Cada provincia, a través de su gobierno propio, es responsable de sus gastos a expensas de los tesoros provinciales. La Nación debe hacerse cargo de los gastos ocasionados en las provincias por la aduana, correos, venta de tierras públicas y ejército. Los gastos en obras públicas para promover el bienestar general está repartido entre las provincias y la Nación.
La Constitución considera los gastos como ordinarios o extraordinarios según la regularidad y la posibilidad de proveerlos.
Los gastos de Hacienda deben enfocarse en lo que cuestan los agentes empleados en la dirección, recaudación y contabilidad de las rentas del Tesoro Nacional. Los gastos de justicia deben ser destinados a satisfacer las necesidades de orden intelectual, moral y religioso. En cuanto a los gastos en Educación, deben partir del principio de libre enseñanza, debiendo abrirse las arcas con facilidad para pagar la enseñanza de artes y oficios, lenguas vivas y todo conocimiento positivo para el pueblo. Los gastos de Defensa deben estar orientados a la defensa común.
IMPORTANTE:
Alberdi nos habla de dos temas claves, el gasto público y el Tesoro Nacional; considera sumamente importante el buen uso del gasto público lo que trae, como consecuencia, el bienestar general y el desarrollo de la Nación. Uno de los medios que tiene el estado de economizar gastos es mediante los sueldos de los empleados, los cuales deben ser agentes capaces y honrados, evitando así burocracias ineficientes y sobrepoblación de empleados para el estado, generando este gasto un déficit fiscal contrario a los principios constitucionales.
PREGUNTAS
¿Qué gastos considera que debería eliminarse hoy del Tesoro nacional?
¿Qué modificaciones deberían hacerse actualmente a la Ley de Coparticipación Federal para ser eficiente respecto a todas las provincias?
¿Qué diría Alberdi sobre los gastos públicos actuales del estado Nacional?
Todo dinero público gastado en otros objetos que no sean los que la Constitución señala como objetos de la asociación política argentina, es dinero malgastado y malversado. Así los gastos de provincia no son del resorte del Tesoro nacional en la Confederación Argentina. Los gastos del servicio de aduanas, del de correos, de la venta de las tierras publicas, los gastos del ejército, que son todos gastos nacionales, se dividirán naturalmente en tantas secciones locales como las provincias en que se ocasionen. Se dividen por la Constitución argentina los gastos generales en ordinarios y extraordinarios.
La Unión nacional, es decir, la reinstalación constitucional de la integridad nacional del pueblo argentino, y la paz y el orden interiores de la República, son con razón, a los ojos de la Constitución, el primero y más grande objeto del gasto público. En cuanto al gasto exigido por’ las obras públicas para promover el bienestar general, también es carga que la Constitución reparte entre el gobierno interior de la Nación y el de cada una de las provincias confederadas. Otro medio de economizar gastos en sueldos de empleados, es emplear pocos agentes, hábiles y honrados, en lugar de muchos ineptos y sospechosos. La justicia, cuyos agentes y establecimientos debe pagar el Tesoro de la Confederación, no es la ordinaria de carácter civil y penal, reservada a los deberes fiscales del tesoro de provincia. Los gastos del culto se compondrán de lo que cueste el sueldo de los ministros de la Iglesia nacional; la construcción, refacción y sostenimiento de los templos; la fundación y el sostenimiento de seminarios para la educación del clero nacional, y el servicio de las misiones que se destinen a la conversión pacífica de los indígenas. Si el patronato es protección, también es cierto que la protección no se impone, sino se ofrece. En este sentido puede existir el derecho de la Santa Sede para permitir o rehusar a los gobiernos que lo ejerzan en favor de la Iglesia católica. La religión cristiana es el único medicamento que puede curar a la República Argentina de aquel achaque, en que viene a parar una gran parte de las causas de su malestar político y moral.
En cuanto a la instrucción primaria, la Constitución la ofrece gratuita; pero gravita sobre el tesoro local de cada provincia. Si la dirección del gasto público es un medio de reglar la educación, las arcas del Tesoro deberían abrirse con doble facilidad cada vez que se trate de pagar la enseñanza de artes y oficios, de lenguas vivas, de materias exactas, de conocimientos positivos para el pueblo, en lugar de gastar dinero en difundir la metafísica, que conviene más a las épocas de demolición que a las de creación y organización.
Gastos del ministerio de guerra y marina. – Se componen ellos de lo que cuesta proveer a la defensa común, radicar la unión nacional y consolidar la paz interior, por el sostenimiento de fuerzas materiales al servicio del poder encargado de hacer efectivos esos fines de la Constitución.
Los gastos extraordinarios pueden ser de grande utilidad para el aumento del Tesoro, si se hacen de un modo reproductivo.
Importante : es sorprendente como describe al Gasto Público en cada sector del gobierno. Me sorprendió la importancia que le dió a la Iglesia Católica. Es interesante también cuando explica las compensaciones y lo relaciona con la dignidad. La explicación de los gastos ordinarios y extraordinarios nos hace comprender aún más su ideología y compararla con la actualidad.
Describe como el Estado tiende a gastar demasiado.
Preguntas:
1) Que debería hacer el nuevo gobierno para reducir el Gasto Público?
2) Considera usted que la Ley de cooparticipación necesita un cambio ? Cual sería ese cambio ?
3) Considera ud. que los que malversen fondos públicos deberían además de ser castigados , obligados a devolver el dinero ?
Resumen
Alberdi en éste capítulo se refiere al gasto público como “todo lo que cuesta el conservar su Constitución”, teniendo en cuenta los objetos que se ha propuesto, establecidos en su preámbulo (Unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad), ya que todo dinero gastado en otros objetos que no sean los señalados por la Constitución, es dinero malgastado o malversado.
Los gastos primero se dividen en nacionales y provinciales, en segundo lugar en ordinarios y extraordinarios, según la regularidad de su ejercicio y la posibilidad de poder preveerlos a través del presupuesto que la Constitución manda ejecutar cada año, para la transparencia y legalidad en el manejo del tesoro nacional y su discreto empleo. Según lo establece la Constitución los gastos ordinarios están a cargo de cinco ministerios que son los encargados de su administración y los gastos extraordinarios según se refieran a éstos ministerios la empresa, la obra o la necesidad urgente o extraordinaria que los motive.
Importante o novedoso
Como Alberdi nos habla del gasto público, el cual debe ser utilizado en forma responsable y austera por parte del gobierno de turno, respetando las disposiciones establecidas en la Constitución Nacional, como el bienestar general, paz y libertad para todos los habitantes, no la mala inversión para satisfacer necesidades de un determinado grupo.
Preguntas
¿Cree que la distribución de los gastos previstos en la ley de presupuesto son justos?
¿El dinero destinado en futbol para todos no tendría un mejor destino en otra área, como salud, educación?
¿Lo planteado por usted respecto del funcionamiento de los ministerios, en la actualidad se cumplen?
RESUMEN
Alberdi en su último capítulo nos cuenta ¿Cómo utilizar el tesoro nacional? Nos dice como regla a su uso los elementos determinados en el preámbulo de la ley suprema por ejemplo constituir la Unión nacional,afianzar la justicia,consolidar la paz interior, proveer a la defensa común,al bien estar general, y para garantizar la libertad.
Entonces el dinero necesariamente debe utilizarce para piner en ejecución los principios que la Constitución nos ofrece es decir, que todo dinero gastado por el gobierno en otros fines es dinero mal gastado o malversado. Siendo estos los Límites al uso del tesoro de la nación.
Primero nacionales y luego los provinciales por medio de los ministerios como el del interior,de relaciones exteriores, de Justicia y Culto,y de Guerra y Marina.
Agrega que pueden existir gastos extraordinarios generalmente para infraestructura tan necesaria para la nación para el crecimiento social y económico. Por ello el gobierno antes era el amo del pueblo y hoy es su sirviente por ello hoy somos una república
IMPORTANTE
Considero importante la idea de como utilizar el tesoro de la nación pero nos cabe decir que actualmente dicho gasto es totalmente a la idea de Alberdi la cirrupcion de los ministerios y los funcionarios públicos está demostrada en la pobreza de determinados puntos del país necesariamente debemos cambiar dicha situación.
La pobreza crece día a día y el gasto de la nació se invoca a fines innecesarios que están fuera de las miras constitucionales y de alberdi en su análisis del tema por ello lo único que lo cambiaría es la educación y el respeto a la constitucion acompañado de un crecimiento económico sostenido.
PREGUNTAS
¿Argentina en términos generales considera que contradice los principios constitucionales en cuanto al gasto del tesoro de la nación?
¿Cómo cree que saldremos de este uso o modo equivocado de utilizar el tesoro de la nación?
¿Considera que argentina en lgun momento de la historia utilizó eficientemente los recursos públicos?
María de Lourdes Domato
D.N.I. 38.012.797
Comisión 0682
Tercera Parte – Capítulo VII
Resumen del texto
Alberdi enfatiza en este capítulo que forman parte del gasto público todas las actividades tendientes a llevar adelante los fines establecidos en el preámbulo de la Constitución Nacional, pudiéndose mencionar entre ellos el afianzamiento de la unión nacional, la justicia, la paz interior, la defensa común, el bienestar general, y la libertad. Por otra parte, el gasto público, el cual deriva de las contribuciones de los habitantes que forman el Tesoro público, que sea empleado en otras miras distintas será considerado dinero malgastado o derrochado y malversado. El autor realiza una distinción entre gastos nacionales y provinciales, entendiendo que existe un gasto general destinado a los fines establecidos constitucionalmente y que proviene del Tesoro Nacional; y que, a su vez, cada provincia se hace responsable del gasto realizado localmente a través del Tesoro Provincial. Asimismo, los gastos pueden ser clasificados en gastos ordinarios y extraordinarios. Alberdi hace referencia exhaustivamente a los gastos que ordinariamente deben realizar los diferentes ministerios. Por ejemplo, el Ministerio del Interior se encargará de costear obras públicas; el Ministerio de Relaciones Extranjeras tendrá a su cargo erogaciones relacionadas con una mayor publicidad del país con el fin de lograr el ingreso de inmigrantes y capitales extranjeros; el Ministerio de Hacienda gastará en emplear personal y fijar establecimientos a los fines de dirigir, recaudar y contabilizar los recursos del Tesoro. Por su parte, los gastos del Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción serán destinados a sueldos de empleados, establecimientos, oficinas, la Corte Suprema y otros tribunales, y educación; y por último, el Ministerio de Guerra y Marina realizará erogaciones relacionadas con el servicio de la guerra y la defensa común. Finalmente, el autor expresa que constituyen gastos extraordinarios los que se efectúan en obras públicas tales como la construcción de caminos, muelles y puentes, y los que están ligados a la defensa dentro y fuera del país en caso de guerra y a las urgencias de las provincias.
Aspectos importantes o novedosos del texto
A mi entender, me resulta un tanto ideal la concepción alberdiana de obtener, mediante el gasto público, los fines que establece la Constitución Nacional en su preámbulo. Lamentablemente, en nuestro país se observan cada vez más gastos que no tienen como resultado el bienestar general, que son tan sólo para el beneficio de unos pocos o que implican una serie de intereses que quizás no condicen con las preferencias de los votantes, y que finalmente conllevan un gran déficit fiscal. Incluso, hoy en día, resulta utópico que cada uno de los Ministerios, tal como nombra Alberdi, realice gastos de manera eficiente con el objetivo de mejorar la vida de todos los ciudadanos. Cabría preguntarse si en la realidad sucede lo mencionado por Bastiat en su conocido trabajo “Lo que se ve y lo que no se ve”. ¿Los gastos públicos siempre sustituyen gastos privados? Podemos entender que los gastos públicos son sostenidos por las contribuciones de los habitantes, y de esta manera, al contribuir para la Nación, se privan de realizar algunos de sus propios gastos. Por lo tanto, considero que sería más que necesario analizar con precaución con qué objeto y para qué fines van a ser gastados los recursos y contribuciones de todos y comprender que quizás una mayor austeridad o un gasto más eficiente y destinado a fines específicos – y no a publicidades, teatros, muelles y puentes que no son usados por nadie – podrían ser un vaso de agua refrescante en el desierto para nuestro país.
Preguntas que le haría al autor
1) ¿Qué opinión le merecen las erogaciones realizadas por nuestro gobierno relacionadas con la publicidad oficial?
2) ¿Cuál sería el medio más eficaz para lograr que los gastos públicos sean destinados a aquellas necesidades que realmente sufren todos los habitantes y no sean desviados a intereses de particulares?
3) ¿Considera que actualmente la religión, precisamente, el culto Católico, debe ser financiado por las contribuciones de todos?
Objetos del gasto público según la Constitución Argentina
Alberdi manifiesta que “el gasto público de la Confederación Argentina, según su Constitución, se compone de todo lo que cuesta el constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad», es decir de todo lo que cuesta el conservar su Constitución, y plasmar en la realidad los objetivos de su preámbulo. Para ellos se destina el Tesoro público, que los habitantes del país contribuyen a formar con el servicio de sus rentas privadas y sudor.
Sostiene la máxima de que todo dinero público gastado en otros objetos que no sean los que la Constitución señala como objetivos de la sociedad, es dinero malgastado y malversado, y que éstos son el límite de las cargas que la Constitución impone a los habitantes de la Nación en pos del beneficio común y general. Encerrado en ese límite el Tesoro nacional, tiene un fin santo y supremo; y quien le distrae de él, comete un crimen, ya sea el gobierno cuando lo invierte mal, ya sea el ciudadano cuando roba o defrauda la contribución que le impone la ley del interés general, que a fin de cuentas es soportado por los contribuyentes.
Luego procede a diferenciar los gastos nacionales y los de provincia, sosteniendo como regla general que todo gasto es local o provincial; el gasto general, esencialmente excepcional y limitado, se contrae únicamente a los objetos y servicios declarados por la Constitución, como una delegación que las provincias hacen a la Confederación, o Estado general. Y continúa su exposición señalando las diferencias de los gastos ordinarios y extraordinarios que realizan los diferentes ministerios.
Importante/Novedoso.
Señalo la máxima de administración que dispone Alberdi según la cual “gasta siempre mal el que gasta de lejos, porque gasta en lo que no ve ni conoce”, relacionado con los conceptos de conocimiento disperso y relevamiento de las preferencias que hemos visto en el libro “El foro y el bazar”. De este modo se consagra el sistema descentralizado y federal, siendo el que permite una mejor articulación del mecanismo de “voz” y “salida”.
Preguntas.
Teniendo en cuenta la composición del gasto público actual, ¿qué elementos exceden los objetivos constitucionales?
¿Considera adecuado limitar el presupuesto destinado a mantener la burocracia estatal y la manutención de los llamados “ñoquis” del poder?
Respecto a la malversación de fondos, ¿cómo puede perfeccionarse el mecanismo de rendición de cuentas para quienes administran el tesoro público?
Resumen
Este artículo, nos cuenta sobre el tesoro de la nación, explicándonos cuál es el objeto de dicho fondo; Que es el mantenimiento de la constitución nacional, la unión nacional, la justicia, la paz interior, la defensa común, la libertad y el bienestar general.
Afirmándonos que el tesoro no puede ser utilizado para otro objeto diferente, o intereses personales. De ocurrir esto se debe sancionar fuertemente al autor.
Destacado
Me sorprende que a pesar de que el libro fue escrito hace tanto tiempo, este fenómeno sigue vigente hoy en día donde se notan claros fraudes al tesoro nacional donde los funcionarios parecen elegir arbitrariamente a donde destinar los fondos, y cuantyo se le dara a cada uno; y también pudo verse como sanción política hacia provincia que le quiten parte de los fondos correspondientes a esta.
Preguntas
¿No debería formarse las normas sobre el tesoro nacional asegurándose de que este sea mas difícil de malversar?
¿Cree que el poder judicial actualmente está a la altura? O que justamente por ser el autor un funcionario público debería ponerse penas mucho más altas que funcionen de forma ejemplificadora, asustando a posibles futuros funcionarios que se vean tentados a hacer lo mismo
¿Este problema de la malversación se ve solo en nuestro país o es un fenómeno a nivel global; Cómo se encuentra el resto de los países en este sentido?
En este segmento, el autor desarrolla el concepto de gasto público, y como se encuentra íntimamente relacionado con la formación del Tesoro nacional, ya que mediante él, el Estado realiza tales erogaciones. En primer lugar, indica que el gasto publico es todo aquel desembolso realizado por el Estado con el objetivo de cumplir lo dispuesto por la Constitución Nacional en cuanto a objetivos trazados, tales como los dispuestos en el Preámbulo (promover el bienestar general, constituir la unión nacional, afianzar la justicia, etc.). También considera que el Tesoro nacional debe estar orientado a los egresos del gobierno central, siendo que existen Tesoros provinciales y locales, los cuales deben cubrir las expectativas de sus respectivos gobiernos, sin dependencias del Estado nacional.
Alberdi diferencia entre dos tipos de gasto público, que son el gasto ordinario y el gasto extraordinario, que se diferencian por su previsión en la ley de presupuesto correspondiente, como así también en su destino. El gasto ordinario puede dividirse en subgrupos, siendo la base del funcionamiento de diversos ministerios del poder central, tales como el ministerio del interior, el servicio de relaciones exteriores, la hacienda, la justicia, el culto y la educación como así también el ministerio de guerra y marina.
En cuanto a los gastos extraordinarios, el autor considera que siempre deben hacerse para que el Estado vea magnificado su Tesoro, siendo esto que el destino al que debe atenerse este tipo de gastos sea para reproducir el capital estatal. Sin embargo, entiende que podría dejarse que este tipo de obras públicas se efectúen mediante intervención privada, para no sobrecargar el presupuesto con el que cuenta el Estado durante ese determinado período. Es decir, confía en que los habitantes de nuestro territorio apelen a un espíritu público, que provea a la sociedad toda de ciertas obras que beneficien a su conjunto.
También cree que la ley de presupuestos que debe realizar el Congreso Nacional por cada periodo anual, es una herramienta clave para analizar el progreso de un país. En nuestro caso, durante esas épocas, el gobierno central destinaba gran parte de sus recursos a los ejércitos y a la defensa del país, por lo tanto, consideraba un derroche sin sentido este tipo de decisiones, siendo que países mas desarrollados aplican su presupuesto sobre políticas mas beneficiosas como la educación y la construcción de caminos y puentes.
Preguntas
– ¿Qué hubiera considerado el autor de la intervención del Estado central sobre el gasto público de distintas provincias, siendo que no poseen los recursos suficientes para ejecutar su presupuesto?
– ¿Entiende viable el desarrollo de nuestra burocracia, siendo que no apunta a un funcionamiento eficaz y además se ve modificada por cada gobierno entrante?
– ¿Cómo podría explicarse el aumento exponencial del monto presupuestario durante los últimos periodos anuales, si apuntaban a cubrir las mismas necesidades?
Almaraz Vittone Carolina
DNI: 38070179
Comisión: 0682
Guía de discusión capitulo N° 7
Resumen:
Alberdi se dedica a analizar el gasto público, y nos da las pautas para saber si el mismo se malgasta o no, no debe desviarse de lo que establece la Constitución, como así también explica cual es el gasto nacional y cual el provincial y si se trata de ordinarios o extraordinarios, según la regularidad periódica de su ejercicio y la posibilidad de preverlos en el cálculo o presupuesto de ellos. Nos explica cuales son los gastos del ministerio del interior, del servicio de relaciones exteriores, del ministerio de hacienda, del ministerio de justicia, culto e instrucción (libre enseñanza) y del de guerra y marina. En el último apartado analiza el gasto extraordinario, explicando que el mismo puede ser de gran utilidad para el aumento del tesoro si se hacen de modo reproductivo, destaca, una vez más, la importancia de delegar las obras públicas en manos de privados, por la situación del país.
Lo destacado:
Me parece interesante destacar es que Alberdi al analizar el gasto del ministerio de hacienda, indica un medio de economizar gastos en sueldos de empleados, es emplear pocos agentes, hábiles, honrados, en lugar de muchos ineptos y sospechosos, hoy en día es más común ver en la administración pública a una gran cantidad de empleados de dudosa habilidad, lo que una vez más me demuestra que no hemos seguido las premisas de nuestro autor. Otro punto que me pareció interesante, es la comparación que realiza entre la Argentina, Estados Unidos y Chile con respecto al gasto de guerra, demostrando que nuestro país tiene un gasto excesivo en el mismo y lo que hace que el gasto este mal destinado por la tradición del país en ese momento, demostrando que son las consecuencias de las políticas internas del país. Por último voy a plasmar un párrafo que Alberdi escribió al final del capítulo que demuestra la importancia que tiene el ciudadano en la formación del país y que el mismo debe tener una gran participación “ser libre no consiste en pasar la mañana en el café, renegando a voz de cuello de todos los actos del gobierno; es vivir en continuo afán y en perpetua solicitud, es tomar parte en todo lo que interesa a la Nación; sobre todo es vivir con la mano en el bolsillo, -fisco doméstico y casero-, en el que tiene cada ciudadano un poder de acción pública más eficaz que el fusil de la guardia nacional, herramienta inútil para hacer caminos y puentes, para hermosear ciudades».
Preguntas:
1-Teniendo en cuenta lo escrito sobre los empleados públicos, ¿Cuál es su opinión sobre el gasto que en la actualidad se destina al mismo?, ¿Cree que es desmedido?
2-Con el crecimiento de otras religiones en nuestro país, ¿Qué opinaría Alberdi ante esta situación, cuál debería ser la solución que brinda la Constitución al respecto?
3-¿Cuál sería su opinión sobre el gasto que nuestro país realiza hoy en el gasto destinado a la guerra, ejércitos, etc.?
Resumen
Alberdi, nos explica en el capítulo 7 lo importante que es evitar la malversación de fondos del tesoro nacional. Esto, se da cuando se utiliza parte del dinero del tesoro nacional para fines fuera del objeto de este; entre los principales, se encuentra el derecho a la libertad, justicia y bienestar social.
También, nos hace comprender que es muy fácil que los funcionarios se vean tentado a utilizar este tesoro en intereses personales, por lo que se debe poner suma atención a la búsqueda de mecanismos tendientes a evitarlo.
Sorprendente
Me sorprende que los autores de este delito (el de la malversación) se traten de gente altamente capacitada con buenos cargos políticos y, sobre todo, que al poseer justamente estos cargos políticos considerados de prestigio, debieran cuidar su honor, siendo este delito destructor de su honor y reputación. Por ende, marcaría el fin de su carrera política, de forma que no logro entender como alguien en esa situación puede desperdiciar toda una vida de honor y prestigio por un poco de dinero extra, ya que es gente que no pasa necesidades; en cambio, si podría entenderlo de gente que no logra satisfacer sus necesidades básicas.
Preguntas
¿Cómo regula el tesoro nacional el resto de los países?
¿Daria mejor estabilidad un sistema parlamentario en lugar del nuestro?
¿Qué país podríamos decir que posee el mejor cuerpo normativo sobre esta materia? (Como para poder comparar).
Resumen
Según el pensamiento expresado por Alberdi que los presupuestos votados desde hace 22 años son inconstitucionales, ya que tienen asignados recursos para funciones no establecidas por la Carta Magna para el Estado.
Alberdi también manifiesta lo que dice la Constitución acerca de subsidiar sectores, comprar micros y aviones antigranizo, o tener empresas estatales: “El Gobierno que se hace banquero, asegurador, martillero, empresario de industria en vías de comunicación y en construcciones de otro género, sale de su rol constitucional. Si alguna de esas industrias fuesen atribuciones suyas y no de los particulares, por utilidad del Estado convendría desprenderle de ellas, y deferirlas a los particulares”; y señala: “La idea de una empresa pública es absurda y falsa en su base económica. En cualesquiera de ellas que se lance el Estado, tenemos al gobierno de labrador, de fabricante o de mercader; es decir, fuera de su rol esencialmente público y privativo que es legislar, juzgar y administrar”.
Y finalmente, refiriéndose a la obra pública señala: “Los caminos y canales (obra pública) comprendidos por el antiguo derecho en el número de las cosas públicas, serán por la Constitución de propiedad de quien los construya. Desde entonces, los caminos y canales pueden ser cosas de propiedad privada”.
Preguntas:
1) Como piensa que va a poder manejar el asunto el próximo gobierno debido al presupuesto aprobado por la gestión del gobierno anterior?
2) Esta de acuerdo con la ampliación de la coparticipación? ¿ piensa que se respeto ese derecho?
3) Si usted fuera el presidente del banco Central, que medidas tomaría al respecto?
RESUMEN
La idea general del texto establece que todo dinero empleado en una cuestión no referida a los objetivos planteados en nuestra Constitución Nacional, es dinero malgastado. La concepción de que el Tesoro Nacional sólo invierte sus recursos buscando satisfacer los objetivos de asociación política que enuncia nuestra ley fundamental es la que avala y estimula a los habitantes a aportar parte de sus rentas privadas al mismo. De otra manera, este sistema no funcionaría. Sin embargo, para lograr estos objetivos es necesaria la existencia del gobierno, cuyo costo se divide como los servicios de su cargo. Podemos distinguir entre los gastos nacionales y provinciales –si bien no debe confundirse el gasto provincial con el nacional que toma lugar en la provincia-. Todos ellos son destinados al Ministerio del Interior, a la Unión Nacional, al Ministerio de Relaciones Extranjeras, al Ministerio de Hacienda, al Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción y, finalmente, al Ministerio de Guerra y Marina. Por otra parte, Alberdi hace referencia a los gastos extraordinarios y cómo los mismos pueden resultar de gran utilidad, pero establece que para que esto suceda deben realizarse de modo reproductivo.
LO NOVEDOSO E IMPORTANTE
Habiendo listado anteriormente los departamentos u organismos a los que se encuentra destinado el Tesoro Nacional de todos los ciudadanos argentinos, considero relevante puntualizar de qué forma está comprendido en cada clasificación. En el caso del Ministerio del Interior, los gastos se realizan buscando estrechar la unión de la nación, afianzando la paz y promoviendo el bienestar general de quienes la integran. En cuanto a la Unión Nacional, puede ser entendido en algunos aspectos como el más importante objeto de gasto público y tiene como meta reinstalar la integridad nacional del pueblo, estableciendo paralelamente la paz y el orden internos. El Ministerio de Relaciones Extranjeras, por otra parte, hacen referencia a las obras que deben ponerse en funcionamiento con el fin de mostrar al resto de las naciones las ventajas del régimen implementado en nuestro país y, de esta forma, las beneficiosas condiciones existentes para dar la bienvenida a nuevos capitales extranjeros. El Ministerio de Hacienda, a su vez, costea el servicio de agentes encargados de la dirección, recaudación y contabilidad de las rentas del Tesoro Nacional. El Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción precisa una parte de las rentas para sostener el culto nacional y todo lo que eso implica. Por último, el Ministerio de Guerra y Marina es el encargado de proveer una defensa común, que permita consolidar la paz y unión nacionales.
TRES PREGUNTAS AL AUTOR
– ¿Existe algún otro sector nacional al que debería destinarse parte de nuestro Tesoro Nacional actualmente no tenido en cuenta?
– ¿Puede confundirse, en la práctica, un gasto ordinario con uno extraordinario?
– ¿Qué consecuencias pueden traer aparejadas, y de qué forma afectarían a la nación, los gastos extraordinarios que son implementados de un modo no reproductivo?
Alumna: María Luján Tomasino.
Guía de discusión: Capítulo VII.
Resumen: Este capítulo nos habla de los objetos que los gastos de la nación poseen, tales como afianzar la justicia, la defensa común, la paz interior, el bienestar general y los beneficios de la libertad. Alberdi sostiene que todos aquellos gastos no dirigidos a la satisfacción y construcción de dichos fines, no son más que dinero malgastado y malversado.
Para poder cumplir con estos gastos, los habitantes del país contribuimos a formar el Tesoro para sostenerlos, a través de nuestras rentas privadas y el sudor de nuestro trabajo.
El gobierno, muchas veces puede distraer a este Tesoro de sus verdaderos fines, aunque no es él quien nos defrauda sino otro compatriota.
Para llevar a cabo los objetos dispuestos por nuestra Constitución, la misma establece una división de los gastos para su mejor y mayor administración. De esta manera existen divisiones tales como los gastos nacionales y provinciales; gastos ordinarios y extraordinarios. Estas divisiones son de gran importancia para la conformación del presupuesto de la Nación, pudiendo determinar con qué recursos se cuentan para satisfacer tantos gastos tengan.
La división que efectúa la Constitución a cerca de los ministerios que conforman el gobierno nacional, nos permite ver los gastos pertenecientes a cada uno de ellos, y de esta manera llevar una clara y administrada contabilidad. Todos ellos, nos acercan más a los objetos a los cuales queremos llegar para la prosperidad y bienestar general de la Nación, pudiendo atesorar recursos para el aumento del Tesoro.
Importante: Me parece importante resaltar la manera en la que Alberdi concluye este capítulo, en tanto dice que, el gasto público no solo comprende estos sino también aquellos llevados a cabo por la mano directa de los habitantes, algo que él denomina como “espíritu público”. Este es fundamento de la libertad que todos los que habitan la Nación pueden gozar y la cual la Constitución garantiza, permite la organización del país en manos de las propias personas que los conforman, con mayores sacrificios pero con la libertad y voluntad que los llevará al bienestar propio y común y a hacer de la acción pública poder indispensable para los intereses de la Nación, en la cual el gobierno no sea más que un mero sirviente de todos los contribuyentes.
Tres preguntas al autor:
1- ¿Cuál es su opinión respecto a los gastos destinados a fines sociales? ¿Considera que son gastos que atacan la libertad y no se destinan a fuentes de las que ellos mismos puedan sacar sus propios frutos y de este modo contribuir con el Tesoro?
2- ¿Cuál sería su visión respecto a la cantidad de empleados públicos que son impuestos por intereses del gobierno?
3- ¿Cómo ve la situación que se está dando en la actualidad en donde el gobierno saliente agrega nuevos gastos al electo, con un presupuesto que probablemente no podría satisfacer todos ellos? ¿qué medidas se deberían llevar a cabo previo o posteriormente a que el gobierno asuma?
RESUMEN
En esta última parte del libro Alberdi hace mención al objeto del gasto público conforme a la CN.
Por lo tanto, su fin es mantener la paz, defender al país y asegurar los beneficios de la libertad que la propia CN reconoce.
Para ello es dable distinguir entre las gastos de la Nación de los gastos de las provincias, estas últimas conservan poderes no delegados a la Nación, entre ellos el de gobernar y administrar sus recursos, puesto que en ámbito local se conocen mejor las necesidades. Claro que en todas las provincias hay necesidad de realizar gastos que n o son estrictamente de carácter local, sino que son nacionales y hacen a asegurar el bienestar del país, en estos, es donde entra a jugar el Tesoro Nacional.
En virtud de ello, la CN hace referencia a la separación entre los gastos ordinarios de los extraordinarios. Estos últimos se limitan a los gastos urgentes, o a obras públicas, y defensa en tanto sirvan al progreso de la nación.
Por su parte, los gastos ordinarios deben ser presupuestados, es importante la previsión de estos.
Así, el autor propone la siguiente división:
1)gastos para Ministerio del Interior: dedicado a mantener la paz, por medio de brindar un eficiente sistema de seguridad y obras públicas que ayuden a mantener la nación única y comunicada. De allí la necesidad de que quienes estén a cargo de estas funciones sean personas calificadas a fin de evitar gastar demasiado en empleados.
2)Ministerio del Exterior: fundamental para afianzar relaciones con potencias extranjeras y promocionar el avance de nuestro país.
3) Hacienda ( hoy: ministerio de economía y finanzas publicas) encargado de recaudar las contribuciones y redistribuir los ingresos d ella nación al tiempo que hace crecer el Tesoro.
4) Ministerio de Justicia, culto e instrucción: encierran valores morales, por eso su importancia. Por ello se fomentó el sostenimiento del culto, el gasto en enseñanza en tanto esta sea libre, museos, bibliotecas, a fin de que la sociedad tenga la posibilidad de crecer. Aunque en materia de educación, compete a las provincias suplirlo de sus presupuestos locales.
5) Min de guerra/ defensa: encargado de proteger al país contra ataques del extranjero.
En todas estas áreas, es necesario hacer economía, es decir realizar los gastos con el mayor de los juicios posibles. Teniendo presente que el gobierno debe estar a merced del pueblo, nunca al revés.
LO IMPORTANTE:
Si bien todo este capítulo contiene información importante, cabe destacar el rol del gobierno en cuanto al presupuesto de una Nación. Es sabido que nuestro país se maneja en base al sistema de coparticipación , mediante el cual las provincias dependen de las cantidad de recursos que le son asignados para suplir sus gastos, pero también es sabido que no todas las provincias tienen como generar recursos propios para cubrir los gastos que no son de índole nacional. Hay provincias muy pobres y hay otras que generan y aportan, sin embargo no pueden hacer frente a algo tan básico como pagar los sueldos de sus funcionarios.
Pero acá se abre un debate mayor: esa insuficiencia se debe en gran parte al tamaño del gobierno. Y a la capacidad que tienen estos de poder fijar sus salarios.
Preguntas al autor:
1) Cree Ud. Que gran parte de déficit presupuestario del Gobierno se debe al clientelismo?
2) Considera prudente que un Estado este compuesto por casi una decena de ministerios, en vez de los cinco por usted descriptos?
3) No cree que brindar el acceso a la educación hasta niveles universitarios es mas bien una inversión a futuro por parte de un Estado que un gasto quizás innecesario?
Resumen:
Alberdi hace referencia a los gastos junto con su clasificación y división. Como pilar fundamentales para la CN y el bienestar Nacional se tienen en cuenta el gasto público el cual logra consolidar la justicia, la unión nacional, la libertad, el bienestar general, etc.
Todo dinero que sea empleado con otros fines será malgastado o malversado, con fines que no son los previstos por la CN.
El tesoro se compone por la contribución de los habitantes previstos expresamente en leyes.
En lo que respecta al gasto público, este puede dividirse en dos tipos que son:
– los Gastos Nacionales
– Los Gastos Provinciales.
Asimismo se puede dividir en otra categoría los gastos públicos que son los ordinarios y extraordinarios según su periodicidad. Los gastos extraordinarios son por ejemplo los empleados en realizar obras públicas como caminos, puentes, muelles, etc los cuales se agotan con su construcción.
Finalmente, Alberdi clasifica y divide los gastos en 5 Ministerios los cuales se enfocan en ejecutar los valores que persigue la CN.
Estos son:
– Gastos de Ministerio de Interior:
– Gastos de Servicios de Relaciones Extranjeras
– Gastos en el Ministerio de Hacienda
– Gastos en el Ministerio de Justicia
– Gastos en el Ministerio de Guerra y Marina
Importante:
Destaco la importancia que hace Alberdi al empleo eficaz del gasto público, dividiéndolo en ministerios los cuales se encargan de diversas tareas especificas para promover el bienestar general y emplear con los fines asignados a este los recursos.
Destaco también que el autor hace referencia a que los empleados del estado deben ser pocos pero bien capacitados, evitando el exceso de empleados los cuales no sean idóneos para sus puestos.
Preguntas:
1. ¿Considera que son eficaces estos ministerios?
2. ¿Qué opina de la ley de coparticipación?
3. ¿Piensa que son bien empleados los gastos Nacionales y Provinciales?
RESUMEN:
El Gasto Publico se compone de todo lo que cuesta constituir la union nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa comun y asegurar la libertad.Todo dinero publico que no es gastado como señala la CN, Alberdi dice que es malgastado.
Los gastos se dividen en nacionales y provinciales, cada provincia tiene su propio gobierno, cada uno tiene a su cargo el gasto de su gobierno local. El gobierno argentino todo gasto es local o provincial. El gasto general es a los objetos y servicios declarados por la Constitucion, como una delegacion que las provincias hacen a la Confederacion.
Los gastos se dividen por la CN en ordinarios y extraordinarios, segun la regularidad de su ejercicio y posibilidad de preverlos en el calculo que la CN manda a ejecutar al principio de cada año como garantia de pureza y legalidad.
Para clasificar y dividir los gastos ordinarios de la Confederacion , la CN da una idea:
– Gastos del servicio o Ministerio del Interior
– Gastos del servicio de la relaciones exteriores
– Gastos del servicio en el Ministerio de hacienda
-Gastos del Ministerio de Justicia, Culto e Instruccion
– Gastos del Ministerio de guerra y marina.
Los gastos extraordinarios son los efectuados en obras publicas ( caminos, muelles, puentes, edificios para el servicio nacional ect)
LO IMPORTANTE:
Alberdi habla del gasto publico , los habitantes del pais deben contribuir a formar con el servicio de sus rentas privadas.
Dice que es un limite que la CN impone a los habitantes de la Nacion. El Tesoro Nacional tiene un fin que lo distrae de eso, el gobierno cuando lo invierte mal, el ciudadano cuando roba.
Para mantener la CN y llevar a cabo los objetos de sus institutos la misma CN instituye y funda el gobierno.
Cuanto mas eficiente es el gasto publico mas erogaciones deben hacer los particulares. Uno de los medios que tiene el Estado de economizar gastos es mediante los sueldos de los empleados.
PREGUNTAS:
– De que forma se podría controlar el gasto excesivo que hace el Estado Nacional?
– De que forma se podría reducir el Gasto Publico?
– Si deberían hacerse modificaciones a la ley de Coparticipacion Federal?
Resumen del texto:
En el capítulo VII Alberdi nos habla del gasto público nacional, el cual se compone de todo lo que cuesta el «constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad». Para mantener la Constitución y llevar a cabo sus objetos la misma instituye y funda el gobierno. Los gastos se dividen en gastos nacionales y gastos de provincia; el gasto general, excepcional y limitado, se contrae únicamente a los objetos y servicios declarados por la CN, como una delegación que las provincias hacen a la Confederación. Los gastos nacionales se pueden dividir en gastos generales y gastos locales de carácter federal. Luego se dividen los gastos generales en ordinarios y extraordinarios, según la regularidad periódica de su ejercicio y la posibilidad de preverlos en el presupuesto. Para clasificar y dividir los gastos ordinarios la CN divide en cinco ministerios o departamentos (Art. 84): Ministerio del interior: sus gastos se componen de lo que cuesta el estrechar la unión nacional, consolidar la paz interior, promover el bienestar general; Servicio de las relaciones exteriores: sus gastos se componen menos de lo que cuesta el sostener la amistad y buena armonía con las naciones extranjeras, que del orden de trabajos que ese ministerio debe poner en obra para dar a conocer las ventajas del nuevo régimen de la Confederación, las condiciones del país para el establecimiento de las poblaciones extranjeras que se desea atraer y los recursos que presenta a la ocupación de los capitales extranjeros; Servicio en el ministerio de hacienda: se componen de lo que cuesta el servicio de los agentes empleados en la dirección, recaudación y contabilidad de las rentas del Tesoro, la adquisición y sostén de las casas y establecimientos para su servicio; Ministerio de justicia, culto e instrucción: sus gastos son destinados a satisfacer las necesidades de orden intelectual, moral y religioso; Ministerio de guerra y marina: se componen de lo que cuesta proveer a la defensa común, radicar la unión nacional y consolidar la paz interior, por el sostenimiento de fuerzas materiales al servicio del poder encargado de hacer efectivos esos fines de la CN. En esta misma clasificación podrán entrar los gastos extraordinarios, éstos pueden ser de grande utilidad para el aumento del Tesoro si se hacen de un modo reproductivo; este gasto es obra exclusiva del espíritu público, es decir, de la disposición y aptitud de los habitantes para unir sus esfuerzos y prestarlos, sin más coacción que el deseo del bienestar común. Por ello puede decirse que el gobierno era antes el amo, hoy es el sirviente; he ahí la diferencia de la colonia a la República.
Lo importante/ novedoso:
Resulta importante destacar que el gasto público se compone de todos los objetivos que fueron enunciados en el Preámbulo de nuestra Constitución y que todo el dinero que sea destinado a otros fines es considerado como malgastado y malversado. Así es que divide a los gastos generales en ordinarios y extraordinarios, éstos últimos no necesariamente consumen el Tesoro, sino que si ese dinero se utiliza de manera correcta hace que se agranden las rentas de la Confederación, ya sea gastando en muelles, caminos, canales, puentes, en escuelas de arte, entre otros; sin embargo esos gastos deberían ser realizados una vez que estén cubiertos los ordinarios, situación que resulta contrapuesta con lo que vemos en la realidad por parte de los gobernantes los que “dibujan” las cifras que corresponden para realizar determinadas obras, las que posteriormente no se destinan a tal fin para el conjunto de la sociedad sino en beneficio propio. También se desdibuja en la actualidad la situación que describe el autor al señalar que los gastos podrían reducirse si se emplean pocos empleados hábiles en reemplazo de los ineptos, lo que hoy sucede de manera contraria, ya que se contrata a muchas personas que no poseen las aptitudes que se requieren para ocupar tales cargos, entre otras tantas situaciones que resultan adversas a lo que sucede en nuestra realidad.
Preguntas al autor:
1.- Como podemos apreciar muchas de las funciones que se describen en el texto que debe llevar a cabo cada ministerio no se cumplen ¿Podría considerarse una subdivisión o una nueva división de los ministerios para que de esa manera ejecuten sus funciones de manera más eficiente?
2.- ¿Cree que es correcta que la aprobación del presupuesto sea realizada por un gobierno que deja de ejercer sus funciones y es reemplazado por uno nuevo? ¿No cree que de esa manera estaría limitando el accionar del gobierno entrante a los gastos que a él le convienen y no a los que el nuevo gobierno quisiera?
3.- Teniendo en cuenta la pluralidad de religiones y a la apertura social a la que se estaría apuntando en los tiempos que corren ¿Aún cree que el Estado nacional debería sostener el Culto Católico con el Tesoro de la Nación?
SABRINA DE SARIO
DNI 38129237
Resumen:
Nos plantea Alberdi en este capítulo que el Tesoro nacional, tiene un fin santo y supremo y quien le distrae de él, comete un crimen, ya sea el gobierno cuando lo invierte mal, ya sea el ciudadano cuando roba o defrauda la contribución que le impone la ley del interés general. No es el estado el que soporta el robo, sino el amigo, el compatriota, que tienen que cubrir con su bolsillo el déficit que deja la infidencia del defraudador. Los gastos se dividen primeramente en gastos nacionales y gastos de provincia. El gasto general, esencialmente excepcional y limitado, se contrae únicamente a los objetos y servicios declarados por la Constitución, como una delegación que las provincias hacen a la Nación. Por eso expresa Alberdi que gasta siempre mal la Nación porque gasta de lejos, en lo que no ve ni conoce. Luego el autor plantea una clasificación de los gastos ordinarios: Gastos del servicio o ministerio del interior;Gastos del servicio de las relaciones exteriores; Gastos del servicio en el ministerio de hacienda; Gastos del ministerio de justicia, culto e instrucción; Gastos del ministerio de guerra y marina. En esta misma clasificación podrán entrar los gastos extraordinarios, según que se refieran a cualquiera de estos cinco departamentos la empresa, la obra o la necesidad urgente y extraordinaria que los motive. Se pueden comprender en la categoría de los gastos extraordinarios los efectuados en obras públicas, como caminos, muelles, puentes, edificios para el servicio nacional; los gastos ocurridos en el sostén de la defensa común contra los ataques de una guerra de dentro o de fuera del país; las recompensas de estímulo; las compras de territorios, de inventos, de obras útiles a la prosperidad de la Nación; los subsidios prestados por el Tesoro nacional para urgencias imprevistas de provincia.
Lo novedoso/ Importante:
Es importante lo que expresa sobre los gastos extraordinarios, considera que pueden ser de gran utilidad para el aumento del Tesoro, si se hacen de un modo reproductivo, porque gastar en muelles, en caminos, en canales, en puentes, en escuelas de arte, es fecundar y multiplicar el Tesoro. La economía es el juicio en los gastos, según lo plantea Say, citado por el autor. Alberdi considera que hay que medir el grado de sensatez y civilización de cada país, más que su ley de presupuesto, o la cuenta de sus gastos públicos. Si un país marcha a la barbarie, o camina a su engrandecimiento depende de si sabe dónde está y a dónde va. Por otro lado plantea, que el gasto público no es todo él que consiste en el gasto con que la sociedad satisface sus necesidades de orden público por conducto del gobierno, sino también en el que hace ella directa e inmediatamente, por la mano de sus habitantes, en la mejora, comodidad y perfeccionamiento de sus ciudades, en el socorro y alivio de las clases desgraciadas, y en fin en todo ese orden de servicios que la sociedad se hace a sí misma, sin el intermedio de la autoridad, en el sentido de su prosperidad más rápida y más completa. Ese gasto es obra exclusiva del espíritu público, es decir, de la disposición y aptitud de los habitantes para unir sus esfuerzos y prestarlos, sin más coacción que el deseo del bienestar común. Expresa que la falta de espíritu público en nuestro país tiene la mitad de responsabilidad de su atraso propio y que la del gobierno podrá ser la otra. mitad en mucha parte, pero ella no excusa la del país. Es muy importante distinguir que ser libre no consiste en pasar la mañana en el café renegando de todos los actos del gobierno; es vivir en continuo afán y en perpetua solicitud, es tomar parte en todo lo que interesa a la Nación; sobre todo es vivir con la mano en el bolsillo, -fisco doméstico y casero-, en el que tiene cada ciudadano un poder de acción pública más eficaz que el fusil de la guardia nacional, herramienta inútil para hacer caminos y puentes, para hermosear las ciudades.
Tres preguntas al autor:
-Teniendo en cuenta que usted plantea que hay que emplear pocos agentes, hábiles y honrados, como un medio para economizar gastos en los sueldos de los empleados públicos ¿Por qué considera que el gobierno actual ha realizado todo lo contrario? ¿Considera que es una medida que se tomó frente a la imposibilidad de ingresar en los mercados laborales debido a la escaza oferta de trabajos?
– Evaluando al pueblo argentino en la actualidad ¿Encuentra usted una disposición y aptitud real entre ellos de lograr el bienestar general? Si considera que no es así, ¿Qué medidas podrían fomentar esa actitud?
– ¿Por qué considera usted que hay mayores porcentajes de evasión y defraudación de impuestos en la actualidad a nivel mundial? ¿Es sólo la consecuencia de una alta presión fiscal o por qué la corrupción política y burocrática se adueña cada vez mas de los ingresos del pueblo, brindando servicios ineficientes e incompatibles con las preferencias sociales?
Resumen:
El gasto público se compone de todo lo que cuesta el constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad, es decir, de todo lo que cuesta el conservar su Constitución, y reducir a verdades de hecho los objetos que ha tenido en mira al sancionarse, como lo declara su preámbulo. Todo otro uso es dinero malgastado y malversado. Para ellos se destina el Tesoro público, que los habitantes del país contribuyen a formar. Ellos son el límite de las cargas que la Constitución impone a los habitantes de la Nación en el interés de su provecho común y general.
Resumen de lo más importante:
Los gastos se dividen primeramente en gastos nacionales y gastos de provincia. Teniendo cada provincia su gobierno propio, revestido del poder no delegado por la Constitución al gobierno general, cada una tiene a su cargo el gasto de su gobierno local, cada una lo hace a expensas de su Tesoro de provincia, reservado justamente para ese destino. Por regla general todo gasto es local o provincial, el gasto general, esencialmente excepcional y limitado, se contrae únicamente a los objetos y servicios declarados por la Constitución. Los gastos de provincia no son del resorte del Tesoro nacional en la Confederación Argentina. Pero es preciso no confundir con los gastos de provincia propiamente dichos los gastos de carácter nacional ocasionados en provincia. Los gastos nacionales de la Confederación, considerados dentro de sus límites excepcionales, son susceptibles de la división ordinaria en gastos generales y gastos locales de carácter federal.
Preguntas que le haría al autor
1) ¿Cómo evitar que se mal gaste o malversarse el dinero público?
2) ¿Considera usted que los ministerios cumplen con las funciones detalladas?
3) ¿Considera usted que hay un exceso de dinero publico gastado en obras públicas?
Resumen: En su último capítulo, Alberdi habla sobre el gasto público según la Constitución Argentina. Éste se compone de todo lo que cuesta el conservar la Constitución y reducir a verdades de hecho los objetos que se han tenido en miras al sancionarla. Considera que todo dinero público gastado en otros objetos que no sean los que la Constitución señala es dinero malgastado y malversado. Los gastos se dividen primeramente en gastos nacionales y provinciales. Cada provincia tiene su gobierno propio y cada una tiene a su cargo el gasto de su gobierno local. Por regla general, el gasto es local o provincial; y el gasto general, que es excepcional y limitado, se contrae únicamente a los objetos y servicios declarados por la Constitución. Otra división de los gastos generales son ordinarios o extraordinarios, según la regularidad periódica de su ejercicio y la posibilidad de preveerlos en el cálculo o presupuesto. Los primeros se dividen en 5 ministerios: ministerio del interior; departamento de relaciones extranjeras; gastos del ministerio de hacienda; gastos del ministerio de justicia culto e instrucción; gastos del ministerio de guerra y marina.
Lo importante: considero que lo establecido por la Constitución y la realidad es muy diferente. Se ve como los gobiernos en la argentina no tuvieron en cuenta que los principios de la Constitución eran para que nuestro país se vea favorecido y cada vez más desarrollado. Considero que muchas veces los gastos del gobierno no son eficientes, son malgastados en cosas que no llevan a la mejora institucional ni a nuestro crecimiento. Por otro lado hace unos días un fallo de la Corte dio a conocer que hace 9 años el gobierno nacional no le pasaba el dinero que le correspondía a las provincias, destinándolo a otro sector. Con esto las provincias se vieron desfavorecidas, no pudiendo efectuar el gasto público que podrían haber hecho con todo el dinero que se les negaba. Se perdieron muchas obras y servicios que se podrían haber hecho.
Preguntas al autor
1- Considera que los gobiernos argentinos cumplieron con los principios de la Constitución?
2- Qué opina sobre el dinero que destina el gobierno actual al servicio “futbol para todos”?
3- Que cambios haría usted en los gastos públicos que realiza el gobierno actualmente?
Mitac Dámaris
35.368.953
Ya cerrando nuestros comentarios del texto de Alberdi, él señala que el gasto público se compone de todo lo que cuesta conservar la Constitución. Dividiéndose en gastos nacionales y gastos de provincia. Se divide también los gastos generales en ordinarios y extraordinarios según la regularidad de su ejercicio.
Su fin siempre es supremo.
Algo que puedo resaltar en esta última parte, es que el dinero público que no es gastado en los objetos de la Constitución Nacional, es dinero malgastado y malversado.
Pero lo más importante, es que no será de un día para otro la realización literal del nuevo sistema. Como todas las cosas será progresivo, y lo seguirá siendo así.
PREGUNTAS
1) Cómo considera el gasto público en éstos últimos años? Con respecto a si es gastado según los objetivos de la Constitución Nacional.
2) Cómo se podría cambiar eso?
3) Es conveniente la reducción del gasto público? Según su distribución hoy en día, y teniendo en cuenta las políticas económicas que sustentan su distribución.
Capitulo VII. El gasto publico según la Constitución argentina.
“El gasto publico consiste en todo lo que cuesta el construir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar y asegurar los beneficios de la libertad.” Esos son sus objetivos.
Cualquier acto de aquel ciudadano egoísta que decide defraudar al resto de sus compatriotas (y no al Estado como aquel piensa) comete el mismo crimen que comete el Estado cuando mal invierte sus capitales.
Todo gasto es en esencia local, provincial (en pos de la libertad de las provincias y la descentralización) y solo algunos son excepcional y limitadamente gastos generales de la Nación.
Alberdi nos detalla los gastos ordinarios en gastos en los que incurre cada ministerio en particular:
Ministerio del interior: su objetivo esencial era el de reconstruir la integridad nacional, la unión del pueblo argentino. Pero siempre haciéndolo de una forma respetuosa hacia sus habitantes y sin malversar el dinero en cantidad de personas innecesarias sino a través de pocos profesionales que reciban su paga conforme a su capacidad técnica para lograr los objetivos.
Ministerio de relaciones extranjeras: principalmente su objetivo debiera ser dar a conocer los beneficios de nuestras tierras e incentivar a las poblaciones europeas y sus capitales a mirar con buenos ojos hacia estas tierras. Cónsules y vicecónsules que trabajen en la información y propaganda destinada a recibir población europea y sus capitales en pos del desarrollo comercial de toda la región (y no solo Buenos Aires o Montevideo).
Ministerio de Hacienda: sus gastos se componen en agentes empleados en la dirección, recaudación y contabilidad de las rentas del Tesoro, así como en el arrendamiento temporal de los establecimientos para hacerlo. Un medio de economizar gastos es empleando poca gente y técnicamente capacitada (europeos) para las tareas. Además, debe poner el énfasis en el pago de la deuda pública.
Ministerio de Justicia, culto e instrucción: gastos para satisfacer las necesidades del país de orden intelectual, moral y religioso. Sostener el culto nacional sin desatender las libertades hacia otros cultos y asegurar la justicia y la libertad de aprender como de enseñar. Sus gastos de culto tienen fines políticos y sociales en pos de propiciar la paz y la integración nacional. Remarca el autor la importancia de la libertad en la enseñanza y el aprendizaje.
Ministerio de guerra y marina: sus gastos consisten en mantener el ejército nacional y la guardia nacional. Consolidar la paz interior a través de las decisiones que tome la Corte Suprema de Justicia y no a través de las bayonetas, forma parte de la tarea nacional. Los despilfarros de capitales en caudillos sedientos de poder, ejércitos innecesarios y guerras inventadas han sido costumbre en nuestra historia nacional. La libertad de la Republica depende en buena medida en revisar en qué tipo de gastos está incurriendo el Estado y el por qué de los mismos.
Para finalizar el autor nos explica la necesidad de utilizar de modo reproductivo los gastos extraordinarios, como ser la creación de caminos, muelles, puentes, edificios para el servicio nacional, la defensa común, obras útiles para el desarrollo comercial, etc.
“Si la economía es el juicio en los gastos (Say), la disipación es la locura en el gobierno y en el país”. Con esa frase podemos resumir, en parte, la historia de nuestro país. Historia que demuestra gastos exponenciales en ejércitos, guerras, caudillos en búsqueda de poder y no asi en obras públicas, caminos, puentes, edificios públicos, desarrollo, etc. Lo que a futuro, hace la diferencia entre una sociedad y otra, un pueblo y otro. Historia de resistencia a la cultura europea, resistencia al desarrollo del comercio con el viejo continente, de obviar la firma de tratados internacionales para el progreso basado en la libertad de la región.
Para finalizar, resalta el autor la importancia (dentro del gasto público) del gasto espontaneo. El gasto que toda sociedad hace sin el intermediador obsesivo que es el Estado. Gastos propios de la ciudadanía dirigidos hacia el bienestar general, que no aguarda ni pide reacción alguna del gobierno de turno si no que para asegurar y cultivar su libertad, decide actuar por sí misma.
Ser libre es tomar parte en todo lo que interesa a la Nación, haciendo de su bolsillo personal la herramienta publica más útil de todas para hacer caminos, puentes y generar riqueza nacional.
1- El Texto habla sobre los gastos en objetos públicos que debe hacer el país según la CN, el autor dice que el gasto Nacional se va a componer de todo lo que cuesta el conservar la Constitución; es decir de mantener los principios y garantías que en ella están y todo los gastos que no sean los que la CN dicta serán tomados como dinero malgastado y malversado. En este punto el que haga esto, no defrauda a la Nación sino que realiza una estafa contra sus propios compatriotas ya que estos son los que financian el país y crean un gobierno para asegurar que se cumpla lo que dice la carta magna.
A su vez los gastos se dividen en nacionales y provinciales, cada provincia va a tener su propio gobierno ya que no hay nadie mejor para decidir en qué gastar el dinero que el local de un lugar por razones obvias, de conocimiento del lugar, es por esto que se recomienda y es buena la descentralización del gobierno ya que así se gastará con mayor delicadeza y eficacia. Dentro de los gastos que hace la CN, están los ordinarios y los extraordinarios; dentro de los primeros se encontraran los del ministerio del interior, de relaciones exteriores, ministerio de hacienda, ministerio de justicia, culto e instrucción y los del ministerio de guerra y marina; por otro lado los gastos extraordinarios son los que hace la Nación por el bienestar general.
El autor sigue hablando de manera detallada de los gastos que hace cada ministerio y aconseja que no haya tantos agentes en ellos ya que eso ocasiona un gasto exagerado al país, sino que debe haber pocos y que sean muy hábiles en lo que les corresponda, es decir que el servicio no va a depender de la cantidad sino que dependerá de la capacidad. Se le da importancia a las relaciones con los extranjeros ya que estos ayudarán al progreso del país.
2- Lo nuevo del texto es la importancia que le da al control del gasto sin que se derroche en causas que no sirven para el desarrollo ni el progreso de la Nación, dando consejos para economizar en cada ministerio, como por ejemplo la firma de tratados con las potencias extranjeras van a reducir los gastos en relaciones exteriores, ayudar también en la instrucción de las personas o en el culto; que no solo se promueva el católico sino que se ayude a otros tipos de culto como hizo Francia. Lo interesante de esto también es que el autor aunque da ejemplos de gastos extraordinarios dice que nuestro país no puede hacerlo en ese momento porque tiene otras prioridades , pero que estos no son gastos en sí ,sino que si los hacen bien pueden agrandar el tesoro nacional en vez de reducirlo
Por último me resulto interesante el espíritu público, que no es lo que el Estado puede hacer por nosotros , sino lo que nosotros podemos hacer por el resto de las personas de nuestro país y que recomienda entrometerse en las cuestiones relativas al país en vez de quejarse tanto sin hacer nada
3- Usted qué opina con respecto a la unión Nacional que pregona la CN, siendo que actualmente e históricamente hubo muchos gobiernos en los cuales si no estabas del lado del color político de turno las provincias no recibían recursos para su desarrollo, ¿debería crearse algún instituto externo e independiente al gobierno para poder controlar esto?
¿En qué ministerio cree que debería hacerse más énfasis hoy en día?
¿Cree que actualmente nuestro país es un país federal o sigue concentrando todo su poder y riqueza económica en buenos aires?
En el presente capitulo Alberdi hace referencia al Gasto Publico donde afirma que según la constitución se componen de todo lo que cuesta “constituir la unión nacional, afianzar la justicia consolidar la paz interior promover el bienestar general” en resumen de todo lo que cuesta conservar a la Constitución.
Indica que todo el dinero que sea utilizado con otros fines que no sean los de la constitución es dinero malgasto y malversado y se considera un fraude a quien contribuye. Decimos que es un fraude al contribuyente ya que este está obligado a realizar aportes contributivos que surgen de las rentas privadas de los habitantes de la Confederación y es de esta forma que se constituye el gasto
Hace una clasificación de los gastos: gastos provinciales y gastos Nacionales (cumplir con la Constitución).
Importante
Dentro de la categoría de gastos extraordinarios, se encuentran los efectuados para obras públicas, los realizados para el sostén de la defensa contra ataques de guerra, los subsidios prestados por el tesoro de la Nación para urgencias imprevistas.
Sin embargo estos gastos extraordinarios podrán aumentar el tesoro si se hacen de un modo reproductivo, en este sentido gastar es atesorar.
Qué tipo de gasto cree que más que generar un crecimiento reproductivo provoca una disminución innecesaria en el tesoro de la Nación?
No cree que debería haber una reglamentación más rigurosa con respecto al destino que se le dan a los fondos para no entran en malversación de los mismos?
Si bien hay gastos que se realizan en pie de ley pero se destina mayor cumulo de dinero que a otras áreas más esenciales,¿ a través de que políticas cree que se podría mejorar esto?
RESUMEN:
En este capítulo, Alberdi nos habla sobre los objetos del gasto público según la Constitución, hace un planteo sobre la clasificación y división general de los gastos.
Pone bien en claro cuáles son los gastos públicos y cuáles no, cuales corresponden a la Nación y cuales a la provincia. Cómo deben manejarse los gastos de los Ministerios.
En cuanto al gasto extraordinario, nos muestra como deberían ser para que sean generadores del aumento del Tesoro y no un mero gasto improductivo.
También hace una comparación con Estados Unidos del gasto volcado en el ejército y nos muestra claramente la mala administración de los fondos en esa área.
LO IMPORTANTE:
La comparación del gasto en las milicias, de cómo se perdió tanto dinero desde el principio en el arte de la guerra, en nombre de la libertad y del bienestar común y como el pueblo aceptó estos hechos sin responsabilidad.
El pueblo educado en la libertad no necesita esta inversión de dinero que podría y debería utilizarse para el verdadero bienestar general, como viviendas, alumbrado, caminos, educación, etc.
El pueblo ha sido y sigue siendo mezquino y holgazán, solo acepta lo que el gobierno hace en su nombre, sin cuestionar nada y sin ejercer su responsabilidad y control sobre los gastos de su propio dinero y sin ver por su propio beneficio.
PREGUNTAS:
-Cómo cree usted que se puede modificar el sistema para que exista un verdadero uso del tesoro público?
-Cuáles cree que son las formas correctas del gasto público y como las impondría en la actualidad?
-Cree usted que lo que ha vivido al momento de escribir este libro ha cambiado en algo a lo largo de los años, hasta hoy? Ha sido para mejor o para peor?
RESUMEN:
De acuerdo al dictado de la Constitución Nacional, los gastos de se dividen, primariamente, en nacionales y de provincia. Siendo, por regla general, todo gasto local o provincial, y excepcionales y limitados aquellos gastos generales de la Nación.
A su vez, hay que diferenciar aquellos gastos que son propios de cada provincia, de aquellos gastos nacionales que se ocasionan en las provincias.
También, por mandato constitucional, los gastos deben ser divididos en ordinarios y extraordinarios, dependiendo de la regularidad periodica de su ejercicio y la posibilidad de preverlos en el cálculo o presupuesto que la propia Constitución manda a confeccionar a principio de cada año.
Al analizar los gastos extraordinarios, Alberdi reconoce que los mismos pueden ser de gran utilidad en la medida que que hagan al aumento del mismo Tesoro (lo que hoy en dia llamariamos inversiones productivas). Aunque reconocia que, en aquel entonces, las condiciones no estaban dadas para que el pais se dispusiese a realizar semejantes inversiones, por lo que las mismas debian quedar en manos de privados.
ME LLAMÓ LA ATENCIÓN:
A modo de resumen, me resulta impactante cómo fue pensada la Constitución Nacional, y cómo se ha apartado el rumbo de nuestro país de los lineamientos que ella marcaba. Sin embargo, considero que la constitución no puede desconocer la realidad que vive una nación. La interpretación de un texto es múltiple, y tiene que reconocer, en principio, el contexto en el que es analizado. Las circunstancias del S. XIX no son las mismas que en la actualidad, no se puede pretender que el Estado no satisfaga necesidades que muchas veces, por mera necesidad, se le exigen que cumpla hoy en dia.
En principio es muy loable lo planteado por Alberdi, pero hay que saber reconocer que el país que pensó, y en el mundo en el que lo pensó, ya no son los mismo. El contexto nacional e internacional cambió. Sería terco no reconocer dicho cambio y tratar de imponer medios que no sería los adecuados para el desarrollo en la actualidad.
ALUMNA: BARREIRO DÍAZ MARIA SOL
RESUMEN
El gasto nacional argentino se compone de todo lo que cuesta el conservar su Constitución, y reducir a verdades. Todo dinero público gastado en otros objetos que no sean los que la Constitución es dinero malgastado y malversado. El gasto general, esencialmente excepcional y limitado, se contrae únicamente a los objetos y servicios declarados por la Constitución, como una delegación que las provincias hacen a la Confederación, o Estado general. La división de entradas y gastos en dos órdenes, uno general y otro local, servirá para distribuir los gastos locales que pertenecen a la Confederación en el orden en que están distribuidas las entradas, sin necesidad de sacar los caudales del lugar de su origen y destino en la parte que tiene de federal o nacional. se dividen por la Constitución argentina los gastos generales en ordinarios y extraordinarios, según la regularidad periódica de su ejercicio y la posibilidad de preverlos en el cálculo o presupuesto de ellos, que la Constitución manda ejecutar al principio de cada año, como garantía de pureza y legalidad en el manejo del Tesoro y en la discreción de su empleo. Los gastos extraordinarios, según que se refieran a cualquiera de estos cinco departamentos la empresa, la obra o la necesidad urgente y extraordinaria que los motive.
LO IMPORTANTE:
Tendremos entonces los gastos ordinarios clasificados de este modo:
1° Gastos del servicio o ministerio del interior;
2° Gastos del servicio de las relaciones exteriores;
3° Gastos del servicio en el ministerio de hacienda;
4° Gastos del ministerio de justicia, culto e instrucción
5° Gastos del ministerio de guerra y marina.
“La Unión nacional, es decir, la reinstalación constitucional de la integridad nacional del pueblo argentino, y la paz y el orden interiores de la República, son con razón, a los ojos de la Constitución, el primero y más grande objeto del gasto público, Ese interés representa hoy toda la causa política de la Nación Argentina, como en otra época consistió en la de su independencia de la España.”
Alberdi ve en la sobriedad del gasto público una de las claves para lograr el desarrollo de la República.
PREGUNTAS:
1)¿Cómo encuadraría al gobierno actual respecto de lo analizado?
2) El concepto de «sobriedad» ¿se ve identificado en el gobierno actual?
3)¿Cómo podría modificarse el sistema para lograr los objetivos consti
tucionales y sus tan ricos fundamentos?
BLANCO, Fabiola
Cap.VII
RESUMEN:
Alberdi en su último capítulo analiza los objetos del gasto público.“El gasto nacional argentino se compone de todo lo que cuesta el conservar su Constitución, y reducir a verdades de hecho los objetos que ha tenido en mira al sancionarse, como lo declara su preámbulo”, todo lo demás es dinero mal gastado. Los gastos se dividen en gastos nacionales y provinciales, siendo los primeros los delegados por las provincias vía la constitución a la Nación y los demás reservados a los gastos locales de estas. A su vez, dentro de los nacionales están los gastos generales y los locales, a su vez los últimos se dividen en ordinarios y extraordinarios, según la previsibilidad y la regularidad de su recaudación, entre otros. Analiza en particular, en su segunda parte, de qué gastos se compone cada ministerio. Los gastos extraordinarios, por su parte, pueden ser de gran utilidad para el tesoro de la nación si se hacen de un modo reproductivo, “en ese sentido gastar es atesorar”.
IMPORTANTE, SORPRENDENTE:
El Tesoro Nacional tiene un fin supremo y quien lo distrae de él, sea el gobierno o los ciudadanos, cometen un crimen. En base a la división del gasto, Alberdi dice que “en lo administrativo y no en lo político está el mérito de las federaciones”. Una de las frases que me parecieron importantes, en oportunidad de analizar como hacer frente a los gastos de los ministerios fue: “en el Estado como en la familia, el buen servicio no depende del número de sirvientes sino de su capacidad”, como fundamental tener personal de confianza y con las aptitudes necesarias para el fin requerido. En particular, en el caso del ministerio de relaciones exteriores, el gasto más grande implica mantener la amistad y buena relación con las naciones extranjeras más que atraer los recursos de ellas. Ratifica la libertad del individuo y el dominio de su persona, al sostener que el gobierno no tiene que adoptar un culto, no ha sido concebido para salvar las almas. Prioriza el hecho de llenar los gastos ordinarios en primer término, para luego aplicar los extraordinarios a los otros objetos, lo cual era dificultoso en la Argentina de esa época.
PREGUNTAS:
Considera que la unión y la paz interior continua siendo un pilar fundamental para la vida en democracia de los pueblos de la republica? Por que?
La política exterior de un Estado, depende directamente de quien gobierne? Se siguen al respecto lineamientos base dictados por la Constitución o suele evitarse como tantas otras directrices?