¿El colmo del gasto público y el beneficio «privado»? Subsidiar a las telenovelas

¿Es acaso una función del estado subsidiar la producción de telenovelas? Esa parece ser la opinión de algunos empresarios del sector, tal como aparece en esta nota titulada “Más pesos que besos, el alto costo de producir una novela en el país”: http://www.lanacion.com.ar/1723028-mas-pesos-que-besos-el-alto-costo-de-producir-una-telenovela-en-el-pais

Allí se cuenta que el costo por capítulo de una tira es de alrededor de 55.000 a 60.000 dólares, un monto similar al de Colombia, pero bastante más bajo que los 150.000 dólares en Brasil o 130.000 en México. Argentina es un gran productor y exportador de “formatos”.

 

Dice el artículo:

“Tal como explicó Alex Lagomarsino, CEO y socio fundador de MediaBiz, empresa que se desempeña como agente dentro del negocio del entretenimiento, la Argentina se encuentra en el cuarto puesto a nivel mundial en exportaciones de formatos. Este ranking se encuentra liderado por Gran Bretaña, y le siguen Estados Unidos y Holanda. Pero la irrupción de nuevos jugadores a nivel internacional cambió bastante el panorama. Ya que a los clásicos competidores de la Argentina, como podían ser, por ejemplo, México y Colombia -que también exportan a Europa, sobre todo del Este, América latina y Estados Unidos- se les sumó un jugador que era impensado: Turquía. Este país, tal como explica Lagomarsino, pasó de ser un mero importador de formatos a ser productor de contenidos y exportador de latas y formatos. De esta manera, logró penetrar en Europa del Este. Y, si a esto se le suma la crisis europea, países como España e Italia, que redujeron el volumen de importación de latas y formatos argentinos, el panorama se volvió un poco más complejo que años atrás.”

Pero resulta ahora que ingresan en el mercado local producciones más baratas de otros países:

“A este fenómeno hay que sumarle un ingrediente más: las latas que importan los canales argentinos. Tal como afirma Agustín Sacanell, presidente de la productora Kapow, «es una competencia complicada, porque es un capítulo que cuesta muy poco comparado con lo que te sale producir acá». Y es que mientras que producir un capítulo ronda los US$ 60.000, el valor del capítulo de una lata puede costar entre US$ 50 y US$ 10.000. El monto, como explicó Lagomarsino, tiene que ver con dos factores: qué tan exitosa fue la tira en su país y qué tan grande es la población del país que la importa. Mientras mayor sea, más deberá pagar. Aun si se paga el valor más elevado, representa un sexto del costo de producir una tira.”

¿Cuál es entonces la respuesta ante esta circunstancia?

“Es por ello que Alejandro Borensztein, presidente de Capit (Cámara Argentina de Productoras Independientes de Televisión), considera que «habría que pensar en algún tipo de canon que equilibre con lo que se produce acá».”

Es decir, el viejo truco de la protección arancelaria.

Sin embargo, el mismo Borensztein detecta correctamente la causa de los problemas:

“Y a la coyuntura internacional se le debe sumar la nacional, que tampoco es del todo alentadora para el sector. Borensztein definió a la generación de contenidos como un «negocio difícil y en proceso de complicarse». Y mencionó algunos elementos que complicaron la actividad en los últimos años, como la baja inversión publicitaria, la inflación y un dólar supuestamente retrasado, que hacen que haya menos artística en los canales de televisión.”

Pero en lugar de exigir y demandar que se resuelvan esos problemas, que se frene la emisión monetaria y la inflación, que se libere el mercado de cambios para recibir un precio por los dólares que haga competitiva la producción local, mejor es pedir protección, pedir privilegios. Otra productora va incluso más allá, quiere subsidios para las novelas:

“Amadeo remarcó que mientras que en la década de los 90 y hasta alrededor de 2005 una productora tenía al aire unas cuatro novelas en simultáneo, esto cayó cerca de un 50%. Y consideró oportuno que así como se destinan fondos públicos para financiar el cine, ficciones cortas o Fútbol para Todos, lo mismo debería ocurrir con las telenovelas. Por su parte, desde Capit trabajan en algún plan de promoción industrial.”

Decía Bastiat: el estado es esa ficción por la cual todos pretendemos vivir de los demás….

31 pensamientos en “¿El colmo del gasto público y el beneficio «privado»? Subsidiar a las telenovelas

  1. Pareciera que la crisis esta llegando a todos los sectores, hasta los culturales. La intervención del estado , esta ficción que trata de controlarlo todo , una vez mas esta fallando. Hay industrias a las que es necesario una apertura al mercado mundial, una de ellas son los espacios de televisión que necesitan financiarse, publicitarse de alguna forma. Como termina pasando en la mayoría de los sectores industriales, termina desfavoreciendo la producción local ya sea porque se obtienen mejores réditos en el exterior , desde producir a mas bajo costo , como la publicidad y venta de formatos hacia otros países. No digo que sea una mala inversión producir en nuestro país, sino que existen mayores riesgos de no cumplir con las expectativas pretendidas de aquellos empresarios/productores y por supuesto desalienta aun mas a las pequeñas productoras cuya capacidad de inversión menor. Y como el hombre es un animal de costumbre, el argentino domesticado ya, seguimos viendo las mismas novelas que desde hace ya varios años atrás.

  2. Este post me remontó a los años 90, y me acordé de las grandes producciones locales que se hacían, con mucha inversión, buenas historias y actuaciones, novelas que fueron éxito en Argentina y que se han vendido a países de América Latina, Europa del Este, Asia, etc. Las productoras realizaban varias telenovelas en en 1 año y todas andaban muy bien, incluso telenovelas de época, que ya acarrean un mayor costo por la ambientación, locaciones y vestuario acorde.Creo que todo eso se facilitó por el tipo cambiario, por el 1 a 1. Incluso, los canales de televisión se daban el lujo de contratar a actores venezolanos y mexicanos, y los programas de tv podían traer como invitados a artistas internacionales, porque se les podía pagar en dólares.
    Obviamante que la gran emisión monetaria y los altos índices de inflación que se vienen dando en los últimos años, frenan la industria de las telenovelas.Tampoco estoy de acuerdo que el Estado salga a financiar a cada sector que anda en crisis, ya que no creo que los subsidios sean la solución, al menos no a largo plazo. Es verdad que los subsidios han favorecido al cine, a la producción de series y unitarios tanto en Buenos Aires como en las provincias, pero como ya hemos leído y visto, el subsidio en un sector, mas tarde trae aparejado un déficit en otro. Tampoco creo que volver al modelo del 1 a 1 sea la solución para frenar las crisis que se están viviendo en grandes sectores de la industria, que llegan a hacer reducción de personal y hasta a presentar quiebra o cerrar sus establecimientos, mas allá de la indutria de las telenovelas. Hay muchas opiniones al respecto, pero volver al modelo de 1 a 1 sería una templanza para el momento, por unos años, pero que a la larga no se podría mantener. Me gustaría ir aprendiendo mas de economía para poder encontrar respuestas y soluciones prácticas para estos tiempos que estamos viviendo.

  3. Poco sé de economía para dar una respuesta que sirva al conflicto social sobre subsidiar o no a las telenovelas, pero si apelamos al sentido común veremos que la crisis también llego a la televisión y sus producciones.
    Por un lado podemos pensar que si existe «Fútbol para todos» porque también no darle una «mano» a las producciones argentinas, y dejar un poco de lado las «latas» extranjeras, pero por otro, el Estado tendría que hacer una evaluación entre costo y beneficio e intervenir con políticas publicas, siempre y cuando el costo no sea mayor que el beneficio y se deje de lado otras cuestiones mas importantes al menos para ese momento del país.
    Encontrar la forma de ayudar a todas partes pero con el menor perjuicio posible.

  4. En el caso del pedido de Alejandro Borensztein, (hijo de Tato Bores, autor de columnas humorísticas en el Diario Clarín), y presidente de Capit (Cámara Argentina de Productoras Independientes de Televisión), en cuanto considera que “habría que pensar en algún tipo de canon que equilibre con lo que se produce acá”, suena como un pedido de impuesto o límites a la importación de productos extranjeros, a beneficio del productor nacional. Sería una traba a la importación (¿nos suena familiar?). Y en realidad, puede llegar a beneficiarse el productor local con una medida similar, ¿pero el perjudicado, quién sería? (además de los productores extranjeros): Por supuesto, el consumidor. ¿Por qué? Porque en él se verá reflejado esta cuestión en el aumento del precio; y debido a ello, para satisfacer su necesidad de entretenimiento/ocio, por lo que hoy destina parte de sus recursos, en el caso de concretarse esta medida, si quiere seguir satisfaciendo aquella necesidad, debería destinar mayor parte de sus recursos, destinando menor parte o directamente no destinando recursos para satisfacer una necesidad inferior en su escala de valoraciones.

    Además, en la nota, Celina Amadeo, una reconocida productora, “remarcó que mientras que en la década de los 90 y hasta alrededor de 2005 una productora tenía al aire unas cuatro novelas en simultáneo, esto cayó cerca de un 50%. Y consideró oportuno que así como se destinan fondos públicos para financiar el cine, ficciones cortas o Fútbol para Todos, lo mismo debería ocurrir con las telenovelas. Por su parte, desde Capit trabajan en algún plan de promoción industrial.” Respecto a esto, (por más absurdo, o no, que suene), no sería algo tan ilógico si pensamos que el Estado mediante el gobierno de turno se embanderó en tomar como necesidades públicas ciertos asuntos que derivó en medidas como el de Fútbol para Todos. Si considera aquello como necesidad pública (que se puede identificar con “tarea” o “cometido estatal”), y destina fondos públicos (recursos) para financiar el cine, ficciones cortas, o Fútbol para Todos, no sería tan ilógico que se designen recursos para financiar también las telenovelas. El tema es que, los recursos que tiene el Estado no son infinitos, y debe obtener ingresos y realizar los gastos a fin de lograr la satisfacción de las necesidades públicas. Se puede embanderar con las necesidades públicas que el gobierno nacional considere apropiadas, pero hay que tener en cuenta que a mayores necesidades públicas, mayor gasto, y a mayor gasto, hay tres soluciones posibles para solventarlos: obtener mayores ingresos, endeudarse, o asignar recursos para solventar estas nuevas necesidades públicas, en perjuicio de otras (que son quizás más importantes en la escala de valoraciones de muchos ciudadanos, pero no tanto de los gobernantes que tienen altamente valorado el clientelismo político y la obtención de votos para mantenerse en el poder). En este caso, a la larga o a la corta, podría haber algunos perjudicados, ¿no?.

    Para ir cerrando, siguiendo el mismo camino que la presente crítica recientemente expuesta, quería recalcar, y no puedo hacer más que coincidir, con la siguiente conclusión extraída del post en el cual emito el comentario:
    “Sin embargo, el mismo Borensztein detecta correctamente la causa de los problemas:
    “Y a la coyuntura internacional se le debe sumar la nacional, que tampoco es del todo alentadora para el sector. Borensztein definió a la generación de contenidos como un “negocio difícil y en proceso de complicarse”. Y mencionó algunos elementos que complicaron la actividad en los últimos años, como la baja inversión publicitaria, la inflación y un dólar supuestamente retrasado, que hacen que haya menos artística en los canales de televisión.”
    Pero en lugar de exigir y demandar que se resuelvan esos problemas, que se frene la emisión monetaria y la inflación, que se libere el mercado de cambios para recibir un precio por los dólares que haga competitiva la producción local, mejor es pedir protección, pedir privilegios.”

    Y por último, me parece que cabe aclarar que aquí la nota no refiere a una medida aprobada y que implementará el gobierno, sino que refiere a medidas que solicitan ciertos productores nacionales. La nota podría tratarse de productores de otros rubros en el que nos sonaría completamente absurdo que el Estado accione por tomar a cargo la necesidad pública que es satisfecha con dicho producto, y uno ni se preocuparía. El tema es que, al ser un tema sensible, y por lo visto no suena completamente ilógico que se realice, es digno de análisis. Tranquilamente puede ser que en un tiempo estemos discutiendo lo mismo pero a raíz de la medida implementada por el gobierno, ya sea a través de las trabas a la importación, o a través de los subsidios.

  5. Hay cuestiones en las que puede discutirse sobre si determinados subsidios son correctos o no, y cada parte tendrá argumentos a favor y en contra. Pero la financiación de telenovelas con fondos públicos me parece excesivo (por no decir ridículo).
    Si se tratase de países cuya estructura y necesidades socio-económicas están altamente satisfechas, podría quizás llegar a aceptarse. Pero cuando se trata de países con falencias por todos lados (como el nuestro), nos encontramos frente a una situación que contradice los principios básicos de la economía: Necesidades numerosas –> Recursos escasos –> Asignación de recursos de acuerdo a la prioridad de las necesidades. Es decir, habiendo carencias en la educación, la salud, el transporte, etc, se decide invertir dinero (y mucho) en nimiedades.
    Encima, ni siquiera se trata de incentivos a la cultura en la sociedad, como podría ser el desarrollo de centros culturales y artísticos en diferentes puntos de las ciudades (lo cual es positivo), sino que por lo general se trata de una cooptación a grandes empresas televisas dueñas de medios de comunicaciones, con el fin de encontrar aliados políticos.
    Le guste a quien le guste, y le pese a quien le pese, es lo que sucede hoy en nuestro país con «Fútbol para Todos». El Gobierno ha decidido luchar una batalla política con fondos públicos (porque la finalidad de esto no fue «que la gente disfrute el fútbol», sino en realidad quitarle a Clarín la exclusividad de la transmisión de determinados partidos), destinando a ello millones de pesos al año, haciendo negocios con una entidad corrupta como siempre se supo que fue la AFA, mientras la gente común muere en accidentes de trenes por falta de infraestructura.

  6. Leyendo la nota, quiero hacer hincapié en el titulo. Esto es el colmo del gasto publico y el beneficio privado. No se si a alguien le parecerá lo mismo que a mi, mejor dicho, no se si estaré en la razón o no. Pero es casi irrespetuoso para la sociedad que el estado invierta tanta dinero, tantos millones por día ya solo con fútbol para todos. Es evidente que las fallas financieras y económicas están llegando a todos los sectores. no seria lo correcto que se pierdan puestos de trabajo, o que haya suspenciones , etc. Pero a mi modo de ver hasta que siga habiendo hambre en el país, miserias, el estado no puede intervenir para ayudar al sector privado. Porque no estamos hablando de evitar quiebras, o miles de despidos sino que el estado se obligue hacerse cargo de buena parte de esta.
    O sea, no quiero decir que este mal que el estado de una mano a todos los sectores, pero primero el fútbol, después el cine, ahora las telenovelas, y mañana tendrá que ser otro y otro rubro. Creo que la cuestión acá pasa por establecer prioridades, primero que el estado se ocupe de resolver los temas básicos, la educacion , los docentes, jubilados, la seguridad social, la salud, y después recién ocuparse de estas cuestiones. Quizá hablo desde la indignación, no hay día que no recuerde que la presidente dijo que los maestros ganaban bien y encima tienen 3 meses de vacaciones. Nadie siendo docente o teniendo un familiar o conocido que lo sea podría decir eso. Docentes, médicos y seguridad deberían ser los mejores pagos porque son el eslabón mas importante de cualquier sociedad.

  7. Subsidios a novelas argentinas., por que no? Es necesario la apertura al mercado mundial para favorecer producción de nuestro país y dar confianza y posibilidad de competencia a pequeños o nuevos productores los cuales tienen una una experiencia y capacidad de inversión inferior. Todo esto evaluando primeramente los costos y beneficios y como dice un comentario más arriba., no se dejen de lado cuestiones más importantes

  8. Soy de sostener que es el Estado quien debe amparar a aquellos sectores de la economía que presenten serios problemas. Pero ante la situación actual que vivimos, donde la mayoría de los sectores presentan falencias, considero que el Estado debe ponderar en principio las más importantes. Obviamente todas las industrias son en cierta medida importantes y su buen funcionamiento a la larga colaboran con el bienestar de la economía argentina en general; pero creo que existen campos que a comparación de la «producción de telenovelas» son de vital importancia y requieren de la inminente ayuda del Estado. Rápidamente se pueden mencionar algunos de ellos: educación, salud y seguridad.
    Al margen de esto, supongo que siempre se puede hacer algo para colaborar sin la necesidad de tener que invertir exorbitantes sumas de dinero, y el Estado debería encontrar la forma de abordar a una solución que permita al sector en cuestión arribar a una situación mejor.

  9. Como dice el titulo ¿el colmo del gasto publico y el beneficio privado? No creo que el financiamiento a telenovelas se tan absurdo, ya que no solo implica fomentar la cultura, sino también el trabajo de basta cantidad de gente, siempre y cuando se le de la misma importancia a otros sectores como la seguridad, el transporte, como mas arriba sostuvieron mis compañeros. Pero debemos ser realistas, nuestra economía no es ni por casualidad comparada con aquellas en donde si se pueden dar el gusto de darle mayor apoyo económico a las telenovelas, como brasil o Colombia, acá se necesita darle mayor a apoyo a temas que afectan a toda la población como son la inflación, la seguridad, entre otras. Respecto de fútbol para todos, considero que es excesiva la ayuda que el gobierno les brinda, sabiendo que hay a otros sectores que les falta, como la salud publica, y que son sectores que engloban a una mayor cantidad de gente que benefician, en comparación con el fútbol, que no a todos les interesa.

  10. No queremos más fondos mal destinados!
    Ultimamente solemos protestar por la mala distribución que hacen de los impuestos, escuchamos personas quejándose y reclamando, diciendo: «y dónde está lo que pagamos? queremos seguridad». Pero no precisamente la seguridad de tener más novelas transmitiendose en los canales, no.
    La industria del entretenimiento debe ser privada. Que aquéllos que les interesa este tipo de producciones se encarguen de financiarlas, el estado tiene de qué ocuparse.
    Y claro, cómo no importar producciones extranjeras con lo de devaluada que esta nuestra moneda! Personalmente, prefiero más policias capacitados en la calle, que más novelas en la tele.
    Con tal de no hacerse cargo de la realidad, hacen ficción, no?

  11. «ES EL COLMO DEL GASTO PUBLICO Y EL BENEFICIO PRIVADO», me parece ridículo y una falta total de respeto a la gente que se tenga que pedir subsidios para telenovelas, a nivel cultural no aportan nada los contenidos que tratan, al contrario siento que embrutecen a la gente o pretenden al menos eso. ¿Que se pretender subsidiar? el relato de la vida de un narcotraficante que fue apresado en Pilar y es apodado «mi sangre»!
    Porque mejor no destinar todo ese gasto a la educación, porque no darle ese beneficio a los menos favorecidos, y respeto a esto voy a decir con conocimiento de causa que «fútbol para todos» favoreció mucho al interior del país, desde 1991 hasta 2009, nunca más se pudo ver por aire un partido de primera división de AFA ni de Nacional B, ¿en vivo?, no, ni siquiera en diferido. El programa «Fútbol de Primera» se veía gratis en Capital y GBA -zona de cobertura de la señal de aire de Canal 13- en la capital de las provincias tenías que pagar el cable para verlo, el interior debía conformarse con escucharlo por la radio. Una estafa fenomenal cuyos alcances, en magnitud económica, algún día debería calcularse e investigarse.
    Por otro lado ya esta demostrado, al menos es mi parecer,que otorgar subsidios no sirve para nada, por un lado es abrir una puerta dificil de controlar quien entra y quien no. por otro lado, el subsidio al transporte urbano, basta subirse a un colectivo para darse cuenta que no hay un control, no esta claro para que se lo otorgo, en un primer momento se dijo que es para que circulen unidades más modernas y se agreguen, si bien se ven unidades nuevas la cantidad en las frecuencias sigue siendo baja, con lo cual viajamos mal.
    Estoy de acuerdo que el Estado colabore en momentos criticos que los diferentes sectores de la economía tienen, pero siempre priorizando a aquellos que realmente sea necesario, no se como sería, pero no podemos permitir eso de «vivir de los demás».
    Ines Perez. comisión 682 uba.

  12. Con respecto al articulo,esta correcto financiar en cuanto materia artistica al cine nacional y el cuidado de sus salas donde pasan estas peliculas,siempre y cuando sean difundir la cultura nacional,y se refleje el estado argentino no esta mal que alguno reciba apoyo del estado economico,pero no total. Con respecto a las tenenovelas no,porque es privado no tienen nada que ver el estado,y no refleja la cultura nacional en cuando a lo cultural,sino abstractamente como ficcion,eso deberia ser financiado por sponsors de empresas privadas. Lo que el estado estaria haciendo de financiar esto a las tenenovelas,es no invertir en otras necesidades mas importantes como la educacion,salud,seguridad,entre otros.A veces el propio estado utiliza a las personas del mundo artistico,para representacion de fines politicos o electorales,desdibuja totalmente la finalidad de financiamiento de las tenenovelas.

  13. Considero que la parte cultural en un pais es muy importante, pero considero que lo estan llevando hacia un extremo y pareciera ser que es mas para beneficios privados que realmente una utilidad cultural, si consideramos el bajo rating que esas producciones tienen en el aire, sin dudas, no culturizan en masa al menos y es mucho mas lo que se esta perdiendo que ganando. Futbol para todos yo lo considero un gasto absurdo y excesivo tambien.
    Para mi lo cultural de nuestro pais podria ser mas inversion a nivel musicos, teatros, museos. No necesariamente telenovelas que podran ser entretenidas, pero no dejan mas que eso, entretenimiento al igual que el futbol. No esta mal invertir en el ocio, pero, no de esta manera desmesurada y sobre todo cuando es claro que no es seguido por el publico. Por lo visto hay un trasfondo político, económico.
    Primero debemos invertir mas en otros aspectos de nuestro pais, como educacion, hospitales, etc y despues si, dedicarse mas al sector entretenimientos.

  14. En mi opinión, OBJETIVAMENTE el incentivo a las telenovelas argentinas no me parece mal, es necesario para que pueda competir con los productos extranjeros.
    Pero creo que todo se tiene que evaluar en su contexto pertinente.
    En un país donde hay tantas faltas, en aspectos tan importantes y esenciales, como aumentar la jubilación mínima, como mantener los subsidios de luz y agua de los consumidores particulares, como ver que la inflación crece de una manera tan desproporcional a lo que aumenta nuestros salario mínimo vital y móvil (que muchas veces ni se respeta), entre otros problemas fundamentales a solucionar para crecer como país, creo que es un chiste de muy mal gusto priorizar las telenovelas antes que todos los problemas que tiene la sociedad, ya que estamos en Argentina, no en un país del primer mundo que puede dar incentivos económicos a cualquier sector sin descuidar otros prioritarios.

  15. Entiendo el pensamiento respecto a que el Estado no puede salir a salvaguardar,a repuntar a cada sector que empieza a tener falencias para crear las ganancias necesarias para seguir explotando un negocio. Pero siendo mas crítico aún, también sería lógico reflexionar si este problema no es creado por el mismo Estado con las políticas económicas que lleva adelante desde hace unos años, política económica que ha hecho inconveniente el desarrollo de diversas actividades, una de ellas, la producción de telenovelas nacionales. Nadie duda de la calidad que ellas poseen, incluso en el extranjero, por lo cual entiendo que el problema no deviene de lo que se ofrece, sino la dificultad que se esta encontrando para penetrar en mas mercados con la competencia cada vez mas creciente de países económicamente las competitivos y mismo en el aspecto nacional, con la dificultad para poder producir contenidos por que cada vez es mas oneroso hacerlo . Llegado a este punto, me surge plantear este interrogante: Si el problema no es el contenido que se esta produciendo, sino lo extremadamente oneroso que se esta tornando producir por la política económica que se esta llevando a cabo. ¿ Por qué el Estado no debería apoyar a la producción nacional? ¿ Acaso no significaría por parte del mismo Estado el reconocimiento de los problemas económicos que estamos sufriendo? En parte, comparto que el Estado no debería hacerse cargo de los problemas propios de cada actividad, pero si estos problemas provienen por parte de la política económica, que el mismo Estado desarrolla y no del sector que produce un buen contenido, me parece al menos saludable que el Estado colabore para que el sector pueda seguir produciendo, porque esto implica, entiendo, por lo menos un reconocimiento de los problemas que acaecen en la actualidad, y por otro lado, porque implica salir de la burbuja del supuesto «bienestar» que por parte del Estado, se nos quiere hacer ver, y admitir que existen problemas, y graves.

  16. Yo pienso que el estado no debe utilizar los gasto públicos para subsidiar novelas ya que si bien son gasto populares que son visto por miles de argentinos como por ejemplo el futbol para todos que lo disfrutan millones de personas sin distinción de clases sociales , todos estos gasto tienden a gastar millones de pesos y muchas veces estos estos medios populares sirven como propaganda políticas para que los estados comuniquen a sus habitantes sobre su gestión.
    Pienso también que el estado en vez de subsidiar novelas debe invertir en programas educacionales como por ejemplo Discovery, etc., programas de investigaciones y desarrollo que no solamente van a nutrir de información al televidente si no crea un gran desarrollo técnico y educaciónal en el estado

  17. Ambas soluciones propuestas por los empresarios productores de telenovelas ante la situación en la que se encuentra dicho sector – ingreso en el mercado local de producciones más baratas de otros países-, implican una fuerte intervención estatal que repercute en la espina dorsal de la economía de mercado.
    En cuanto a la protección arancelaria, nuestro país ya ha experimentado con ella y evidenciado sus consecuencias: producir para un mercado pequeño implica necesariamente ineficiencia y altos costos de producción. Al reducirse la oferta extranjera, disminuye la cantidad ofrecida, lo que hace que suban los precios nacionales. Asimismo, los ingresos arancelarios suponen una transferencia al Estado por parte de los consumidores, ya que éstos no reciben nada a cambio de aquellos; son ellos quienes soportan un despilfarro debido a que los recursos derivados hacia a industria protegida por los aranceles se podrían utilizar eficientemente en otros sectores.
    Con respecto a una posible subvención, también hemos presenciado cómo con el correr de los años va aumentando el gasto público debido al crecimiento de las tareas y funciones presadas por el Estado. En este punto me gustaría mencionar a Bastiat- obviando entrar en la cuestión acerca de la justicia distributiva del ingreso público- en cuanto a se trataría sólo de un desplazamiento artificial de fondos y de necesidades.

  18. Desde mi punto de vista el estado no deberia subsidiar las telenovelas, en realidad soy participe de una postura en que no deberian existir los subsidios.

    Si sòlo tomamos en cuenta el destino del gasto publico pero dejando en la penumbra el origen de dichos recursos, estamos realizando un analisis incompleto de la cuestiòn.

    No debe olvidarse que los recursos que gasta el estado para otorgar subsidios, en ultima instancia, salen de los bolsillos de los contribuyes, esto trae como efecto, que ese dinero que el estado recauda para subsidiar no pueda ser utilizado por los contribuyentes para satisfacer otras necesidades.

    Se puede argumentar a favor del subsidio de las telenovelas que generan trabajo para todos aquellos sujetos que se dedican a la rama en cuestiòn, pero tampoco debemos perder de vista que cuando el estado » genera puestos de trabajos » para A esta privado de trabajo a B; En consecuencia dicho argumento no se sostiene.

  19. Respecto a la nota en cuestión, yo opino que el Estado no debería subsidiar las telenovelas ya que no estoy de acuerdo con el incremente del gasto público (que no deja de ser el dinero de todos sus habitantes) en ciertas cuestiones que no se traducen en un beneficio para toda la población en su conjunto, ya sea directa o indirectamente. El aumento del gasto público trae consigo una grave consecuencia, el aumento de la emisión monetaria y con ella la depreciación de nuestra moneda, es decir, más inflación que se traduce en más aumento de precios. Los subsidios son soluciones momentáneas a problemas de fondo, es solo maquillar la realidad. Por otro lado, si bien no entiendo al Estado como una empresa, considero que éste tiene que estar presente allí donde se lo necesite aunque con ello traiga consigo perdidas, pero no con esto me estoy refiriendo a cualquier tipo de Gastos, sino aquellos que sean necesarios –prioritarios como ser: Gasto Público en Salud, en Educación, en Infraestructura, etc , para garantizar condiciones dignas de vida a toda la población desde el norte hasta el sur de nuestro país. NO se puede concebir el gasto millonario del Estado en “Futbol para Todos” cuando hay regiones de nuestro país donde hay gente que no solo se muere de hambre sino tambien de enfermedades por no tener cloacas, ni agua potable entre otras tantas falencias. En una nota de Julio de este año Clarin comentó: «Fútbol para Todos» ya costó más de 5.000 millones de pesos. A cinco años del lanzamiento de ese programa, los clubes se endeudaron aún más que antes de la intervención del Gobierno en el fútbol” http://www.clarin.com/gobierno/Futbol_para_Todos_0_1183081915.html. Las personas pueden vivir sin futbol pero no sin salud o sin alimentarse… claramente bajo estas circunstancias ( bajo nivel de educación, de salud, de infraestructura a nivel pais) va haber y hay menos gente productiva, pero si, mas que vean futbol o telenovelas.

  20. Considero que el Estado no debe dar subsidios a las telenovelas. Si esto ocurriera, el gasto público aumentaría lo que llevaría a emitir más cantidad de dinero y así habría más inflación. De esta forma, el subsidio no serviría porque la inflación aumentaría los costos de la producción por lo cual seria insuficiente y haría necesario más subsidios. Medidas como esta han llevado a que el país aumente su gasto desconsideradamente y lo endeudaron generando más problemas.
    Por otro lado, este tipo de políticas en general lleva a que el Estado dé el beneficio a las productoras que tienen la ideología del gobierno de turno, sin importar la calidad y el negocio que genere el producto.
    Finalmente el problema podría solucionarse bajando los costos de la producción para ganar competitividad frente a las producciones de otros países.

  21. Considero que deberían subsidiar las telenovelas para poder lograr un «equilibrio» entre los competidores internacionales. Argentina es un gran productor de formatos televisivos, ya sean películas, cortometrajes, mini series, y hasta novelas. Por lo tanto como los miembros de la cámara de productores independientes de televisión no pueden parar la inflación o la emisión monetaria debería el Estado ayudarlo mediante privilegios o subsidios ( como sucede en cortos de canal 7 o fútbol para todos).
    Por lo tanto con estos subsidios se podría aumentar la cantidad de novelas de una misma productora en simultaneo, como sucedía en años anteriores, y generar mas exportación de formatos televisivos y tener mas reconocimiento mundial.

  22. Realmente no me parece que el estado deba invertir fondos públicos para financiar telenovelas. Creo que Argentina tiene otras necesidades más importantes que satisfacer, y en las cuales podría invertir dinero como salud, educación, etc. Al mismo tiempo no me parece que otorgándole subsidios a la producción de las novelas argentinas se esté promoviendo el desarrollo de la cultura, como si podría ser en el caso del cine o del establecimiento de centros culturales.

  23. Un modelo político viene acompañado de un modelo cultural.
    Hay que tener en cuenta que la televisión no solo tiene su importancia en informar o entretener, sino también en la creación de nuevos patrones de conducta y consumos culturales.
    El Estado no solo gestionó Fútbol para todos. Canales como Encuentro y Pakapaka (ambos dependientes del Ministerio de Educación de la Nación) aportan un variado contenido cultural.
    La cultura necesita espacios donde desarrollarse. No me parece mal que se ayude a las telenovelas para que el sector privado pueda competir con contenidos del exterior. Cuando las empresas se expanden no sólo se fortalecen las empresas sino que también trae beneficios a la economía nacional.
    Una frase de una nota del diario La Nación – por Roberto Cachanosky dice: “cuando la inflación hace escasear el pan, no hay circo romano que pueda montar Cómodo para distraer a la gente de los problemas que la afligen todos los días.” En referencia a la frase “pan y circo” de los emperadores romanos. Ni fútbol para todos ni una telenovela nos va a hacer olvidar de los problemas que tiene nuestro país, pero también el entretenimiento es necesario y hay que valorar el apoyo que este gobierno ha dado a muchos artistas y productores nacionales.

  24. Cuando hablamos de este tema habria que preguntarse ¿cual es el beneficio que obtenemos por subsidiar novelas nacionales? ¿es preferible destinar el dinero de los fondos publicos a esto? Creo que en el segundo caso la respuesta es negativa. Como bien dijo un compañero en su comentario podria ser mas discutible o «beneficioso» alentar las artes nacionales a nivel popular, promoviendo el desarrollo de los mismos en universidades, escuelas, etc.
    Sin embargo, en este caso quien sale beneficiado no es la cultura nacional sino las grandes empresas que se ven en crisis o con menos ganancias culpa de las importaciones de otros formatos que terminan siendo mas baratos. Como acertadamente se dice en el articulo, buscan la solucion mas facil. No tratan de arreglar o atacar el problema real sino que reclaman que el Estado supla esta deficiencia.
    Como lo ha demostrado el Futbol para Todos, se genera un gasto enorme que podria ser destinado a otras areas que necesitan mucho mas de este dinero que este servicio que puede ser tranquilamente brindado por cualquier empresa. Mas alla de esto es claro que la justificacion de este gasto no es el que nos quieren vender sino que es puramente politico.
    En nuestro pais, tenemos muchas necesidades con un nivel altamente mas primordial que subsidiar formatos televisivos para ayudar a ciertas empresas. No podemos darnos este lujo sin antes pensar en que hay que solucionar la falta de educacion, los problemas en los hospitales publicos y demas deficiencias que tiene nuestro pais a nivel estructural.

  25. El plano económico actual es muy complejo para intentar dar una opinión totalmente acertada al respecto. Sin embargo, considero muy positivo que el Estado realice inversiones a nivel artístico y exporte nuestra cultura a otros paises. En este caso, «lo que no se ve», podría tener efectos muy favorables para incentivar la producción de contenidos televisimos que a su vez, cumplen un rol no menos importante respecto al consumo. En la actualidad, se está dando un notable auge en cuanto al interés de consumir series/ telenovelas y/o programas de entretenimiento; por lo que resulta interesante que se intente estimular esta industria en tan difuso panorama económico ante una competencia extranjera mucho más económica.
    También genera más trabajo para los artistas y todos aquellos encargados de su producción. Por otro lado, las novelas suelen contar con un sponsoreo de marcas que compran el espacio televisivo; que por ende estimulan la inversión y crean un incentivo para el consumo. Si en determinado momento se optó por invertir en fútbol para todos, no encuentro extraño hacerlo en la producción de telenovelas.

  26. Se puede ver a este articulo como en el texto «Yo, el lápiz», todo lo que involucra la industria de la telenovela,como llega a ser lo que es, todos los actores y productores involucrados, vestuaristas y maquilladores, escritores, ect. La intervencion del Estado podra sustentar esta industria? Sera mas eficiente enfocarse en el problema de la inflacion que tratar de establecer impuestos a las novelas extranjeras o subsidios? Se puede pensar que si.

  27. Estoy muy de acuerdo con el autor, que lo que se debe resolver son los factores que no permiten la competitividad del producto que se quiere producir/exportar en lugar de solicitar la protección del Estado. Al respecto, se supone que para la economía, un subsidio estimula artificialmente el consumo o la producción de un bien o servicio y sería lo opuesto a impuestos. También se entiende que los subsidios al consumo o la producción tiene su origen en la intención de los Estados de alcanzar metas sociales, o bien para favorecer por alguna razón especial a determinadas personas, actividades o zonas de un país. Pero existe la posibilidad de que el subsidio se transforme en algo discrecional y pone en las exclusivas manos de un gobierno, dar o no dar una «ayudita» según convenga a las necesidades políticas.

    En el caso de empresas privadas, además de subsidios entre otros tipos de ayuda pueden favorecerse con exenciones y rebajas impositivas, beneficios regulatorios, tasas de interés reducidas y financiamiento preferencial. Cabe señalar que en diversos países los subsidios son utilizados para consolidar el desarrollo de sus economías no obstante como contrapartida incremente el gasto público en general. Es necesario que los subsidios, que por diversas razones se otorguen, no produzcan una excesiva intervención del Estado en la economía porque el resultado sin discusión termina distorsionando la misma, limitando el libre funcionamiento del mercado y sin duda despilfarrando recursos. Como se dijo al principio, los subsidios suelen ser necesarios pero en todos los casos deberían otorgarse mediante un mecanismo que les otorgue trasparencia y no caigan en sectores o grupos económicos que no los necesitan o no cumplan la función social de beneficiar a la mayoría de la población más allá del aumento en el gasto público, que su otorgamiento genera.

  28. Por lo que tengo entendido también se subsidian telenovelas, por ejemplo las producidas por Andrea del Boca en canal 7, considero que el problema no es principalmente el hecho de que subsidie una actividad, si es que aquello es realizado para buscar que aquella progrese, pero el subsidio debe ir progresivamente retirándose para que la actividad pueda mantenerse por si sola, pero lamentablemente como ocurre en nuestro país estos apoyos financiero son otorgados a amigos de la política en fin de mantener ese apoyo. Inclusive en el caso de las telenovelas producidas por la actriz Andrea del Boca entre otras se han producido escándalos a partir de que las productoras no pueden justificar los gastos que aquellas tienen, incluyendo contratos con universidades en búsqueda de encubrir el gasto realizado por el Estado.
    Claramente que el Estado debe tener algún tipo de participación en la búsqueda de promover la cultura, el problema que ello se vuelva en favores a sujetos partidarios del partido político de turno.
    Siempre va a estar la discusión de si el Estado debe invertir en fútbol para todos o en un programa cultural, la verdad es que cada sujeto estará a favor de uno u otro según sus gustos pero creo que en lo que coincidimos la gran mayoría en que aquellos recursos que el Estado invierte en el desarrollo de la cultura no debe ser malgastado y debe buscarse su máximo beneficio, por ejemplo porque en el programa Fútbol para todos no se busca financiar con propaganda.

  29. El tema de cómo y a quienes son destinados los fondos públicos siempre es un tema de discusión, y está bien que así lo sea. Es continuo el cuestionamiento de las prioridades que el estado brinda a algunos temas y a otros no tanto.

    Es difícil de entender, para algunos, que se destine una porción del fondo público en subsidiar, en éste caso, una novela habiendo tantos otros puntos en donde hacer foco.

    Particularmente, creo que está bien que se invierta en la cultura de un país, ésta es también la base de una nación pero las mayores prioridades para el ciudadano promedio, son la salud, vivienda, educación y seguridad; y que éste dinero no sea invertido mayormente para realizar las mejoras necesarias en éstos temas es al menos fuente de grandes debates en cuanto si se está invirtiendo con prudencia el fondo público.

    Los subsidios, pueden generar grandes beneficios para los ciudadanos, sobre todo en épocas de crisis económica. Pero lo que es importante es poder generar un control de éstos gastos, para saber que aquellos están siendo utilizados de manera provechosa, tanto así sea para realizar mejoras edilicias en una escuela como para generar la producción de películas o programas de televisión de calidad.

  30. Me parece que el Estado Argentino tiene otras prioridades antes que invertir en telenovelas. Si bien es verdad que hace unos años se producían en mayor cantidad, también es cierto que no es sólo este rubro el que decayó. En otros, como el teatro, pasa exactamente lo mismo. Cuando hace unos años una productora tenía 10 obras en cartel, hoy tiene 2.
    Para muchos la solución es fácil: que el Estado subsidie. Cuando la verdadera solución es mucho más compleja (reducir la inflación, por ejemplo).
    Por otra parte, pienso que no está mal que se invierta en cuestiones culturales. Pero cuando una país como el nuestro tiene otras necesidades (como pobreza, habitación, salud, seguridad), estas están por encima de las demás, y son a las que se les debe dar una suma importancia.

  31. Evidentemente la crisis actual también afecta a las productoras de telenovelas, como a tantas otras actividades, debido a la inflación, la emisión monetaria, el cepo al dólar y sumado a todo ello, la baja inversión publicitaria. Sin embargo, que el Estado subsidie la actividad, no sería una solución para el problema, porque estaría asignando recursos (los cuales sabemos son escasos) para una industria (la de producción de telenovelas) que es privada, y esto generaría una falta de recursos en cualquier otro sector (por ejemplo en salud o educación) pues esos recursos, en definitiva, el Estado debe sacarlos de algún lado…Por otra parte estos subsidios solo darían una solución transitoria a la industria de las telenovelas, pues el Estado, al no resolver el problema de fondo con medidas que frenen la inflación,se vería obligado a otorgarle cada vez más y más subsidios, para que pueda competir en el mercado internacional, generándose un círculo vicioso. Es decir, no solo no mejoraría la situación , sino que a la larga, el Estado, al no tener fondos, podría seguir endeudándose para solventar a esta industria, o emitiendo moneda, creando nuevos impuestos, o reasignando recursos que estaban asignados para áreas mucho más importantes y urgentes para la población, como es por ejemplo la de salud. Todo esto evidentemente, no solo no favorece a la población en general sino que la perjudica…Lo ideal sería que el Estado, en lugar de seguir otorgando subsidios, los cuales en definitiva salen del bolsillo de todos los contribuyentes, comience a trazar un camino para controlar la inflación, aceptando su existencia y tomando las medidas pertinentes que permitan salir de la presente crisis. Me parece que en el país hay necesidades y temas más urgentes y prioritarios que la industria de las telenovelas… Por ejemplo, es triste ver como se están dilapidando recursos (que repito, son de todos los argentinos), subsidiando Futbol para Todos…. http://www.infobae.com/2013/09/30/1512501-el-futbol-todos-saldra-casi-4-millones-dia-el-2014 … Algo que está generando pérdidas millonarias para el Estado….Esta situación resulta incomprensible cuando luego vemos imágenes de escuelas sin paredes, o nos enteramos que no hay gasas en algunos hospitales públicos…..No se puede entonces tolerar que en un país donde aún existen muchas personas con necesidades básicas insatisfechas, o viviendo en situación de extrema pobreza, los recursos “escasos” se asignen valorando como prioritarias necesidades que realmente no son importantes para la mayoría de la población, frente a otras como la educación, la salud, el transporte, la seguridad, que realmente sí lo son… Quizás si estuviéramos viviendo un clima de prosperidad, mi respuesta sería diferente, y podría pensarse en alguna ayuda transitoria. Pero creo que actualmente el Estado no puede desatender otras necesidades urgentes en pos de determinados pequeños sectores privados. Con el mismo criterio, todos los empresarios, los productores, los importadores, que se ven afectados por la crisis, podrían ir a reclamar subsidios para su actividad, argumentando que la situación actual los perjudica…Pero esto sería realmente inviable, porque los recursos son escasos…La solución tampoco sería poner un “canon” a las novelas extranjeras…En todo caso el Estado deberá tomar medidas concretas para controlar la inflación y lograr la estabilidad necesaria para que los precios resulten más competitivos en el mercado internacional.

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