Hayek, las teorías evolutivas y los órdenes espontáneos. Hay distintos órdenes sociales, taxis y cosmos

Con los alumnos de Historia del Pensamiento Económico II (Escuela Austriaca) en Económicas UBA, vemos los distintos órdenes sociales, taxis y cosmos, como los plantea Hayek:

Hayek

“Denominaremos «orden» a un estado de cosas en el cual una multiplicidad de elementos de diversa especie se relacionan entre sí de tal modo que el conocimiento de una porción espacial o temporal del conjunto nos permite formular acerca del resto unas expectativas adecuadas o que por lo menos gocen de una elevada probabilidad de resultar ciertas 3.Es evidente que. en este sentido, toda sociedad debe gozar de un orden y que muchas veces ese orden existirá sin haber sido deliberadamente creado Como ha dicho un conocido experto en antropología social, ‘«el que en la vida comunitaria existe un cierto orden, coherencia y regularidad es algo obvio; de otra manera, ninguno lograríamos ejercer una actividad normal ni satisfacer nuestras más elementales necesidades» .

Al vivir en sociedad y tener que cubrir la mayor parte de nuestras necesidades mediante diversas formas de mutua cooperación, es evidente que, por lo que respecta al ajeno actuar, el logro de nuestros propósitos dependerá de la coincidencia de nuestras expectativas con la realidad. Es tal coincidencia lo que refleja la existencia del orden social; descubrir cómo surge será el tema que nos ocupará de modo inmediato. La primera y casi inevitable respuesta que nuestros hábitos de pensar antropomórfico sugieren al respecto es que todo orden ha de ser fruto del designio de alguna mente’. Debido a ello, el concepto de orden no resulta muy popular entre los partidarios de la libertad, gozando en cambio de especial predicamento entre las gentes de inclinación autoritaria. El orden» social, según este enfoque, ha de basarse en la relación de mando y obediencia, es decir, en la existencia de una estructura en la que la voluntad del superior, y en última instancia la de una sola autoridad suprema, ha de determinar lo que a cada uno corresponde hacer.”

“Diversos son los términos que cabe utilizar para describir cada una de dichas clases de orden. El orden creado que hemos denominado exógeno u ordenación puede también ser calificado de estructura, orden artificial u organización, término este último especialmente adecuado cuando se trata de un orden social dirigido. Por su parte, el orden autógeno o endógeno queda debidamente especificado mediante la expresión orden espontáneo. El griego clásico tuvo la fortuna de disponer de vocablos diferentes para designar estos dos tipos de orden taxis para el creado (por ejemplo, el orden de batalla, y kosmos para el espontáneo (término que originalmente aludía al adecuado orden de un Estado o de una comunidad).”

“No resulta exagerado afirmar que las ciencias sociales nacen y se nutren del descubrimiento de la existencia de estructuras ordenadas que, aunque sean consecuencia de una actividad plural, no son resultado del designio humana. Esto es algo universalmente admitido hoy en día en diversos campos de la investigación científica. Aunque durante mucho tiempo se haya creído que hasta el lenguaje y la moral tenían que haber sido «inventados» por alguna mente genial, en la actualidad todo el mundo reconoce se trata tan sólo del resultado final de procesos evolutivos cuyos efectos nadie previó ni proyectó. En otras esferas científicas, sin embargo, cunde todavía la suspicacia ante la idea de que en los modelos sociales pueda presentarse un orden que no sea consecuencia de deliberada intervención. En la esfera económica, en particular, la famosa frase de Adam Smith relativa a la «mana invisible» sigue siendo vilipendiada; y, sin embargo, se trata de una expresión mediante la cual, en el lenguaje de su tiempo, dicho autor intentó expresar el hecho de que cada ser humano se ve obligado a contribuís al logro de fines que no entraba en su ánima colmar , Sí numerosos reformadores políticos siguen perorando contra el caos en que se debate la actividad económica, en la que tan sólo desorden perciben, ello se debe en parte a su incapacidad de concebir la existencia de un orden que no es producto de la creación deliberada, y en parte también a que, a su modo de ver, todo orden ha de pretender siempre algún conjunto de concretos fines, característica ésta que necesariamente ha de ser ajena al orden espontáneo.”

Un pensamiento en “Hayek, las teorías evolutivas y los órdenes espontáneos. Hay distintos órdenes sociales, taxis y cosmos

  1. En este texto, Hayek utiliza los términos griegos “kosmos” y “taxis” para designar dos tipos distintos de orden. El primero se define como el orden creado espontáneamente o autodirigido y el segundo como el orden creado o dirigido.

    Es por este motivo que el autor establece que la sociedad y el mercado se ajustan al kosmos en lugar de a los taxis, pues ambos surgen espontáneamente de la coincidencia de expectativas y de la interacción de planes individuales a través de los tiempos. Pese a esto, deja en claro que grandes instituciones pueden influir en la sociedad y en el mercado.

    El problema está en que las personas se niegan a admitir la existencia de un orden no creado por el hombre, ya que los órdenes naturales, no se pueden ver ni captar con los sentidos. Pero mas alla de la negacion existente, Hayek hace incapie en los beneficios que generan los Kosmos por ser procesos que van evolucionando con el tiempo y que no requieren de la intervencion de ningun tipo, incluso cualquier tipo de influencia podria resultar peor, pues en defintiva son ordenes que se basan en la interaccion de planes de personas que actuan en su propio mejor interes.

    Me resulta sumamente importante destacar como Hayek establece que la libertad individual y la ausencia de coacción de terceros son los pilares para que los órdenes espontáneos como el mercado funcionen eficientemente.

    – ¿Hasta qué punto cree que los kosmos necesitan de los nomos para funcionar? ¿En cierta medida los nomos no estarían limitando las acciones individuales?

    – ¿Si el orden de mercado incrementa las posibilidades de control individual, puede llegar un punto donde no se necesiten más leyes de controles?

    – ¿Cree que otro motivo por el cual las personas niegan la existencia de ordenes naturales es por la religión y a la necesidad de creer en un ser supremo que controla todo?

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