Soluciones institucionales, o voluntarias, a los que llaman problemas de «fallas de mercado», cuando muchas veces es ausencia de mercados

Con los alumnos de OMMA Madrid, en la material Economía e Instituciones, vemos la provisión voluntaria de bienes públicos, del capítulo “Soluciones Institucionales”:

En cuanto a la provisión de bienes públicos, la respuesta casi inmediata es que deben ser provistos por el Estado, ya que el mercado sería incapaz de hacerlo. El caso típico, presentado por distintos economistas, es el de un faro, en relación con el cual la imposibilidad de excluir a quien no pague, una vez que la luz es emitida, daría como resultado una conducta de free rider, que trataría  de evitar el pago, dado que es imposible evitar que vea la señal de todas formas. El ejemplo aparece en John Stuart Mill, Henry Sidgwick y Alfred C. Pigou, con ese mismo argumento de la “no exclusión”, y reaparece en Paul Samuelson con otro adicional, según el cual no tendría sentido excluir a los que no pagan, ya que no hay congestionamiento en el servicio; es decir, no hay ningún costo extra, si un barco más observa la señal del faro para guiarse. En este caso no solamente sería improbable que el sector privado proveyera los faros, sino que, de poder hacerlo, no sería conveniente, ya que cada barco desincentivado para navegar por dichas aguas debido al pago del peaje por los servicios del faro, representaría una pérdida económica social

Conocida es la respuesta de Coase (1974) a este ejemplo, después de estudiar la historia de los faros en Inglaterra y demostrando que durante varios siglos fueron financiados y administrados por los dueños de barcos y emprendedores privados. Durante varios siglos, en Gran Bretaña, los faros fueron construidos y mantenidos por Trinity House (Inglaterra y Gales), los Comisionados de Faros del Norte (Escocia) y los Comisionados de Faros en Irlanda, cuyo presupuesto provenía del Fondo General de Faros, formado a su vez por los cargos que pagaban los armadores de buques. Esto en cuanto se refiere a los faros que ayudaban a la navegación general, ya que los faros de tipo “local” eran financiados por los puertos, que recuperaban los gastos en que incurrían mediante los cargos que hacían a quienes los utilizaban.

Había pocos faros antes del siglo XVII. Trinity House era una institución que evolucionó desde un gremio de navegantes en la Edad Media, que en 1566 obtuvo el derecho a proveer y regular las ayudas a la navegación, que incluyen, además de los faros, boyas, balizas y otras marcas.

Coase (p. 360) sostiene que “a comienzos del siglo diecisiete, Trinity House estableció faros en Caister y Lowestoft. Pero no fue sino hasta fines de ese siglo que construyó otro. Entretanto la construcción de faros había sido realizada por individuos particulares. De 1610 a 1675 Trinity House no construyó ningún faro nuevo. Por lo menos diez fueron construidos por individuos particulares”. Trinity House se oponía a estas iniciativas privadas, pero los particulares evitaban el incumplimiento del control de tal organización obteniendo una patente de la Corona, que les permitía construir el faro y cobrar el peaje a los barcos que supuestamente se beneficiaban del mismo.

La intervención de la “Corona” y el cobro de un “peaje” parece indicar la participación estatal, por más que el faro fuera construido por algún particular. Es decir: se necesitaría el poder estatal para tener la posibilidad de cobrar peajes, en forma coercitiva, a los barcos que transitaran por tal ruta marítima. Pero no era este el caso. Coase subraya que el particular presentaba una petición de los armadores y operadores de buques sobre la necesidad del faro, el beneficio que obtendrían con él y su voluntad para pagar el peaje, por lo que se trataba de una operación voluntaria y el Estado participaba simplemente porque se había adueñado de la autoridad para erigirlos, ya que el acuerdo entre armadores y operadores y el particular se podría haber realizado de todas formas, sin seguir obligatoriamente ese camino, pues los primeros aceptaban voluntariamente el pago y no actuaban como free riders.

He aquí un tema importante, ya que, según la teoría de los bienes públicos de Mill/Sigdwick/Pigou/Samuelson, todos buscarían su beneficio inmediato, consistente en no tener que pagar dicho peaje, sabiendo que, una vez que el faro estuviera allí, no podrían excluirlos de su uso, y que, actuando todos de esa forma, el cobro del peaje y la provisión privada serían imposibles. Sin embargo, esto no ocurría; evidentemente había otros elementos que llevaban a una conducta diferente, entre los cuales podemos destacar dos: un sentido de cooperación entre los armadores, aunque fueran competidores entre sí, o que no se le diera importancia al hecho de que algunos pasarían por allí y recibirían el servicio gratuitamente.

Buscando algún ejemplo más cercano en el tiempo y el espacio, ya vimos que los residentes de Buenos Aires no tienen que ir más lejos del río junto al que se asienta su ciudad. Allí, en el canal por el que el río Luján desemboca en el Río de la Plata, hay una serie de boyas con la inscripción “UNEN” y una numeración. Esta sigla significa “Unión Nacional de Entidades Náuticas”, que reúne a los distintos clubes náuticos privados. La provisión de esta señalización proviene de aportes voluntarios privados, que realizan estos clubes, y en definitiva de las cuotas sociales que pagan sus socios. No parece que estos actúen como free riders e incluso, si algún barco pasa por allí y no pertenece a ninguno de esos clubes, ello no constituye impedimento para que los demás se organicen, y provean y mantengan este sistema de señales. Y no solo eso: los mismos clubes tienen en sus entradas sobre la costa balizas rojas y verdes, con el obvio fin de ayudar a sus socios en la maniobra de entrada y salida, pero brindando también un servicio gratuito a quienes pasan por allí. Nuevamente, la existencia de estos free riders no frena o limita la provisión de tales servicios.

¿Habría más señales de ese tipo, si pudiera cobrar a esos free riders? Depende de con qué se lo compare: si es con una supuesta condición ideal, parecería que sí, y en tal caso esa comparación daría como resultado una “falla” del mercado, pero Coase y Demsetz (en Cowen, pp. 107-120) denominan a esto “el enfoque Nirvana”: es decir, algo así como comparar las imperfecciones de este mundo con el ideal del Paraíso, dado que lo que corresponde es comparar arreglos institucionales alternativos; en este caso, esta provisión voluntaria privada, con una posible provisión estatal. En el caso de las boyas UNEN mencionadas, su misma existencia es una demostración del “fracaso de la provisión estatal”, ya que los clubes lo han hecho ante la inacción pública al respecto.

Comenta Coase una historia de notable espíritu emprendedor, relacionada con el famoso faro de Eddystone, erigido en un peñasco, a veinte kilómetros de Plymouth. El Almirantazgo británico recibió un pedido para construir un faro y Trinity House consideró que era imposible; pero en 1692 el emprendedor Walter Whitfield hizo un acuerdo con Trinity House, por el que se comprometía a construirlo y a compartir las ganancias. Nunca llegó a construirlo, pero sus derechos fueron transferidos a Henry Winstanley, que negoció un acuerdo mejor: recibiría todas las ganancias durante los primeros cinco años y luego los repartiría en partes iguales con Trinity House, durante otros cincuenta años. Construyó primero una torre y luego la reemplazó por otra, cuya conclusión tuvo lugar en 1699, pero una gran tormenta lo destruyó en 1703, cobrándose la vida de Winstanley y de algunos de sus trabajadores. Dice Coase (p. 364): “Si la construcción de faros hubiera quedado solamente en manos de hombres motivados por el interés público, Eddystone hubiera permanecido sin faro por largo tiempo. Pero la perspectiva de ganancias privadas asomó nuevamente su horrible cara”.

Otros dos emprendedores, Lovett y Rudyerd, decidieron construirlo de nuevo, y el acuerdo se pactó en mejores términos: una concesión por noventa y nueve años, con una renta anual de cien libras y el cien por cien de las ganancias para los constructores. El nuevo faro se completó en 1709 y operó hasta 1755, cuando fue destruido por un incendio. La concesión, que tenía todavía unos cincuenta años por delante, había pasado a otras manos y los nuevos propietarios decidieron construirlo nuevamente, para lo que contrataron al mejor ingeniero de esos tiempos, John Smeaton, que completó una nueva estructura de piedra en 1759, que se mantuvo operando hasta 1882, cuando fue reemplazado por una estructura nueva, elaborada por Trinity House.

Según Coase, un informe del Comité de faros de 1834 reporta la existencia de cuarenta y dos faros en manos de Trinity House, tres concesionados por ella a individuos, siete concesionados por la Corona a individuos particulares, cuatro en manos de propietarios según distintos permisos, un total de cincuenta y seis, de los cuales catorce estaban en manos privadas, amparados por distintos acuerdos de propiedad. Trinity House, recelosa de la competencia, y argumentando que bajo su égida los peajes serían más bajos, terminó consiguiendo el monopolio de los faros y todos quedaron bajo su órbita.

En una respuesta directa a Mill, Sidgwick, Pigou y Samuelson, Coase concluye: “… los economistas no deberían utilizar los faros como un ejemplo de servicio que puede ser provisto solamente por el Estado. Pero en este trabajo no se intenta resolver la cuestión de cómo debería organizarse y financiarse el servicio de faros. Eso deberá esperar estudios más detallados. Entretanto, los economistas que deseen señalar un servicio como mejor provisto por el Estado, deberían utilizar un ejemplo que tenga más fundamento” .

9 pensamientos en “Soluciones institucionales, o voluntarias, a los que llaman problemas de «fallas de mercado», cuando muchas veces es ausencia de mercados

  1. Resumen.
    En el capítulo 7 de “El Foro y el Bazar” se analizan las soluciones institucionales o voluntarias cuando existen fallas de mercado o públicas. Así, tanto el mercado como la política son indicadores imperfectos de las preferencias de las personas. El funcionamiento de mercado presenta como se dijo anteriormente fallas que pueden ser resueltas mediante soluciones voluntarias. La política a su vez también tiene fallas, pero existen estructuras de gobernabilidad que pueden minimizar sus errores. Algunas soluciones alternativas a las fallas de mercado son la remoción de barreras a la competencia, la solución negociada de externalidades y la provisión vinculada de bienes públicos. En cambio, soluciones para problemas de política son división de poderes, buen funcionamiento de la justicia y participación democrática en la toma de decisiones. El conjunto de soluciones voluntarias y políticas publicas determina la calidad institucional

    Temas.
    Los temas mas interesantes de esta lectura son el teorema de Coase y la provisión voluntaria de bienes públicos.
    El teorema de Coase afirma que con bajos costes de transacción o nulos, las partes tratarían de llegar a acuerdos mutuamente satisfactorios para internalizar externalidades y el recurso seria destinado a su uso más valioso.
    En cuanto a la provisión de bienes públicos, la respuesta casi inmediata es que deben prestarlos el Estado ya que el mercado es incapaz de hacerlo. El caso típico mediante el cual se ejemplifica esta situación es la del faro, sin embargo, este podría ser prestado por el mercado e incluso lo ha sido históricamente en Gran Bretaña. Así, la teoría de los bienes públicos, no tanto en las características de esos bienes y servicios, sino en su conclusión de que solo pueden ser previstos por el Estado. Sin embargo, pueden ser provistos por el mercado como la seguridad privada y la televisión abierta.

    Preguntas.
    ¿Cuál es la solución alternativa más eficiente?
    ¿Es posible que en el futuro los bienes pucos comiencen a ser provistos en mayor medida por el mercado?
    ¿Cómo se determina y mide la calidad institucional de los países?

  2. En este capitulo 7 «Soluciones Institucionales» se presentan soluciones alternativas a los problemas que presenta el mercado y la política. Para ello se empieza por acotar la critica que realiza Coase a Pigou sobre las soluciones que éste último propone a las externalidades: impuestos a las negativas y subsidios a las positivas. Coase propone que son los costos de transacción lo que determinan si las partes podrán llegar a un acuerdo sobre las externalidades (Teorema de Coase).
    Ahora bien, para el Teorema de Coase caben dos interpretaciones: (i) los costos de transacción cero serían un parametro de partida para el analisis, ya que no se presentan en la realidad. Sería algo similar como un estado de equilibrio para iniciar un analisis teórico (ii) con presencia de costos de transacción surgen y se desarrollan instituciones (pautas de conducta) que tratan de internalizar las externalidades destinando los bienes a sus usos más valiosos.
    Bajo esta segunda interpretación del Teorema de Coase se presentan distintos casos en los cuales los sujetos van estableciendo pautas de conducta ante las fallas del mercado y de la politica, Los casos más evidentes serían los de la economía «informal» que desarrolla Hernando de Soto en su libro «El otro sendero», cuyas situaciones sociales también se presentan en Argenitina y Brasil. También instituciones formales desarrollan mecanismos alternativos al mercado y politica, como las Universidades,Entidades Deportivas (FIFA), empresas privadas (Disney), ya que estas cuentan con menanismos de asignación de recursos y solución de controversias de obligatorio cumplimiento.
    Temas importantes:
    – Cuando aumenta el caracter impersonal de los intercambios, se desarrollan «instituciones» para compensar esta falta de conocimiento personal entre las partes.
    – Los bienes públicos pueden ser provistos en forma voluntaria, cuando se atan a la producción de un bien privado.
    – Coase no está de acuerdo con una posición «eficientista», ya que el subjetivimo en las valorizaciones y la imposibilidad de hacer comparaciones interpersonales de utilidad tornaría a las decisión judicial de maximizar la riqueza económica en algo complicado, si no imposible de realizar. Por ello la solución debería se previa al conflicto,mediante una delimitación clara de los derechos de propiedad y la solución voluntaria de las partes, lo que demanda que el mecanismo de gobernabilidad funcione.
    Preguntas:
    ¿La responsabilidad objetiva, a la cual se adhieren los austriacos, es mejor a que la responsabilidad debe recaer en aquel que puede evitar el daño al menor costo?
    ¿Es correcto llamar «informal» a soluciones voluntarias, eficientes y alternativas a aquellas impuestas por la «ingenieria social»?
    ¿Qué tan viable es trasladar soluciones institucionales a paises con distintas culturas?

  3. En este capítulo se nos presentan algunas soluciones alternativas desde la iniciativa individual frente a las llamadas «fallas del mercado» y la confrontación de ideas entre Pigou que consideraba que la única solución a las externalidades era subsidiar a las positivas y sancionar (impuestos) a las negativas y Coase que afirmó que con bajos o nulos costes de transacción, las partes llegarían a acuerdos sin importar a quién se asignara el derecho de propiedad.
    Muy mayoritariamente se defiende que la provisión de bienes públicos no puede hacerse más que por el Estado puesto que por su característica de no exclusión y no rivalidad en el consumo se favorece la existencia de los «free riders» y desaparecería, según los defensores de esa solución, el interés económico para la provisión privada de esos bienes.
    La realidad es bien distinta y múltiples ejemplos actuales (televisión, radio, carreteras…) e históricos (el canal de Suez y el de Panamá, los faros en Gran Bretana, corsarios como proveedores de seguridad…) desmienten eso.
    La información asimétrica se intenta también resolver con el desarrollo de instituciones como las opiniones de los usuarios acerca de productos y servicios, las agencias privadas de calificación (UTAC…)
    Por último, la «dependencia del camino» no es tampoco una fatalidad: la sustitución en el tiempo de los estándares de vídeos, el idioma «universal» o los sitemas operativos de los ordenadores son buenos ejemplos.

    TEMAS
    * Las innovaciones tecnológicas cambian el carácter de los bienes y servicios: la televisión por cable, por ejemplo.
    * Las redes (bancos, Internet, tarjetas de crédito) desmienten la fatalidad de acabar en una situación de monopolio en los sectores donde no existe la ley de rendimientos decrecientes.

    PREGUNTAS
    * Incluso en los países considerados más democráticos, hay un abismo entre la realidad y las instituciones adecuadas para resolver las fallas de la Política. Qué transformaciones hacen falta para tomar conciencia de ello y hacer evolucionar nuestros sistemas políticos? Es solo cuestión de Educación? De información libre?
    * El caso de la China comunista parece desmentir el axioma de que una buena gobernabilidad favorece el desarrollo. Allí, una tiranía comunista oprime a las personas pero el desarrollo es incontestable. Cómo se puede explicar?
    * Existen bienes públicos para los que nunca se haya propuesto una provisión desde el sector privado?

  4. Soluciones Institucionales

    Resumen:

    En este capitulo se analizan soluciones alternativas para cuando “fallan los mercados o falla la politica.”
    La calidad de las instituiciones es clave para minimizar estos problemas ya que su eliminacion total es imposible.
    Se discuten distintos caminos para promover la competencia, el Teorema de Coase como instrumento analitico para internalizar externalidades, el enfoque del derecho Vs el analisis costo beneficio en la adjudicacion de conflictos, se analizan como resuelven estos problemas los informales que viven fuera de un sistema juridico estatal, la provision del servicio de faros por el sector privado desafiando el concepto de bien publico, distintas alternativas de provision privada de bienes que en principio deberian ser provistos por el Estado de acuerdo a la teoria de las fallas del mercado, informacion asimetrica y dependencia del camino.
    Tambien se relata como el sector privado puede abastecer servicios que tradicionalmente han estado en manos del Estado, como por ejemplo los caminos.
    Una buena gobernabilidad es clave para que los sectores privados y publicos pueden funcionar de manera armonica generando soluciones voluntarias lo que determina la calidad institucional de un pais.

    Temas para destacar:
    – Los mercados pueden “fallar” pero la politica soluciona?
    – No existen soluciones perfectas, pero se pueden ir buscando alternativas que vayan atacando los problemas aunque esas respuestas no sean necesariamente optimas.
    – Los problemas de conocimiento disperso y subjetividad del valor como limitaciones del enfoque costo/beneficio en la solucion de conflictos.
    – Los casos historicos como el del faro refutando los supuestos de fallas del mercado, que muestran que dado el marco institucional adecuado se generan soluciones voluntarias.
    – El analisis de instituciones comparadas y como afectan el crecimiento economivo.

    Preguntas:
    – La justificacion de la propiedad utilizando la idea de Locke de apropiacion original tiene alguna limitacion en el tiempo?
    – Las soluciones que se alcanzan en entornos de informalidad son un parche frente la falta de Estado o eventualmente son mas eficientes que si el Estado estuviera presente?
    – Cuales serian las 3 principales reformas constitucionales que propondrias para comenzar a encarrilar a la Argentina?

  5. Resumen
    En el capitulo “Soluciones Institucionales” se plantea las posibles soluciones para mitigar las fallas de mercado y las fallas de la política, las cuales no desaparecerán por completo pero si ayudara a mitigarlas. La solución que se plantea al problema de ingresar al mercado es que existan cierto tipo de regulaciones y restricciones a determinados tipos de industria o actividades económicas. Se plantea que sean las instituciones las que intervengan absorbiendo los costos de transacción de las personas pero a costo de poner en restricción los derechos de propiedad. Actualmente se posee evidencia que la mayoría de los individuos de las sociedades prefieren arreglar sus problemas con sus vecinos personalmente que acudir a las instituciones. Luego se ejemplifica como la sociedad se las arregla en el tema de justicia y propiedad de tierras invadidas del Estado. En cuanto al tema de bienes públicos, el autor da ejemplos de cómo la sociedad se las ingenia para proveer servicios que tendrían que ser prestados por las instituciones.

    Temas de interés
    La violación de los derechos de propiedad a coste de reducir externalidades.
    El papel de la sociedad en la generación de servicios públicos.

    Preguntas
    ¿Cuál será el costo de oportunidad de renunciar a la propiedad privada con tal de reducir las externalidades?
    ¿Están definidos los bienes públicos en ley que el Estado debe de proveer?
    ¿Existe algún mecanismo de presión para que el Estado provea los servicios públicos que le competen?

  6. • Resumen
    Tras analizar las fallas del mercado y de la política, en este capítulo del libro se analizan posibles soluciones institucionales. Dado que la competencia siempre nunca será perfecta, se empieza analizando la necesidad de desregular la entrada de nueva competencia. En relación con la solución relativa al problema de las externalidades, Ronald Coase afirma que con bajos costos de transacción no habría mucho problema en internalizar los costes que suponen las externalidades. En cuanto a la provisión de bienes públicos Coase comenta el caso típico de un faro que es provisto por el sector privado. Además, debido a que nos hemos criado con la figura del Estado, nos es muy difícil pensar en la provisión privada de bienes públicos que siempre han sido provistos por el Estado.

    • Temas novedosos o importantes
    Un tema que siempre parece novedoso, debido a que nos hemos criado en un mundo estatalizado, es la viabilidad de la provisión de determinados bienes y servicios públicos por parte del sector privado. Creo que es importante estudiar las alternativas y abrir la mente a las nuevas posibles soluciones.

    • Tres preguntas que le haría al autor
    1) ¿Hay algún bien o servicio público que no pueda ser provisto hoy en día por el sector privado?
    2) Relacionado con la pregunta anterior, ¿cuál sería el bien o servicio público que más costaría a día de hoy poner en manos del sector privado?
    3) ¿Por qué cree que está tan mal vista la provisión privada de bienes y servicios públicos?

  7. Cap. Soluciones institucionales

    En el capítulo soluciones institucionales se abordan los dos mecanismo para encontrar salidas a problemas de una sociedad, estas son: el mercado y la política. En el mercado vimos algunas soluciones, evolutivas casi siempre, como eliminar las barreras de comercio, alternativas a medios públicos y soluciones a externalidades como vimos en el caso de los barrios marginales. Mientras que la política ofrece soluciones como la seguridad jurídica, marco constitucional simple, y otras para el desarrollo de una sociedad libre.

    Me interesó la idea de explorar una alternativa a los canales públicos teniendo en cuenta que son financiados, mayormente, por empresas privadas. Así como la forma de asociación de los nuevos asentamientos.

    ¿La solución a la informalidad es la desregularización?
    ¿Cómo aumentar la productividad de un municipio?
    ¿Cómo determinar si una externalidad es negativa?

  8. Soluciones Institucionales Capitulo 7

    En este capitulo se discutió sobre las alternativas que se presentan ante las fallas del mercado y las fallas políticas, las soluciones voluntarias versus las soluciones propuestas por el gobierno o gobernabilidad. Entre las soluciones se menciona a la eliminación de barreras para dar oportunidad a la libre competencia y lo delicado del limite entre promover la libre competencia y un proteccionismo contra-producente. Se presenta el Teorema de Coarse como una critica a Pigou que propone soluciones a las externalidades mediante subsidios o impuestos: “Coase afirmó que con bajos costos de transacción o en ausencia de los mismos, las partes llegarían a concretar acuerdos mutuamente satisfactorios para internalizar las externalidades, sin importar a quién se asignara el derecho, y el recurso sería destinado a su uso más valioso”.
    Se explica tambien mediante ejemplos las instituciones informales que nacen ya sea por un vacio de instituciones de gobiernos o por la naturaleza de la sociedad y como se llega a una resolucion de disputas de manera formal o informal. Se muestra la importancia de la definición de los derechos de propiedad y como esto afecta los costos de transacciones y la necesidad de instituciones formales e informales que garanticen este derecho.

    Temas Interesantes
    1. Los tres niveles de evolución que distingue Hayek: la genética, la de las ideas y, la cultural operando entre el instinto y la razón.
    2. En caso de la ineficiencia o vacio de instituciones formales, las comunidades llegan a tener sus propias instituciones informales para alcanzar acuerdos sobre los derechos de propiedad.
    3. Ya sea de manera formal o informal, la soiedad requiere de una clara definicion de propiedad privada para interactuar.

    Preguntas:
    1. En el caso mencionado de los conejos y el cultivo por que se menciona que segun el teorema de Coase los dos pueden ser igualmente resposables?
    2. Cómo se podría llegar a que exista un mecanismo de gobenabilidad que funcionen adecuadamente? Cuáles podrian ser los requisitos?
    3. Se puede afirmar, de acuerdo a la lectura, que en caso de vacío o ineficiencia de instituciones gubernamentales formales, las instituciones informales pueden llegar a funcionar incluso de manera mas eficiente haciendo innecesarias las instituciones informales?

  9. En el Capitulo 7 “Soluciones Institucionales” del libro “el Foro y el Bazar” , habla acerca que la política y el mercado son imperfectos tienen fallas, pero pueden haber instituciones que gobiernen para minimizar los errores. Deben de haber buenas instituciones, estructuras de gobierno que funcionen adecuadamente que no pongan barreras a los mercados para que funciones competitivamente, garanticen los derechos de propiedad, que tenga limitado su poder, para que funcionen armónicamente con el mercado. Presenta el Teorema de Coase, en la parte positiva el derecho de propiedad es importante, pero no determina el uso del recurso, si no determina quien le paga a quien, y cuando los costos de transacción con muy altos, tiene una alternativa institucional, pone énfasis en el derecho de propiedad par reducir costos de transacción y que las partes pueda negociar. Las negociaciones informales crean sus propios “contratos de ocupación” donde determinan sus limites y responsabilidades de cumplimiento de la organización informal, forman así mismo grupos representativos de las organizaciones informales que ayudan a que se cumplan los contratos informales que han establecido. La provisión voluntaria de bienes se da porque las ganancias privadas son mayores a sus costos, tomando en cuenta los costos que pudieran generar los free riders cuando utilizan el bien público de una forma gratuita.

    Temas
    Las instituciones buenas, pueden realizar las funciones que le corresponden para no interferir en el mercado pero si incentivarlo.
    Las dos interpretaciones del Teorema de Coase, la positiva donde las diferentes partes llegan a un acuerdo, y la alternativa institucional.
    Negociaciones Informales determinan las obligaciones y responsabilidades para su cumplimiento.
    Los bienes públicos pueden ser provistos en forma voluntaria, cuando se atan a la producción de un bien privado.

    Preguntas al Autor:
    1. Como una buena institución puede incentivar a que crezca un mercado?
    2. Debería el Estado determinar quien provea los bienes públicos?
    3. De que forma se puede maximizar la ganancia de un bien público?

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