En una sección con un título apropiado a nuestra época (El Caos Monetario), Mises explica en 1944 los efectos del control de cambios, parte de una monografía titulada “Una propuesta no inflacionaria para la reconstrucción monetaria de posguerra”:
“El control de cambios es el corolario del control de precios y salarios internos. El gobierno fija el precio de las divisas extranjeras a un nivel más bajo que el de mercado. Hace que sea un delito comprar o vender divisas a un precio mayor.”
“Esa medida resultará en una prohibición de todos los intercambios de moneda extranjera. La gente que ya posee divisas o las obtienen en el curso de sus transacciones tratará de mantenerla para evitar pérdidas. No habrá oferta de divisas en el mercado, mientras que la cantidad demandada se expandirá precisamente debido a que el precio fue reducido por el gobierno. Casi todas las transacciones comerciales con países extranjeros se frenarán, siempre que el gobierno sea lo suficientemente fuerte como para impedir el surgimiento de un mercado negro”. (Debido a esto, en Argentina y otros países se profundiza este control de cambios con la obligación de los exportadores de vender sus dólares al Banco Central. Si no fuera por esto, no habría oferta en el mercado oficial. Mises sigue con esto ahora).
“Por lo tanto, el gobierno está forzado a avanzar. Debe nacionalizar todos los negocios en moneda extranjera. Expropia a todos los dueños de divisas y oro. Cada residente está forzado a ‘vender’ sus existencias a una agencia gubernamental (en nuestro caso el Banco Central), a la tasa oficial. Así, esta agencia se convierte en el único operador en cambios. Pero aún esta medida fracasa en remediar el mal. No aumenta en absoluto la cantidad de divisas disponibles. Solamente las pone en manos de la agencia gubernamental. Los efectos del decreto del precio máximo se mantienen, esto es, una restricción de las exportaciones y de la oferta de divisas.”
“El gobierno quiere ‘salvar la cara’ y, por lo tanto, sin cambiar las palabras del decreto, mantiene una política del ‘avestruz’. Pretende que su agencia gubernamental cumple exactamente con el decreto. Pero si la agencia realmente vendiera divisas a la tasa oficial, su actividad se convertiría en un subsidio a un grupo privilegiado de importadores, mientras que el resto de los negocios no obtendría ninguna divisa. Por otro lado, si indemnizara a los expropiados dueños de las divisas a la tasa oficial debería cobrar un impuesto, y así frenar el comercio internacional. Como todo esto sería indeseable, aún idiota, el gobierno realiza ciertos trucos de ilusión con su propio decreto. El genio de algunos expertos ha sido inventar varios términos fantasiosos para estos métodos. Pero ya sea que hablen de premios a las exportaciones, subsidios, impuestos a ganancias extraordinarias (¿retenciones?), u otra cosa, la esencia de todos estos métodos es la misma: el gobierno en verdad compra y vende divisas no a la tasa oficial, sino a la tasa de mercado. En la medida que una persona privilegiada, sin embargo, obtiene divisas a la tasa oficial, se convierte en un deliberado regalo a ‘amigos’ del gobierno a expensas del Tesoro.”
“Se ha dicho en favor del control de cambios que los precios del mercado local no cambiaron proporcionalmente con el alza de la divisa. Así, los que se dedicaron al comercio internacional hicieron ganancias extraordinarias cuya confiscación ha de ser justa y no dañar al comercio. Se ha mencionado antes que los precios de los productos se retrasan cierto tiempo detrás de la suba del tipo de cambio. Pero tres cosas deben tomarse en cuenta. Primero, esto no se refiere a productos cuya oferta local depende totalmente o principalmente de importaciones. Segundo, el hecho que todos los precios de los productos importados han de subir muy rápido y que el negocio de exportar se vuelve temporalmente más rentable crea una tendencia hacia la restricción de las importaciones y el aumento de las exportaciones, esto es, hacia una mayor oferta y una menor demanda de divisas. Es contrario al objetivo que el gobierno actúe contra una tendencia que, desde su propia perspectiva, parece beneficiosa. Tercero, con la ausencia de control de cambios esas ganancias extraordinarias de la exportación desaparecerían rápido bajo la presión de la competencia.”
…
“El control de cambios fue la principal herramienta de las dictaduras europeas. Cuando Hitler llegó al poder en 1933, para imponer su dictadura sobre toda la nación alemana no tuvo que hacer más que aplicar el control de cambios establecido por uno de sus predecesores, M. Bruening, en 1931.”
Totalmente de acuerdo con el artículo. Pareciese como si Mises nos anticipara (y advirtiera) ya desde el año 1944 lo que sucedería en varios gobiernos latinoamericanos, esto es, la implementación de un control de cambios (entre otras políticas del mismo corte regulatorio). Además, considero que no es una mera casualidad el hecho de que en Latinoamérica también haya habido una gran presencia de gobiernos populistas.
El populismo podría decir que tiene cierta armonía con este tipo de políticas. Los gobiernos populistas, fieles a su objetivo de terminar con la desigualdad entre pobres y ricos, logran la realización de esta premisa mediante el empobrecimiento de la población: la desigualdad deja de existir ya que ahora todos son pobres. Es algo extrema esta afirmación, ya que no todos se empobrecen con estos gobiernos. Como Mises mencionó, todo tipo de negociados son realizados por los “amigos del gobierno”, con los cuales logran que su fortuna crezca en relación inversa a su honestidad. Es por esto que el control de cambios es una medida muy útil para los gobiernos populistas, ya que permite aplicar su discurso sobre igualdad social y paralelamente aumentar las arcas del Estado para luego beneficiarse con negociados. Resulta muy esclarecedor citar a Mises cuando habla sobre el argumento que utilizan algunos gobiernos para fundamentar esta política: “Así, los que se dedicaron al comercio internacional hicieron ganancias extraordinarias cuya confiscación ha de ser justa”. En esta frase podemos observar que Mises nos muestra un típico recurso (retorico más que económico), que utilizan varios defensores del control de cambios.
El control de cambio es una sola medida dentro del arsenal que tienen estos gobiernos, en general personalistas, para regular la economía y a sus ciudadanos (que, como consecuencia, ven afectada su libertad). Si bien esto se aleja un poco del tema, es interesante ver como algunos ciudadanos, de alguna manera, temen a esta libertad y buscan evadirla (por ejemplo, bajo la sumisión a gobiernos fascistas). Como bien dijo Mises, no es anecdótico que Hitler haya adoptado este modelo económico para la Alemania nazi. Yo agrego que tampoco lo es el hecho de que Hitler haya ganado tremendo apoyo del pueblo (pueblo devastado, humillado, con una tremenda impotencia y odio que Hitler supo transformar en un instrumento a su favor).
Me sorprende muchísimo cómo lo que Mises cuenta en 1944, se asemeja a nuestra realidad económica de hoy. En lo personal, me costaba entender el por qué de muchas de las medidas económicas que se tomaron en el país. Lo consideraba pura y exclusivamente control y, como dice mi compañero, pude ver limitada mi libertad de disponer de mis ingresos como yo deseara.
Leyendo este artículo, pude entender un poco más allá de las medidas adoptadas por los gobiernos aunque, no estoy de acuerdo. No soy economista ni mucho menos política, pero considero que esta medida crea «miedo» en la población que no es bueno. Miedo en el sentido de que la gente, dejó de confiar hace tiempo en la moneda local y busca la moneda extranjera. Ahora, si el gobierno limita la compra de los mismos, genera mercados paralelos donde todo se desvirtúa,
No sé cuál sería la mejor manera de resolver esto, pero creo que imponer retenciones en varias cosas, no es la solución.
Para esto dejo un articulo muy interesante de comparación http://diegosanchezdelacruz.com/2014/01/29/el-caos-monetario-de-argentina-y-venezuela/
Ya en 1944 Mises ya se anticipaba sobre las consecuencias de una problemática de actualidad en la Argentina. Ya hace algunos años, ante la fuerte demanda de moneda extranjera y la necesidad de frenar el fenómeno para evitar la baja de reservas el Gobierno Argentino fija una política como la que explica Mises. Entre sus frases rescato que el que el gobierno fija un valor Inferior al valor del mercado: Hoy 8.75 8.85 a la cotización vigente del Dolar OFICIAL mientras que la cotizacion BLUE al que realmente se puede comprar dolares en el mercado negro (donde realmente interactua la oferta y demanda) esta $12.29 /12.39 comprador vendedor respectivamente. De esta manera busco ilustrar la diferencia entre la cotización OFICIAL y la cotización de mercadosin olvidar que existen multiples cotizaciones como por ej. la que se aplica en pagos con tarjeta de crédito, y también en aquellos casos en los que las personas que quieren comprar moneda extranjera sean autorizadas, ya que en este caso deberán pagar el valor oficial mas el 35%. Con esto ultimo busco mostrar que el la cotización oficial es un valor Ficticio ya que estos valores no terminan aplicándose en las transacciones sino que si a partir de ese valor oficial se calculan las diferentes cotizaciones con diferentes fines:
Cotización
Dólar oficial DÓLAR COMPRA $8,750.DÓLAR VENTA$ 8,850
Dólar Ahorro $10,620(Retiro antes de 1 año)
Dólar Tarjeta / Turista $11,947
Dólar Soja $5,753
Dólar Bolsa $11,850
Cotización
Dólar blue o dólar paralelo-DÓLAR BLUE COMPRA$12,290.DÓLAR BLUE VENTA$12,390-
Extraido de http://www.lanacion.com.ar/dolar-hoy-t1369.
A su vez como dice Mises, esto genera una mayor demanda ya que el precio oficial es mejor que el del mercado, entonces mas gente querrá obtener los dolares oficiales fomentando a su vez un mercado paralelo en el cual algunos lo harán para » ganarse la diferencia» entre ambas cotizaciones. Esto fomenta también la especulación, ya que muchos quieren esperar que el dolar blue se vaya a las nubes para vender sus verdes y ganar dinero. Diría que casi se ha generado un obsesión respecto del dolar ya que cuanto mas se fue restringiendo su obtención mas fueron los mecanismos de los argentinos para obtener la moneda de alguna manera(Y mas las restricciones) .Ej: extracción de moneda extranjera en otras partes del mundo con la tarjeta de débito a dolar oficial en un principio y luego mas el 15, 20 o 35% y ahora también un limite de extracción.
No hay intercambios en moneda extranjera. Esto genera una paralización ya que los importadores no consiguen la moneda extranjera para los intercambios y esto genera que caigan las operaciones. Como también frena exportaciones ya que los exportadores no reciben los dolares u otras monedas, sino que se ven obligados a venderlo ante el Banco Central y obtener pesos. Y en el caso de agroexportadores recibirán pesos en base a una cotización muy inferior a la oficial.
Finalmente esta medida, como podemos ver, ha fracasado ya que la cantidad de reservas no ha aumentado. Y no solo eso, sino que también ha tenido un efecto negativo en la construcción ante la negativa de los dueños de propiedades a aceptar pesos por su depreciación como también ha influido en el las importaciones y exportaciones como decía antes. Por lo tanto, este cepo (a pesar de que se niega que lo sea) no ha traído mas que problemas.
Evidentemente como el Estado Nacional impuso el control de precios y de los salarios no le quedó otra opción más que ejercer el control de cambios, al haber creado un Monopolio de retención de divisas, esto ocasionó que casi todas las transacciones comerciales con países extranjeros se frenaran.
Con la obligación de los exportadores de vender las divisas extranjeras al Banco Central se nacionalizaron todos los negocios en moneda extranjera, se expropió a todos los dueños originales de divisas sus dólares, cada residente está forzado a “vender” sus billetes de moneda extranjera al Banco Central, a la tasa oficial, esto generó una restricción de las exportaciones y de la oferta de divisas. Ocasionando desempleo, recesión, improductividad, pérdida de competitividad internacional y alejamiento de los capitales extranjeros posiblemente interesados en querer invertir y producir en nuestro país.
Es increíble esa adicción que tiene el Gobierno Nacional en querer tomar a la población de ignorantes disfrazando retenciones como impuestos a las ganancias extraordinarias, cómo si realmente la gente no se diera cuenta de la verdadera y única realidad.
En Argentina la producción de la mayoría de los productos dependen total o principalmente de importaciones, esto genera que su precio esté totalmente ligado a ellas, si la oferta de importaciones por las dificultades que ello conlleva disminuye, manteniéndose la demanda, termina ocasionando que los precios suban y se genere inflación, cuando en realidad sería más beneficioso dejar un libre cambio sin regulaciones que haría a la economía más productiva.
Crear una tendencia hacia la restricción de las importaciones sólo ocasiona desempleo, el Gobierno Nacional debería fomentar la producción en vez de preocuparse en querer controlar el tipo de cambio constantemente.
En mi opinión no estoy de acuerdo con el articulo, mas que nada si lo llevo a la realidad económica de nuestro pais.
Primer punto importante las retenciones impone a los exportadores que contribuyan con cierta cantidad de dinero a la hora de vender la materia prima, cosechada en nuestro país, esta medida también contribuye a que «estos comerciantes» no exporten en su totalidad, y que parte de la mercadería y ganancias queden en nuestro país. Estoy a favor de esta medida, lo cual genera un control de marcado. Una medida muy importante que se tomo, fue la muy discutida ley 125, retenciones móviles, en el año 2008, donde se les aplica una simple regla, a mayor producción ( de los grandes productores) la retención aumentaría, pero como bien dice la palabra móvil, si la producción se mantenía o era menor lo mismo pasaría con la retención. Esta medida aunque muchos no lo ven asi iba a beneficiar a los pequeños productores. Me pareció apropiado poner de ejemplo esta ley.
En segundo lugar, no creo que el control de divisas genere miedo en la sociedad, o desconfianza ni nada parecido; o que nuwstra moneda nacional pierda valor. La idea es la opuesta, que el singno pesos no sea desvlorizdo por el dólar. Este no esta prohibido, pero obviamente hay que hacer una declaración de para que querés una moneda extranjera, o algo que justifique toda tu ganancia en dólares, porque muchos en nuestro país generan la plata acá, y la.mandan al extranjero o ahorran en dolares, y eso, esooo! Es lo que hace que nuestra moneda se desvalorise ( en mi opinión) en vez d gastar la plata acá que eso generaría que la economía aumente y fluya mejor; estas personas deciden benefiar a otro país, que al suyo