Hayek sobre la igualdad, la libertad y el mérito, ahora que éste es cuestionado

Con los alumnos de la materia Escuela Austriaca, de UCEMA, vemos a Hayek sobre el mérito y la justicia social en Los Fundamentos de la Libertad. En ese gran libro uno de los capítulos trata los temas de la igualdad, el valor y el mérito. Así comienza:

“Ha constituido el gran objetivo de la lucha por la libertad conseguir la implantación de la igualdad de todos los seres humanos ante la ley. Esta igualdad ante las normas legales que la coacción estatal hace respetar puede completarse con una similar igualdad de las reglas que los hombres acatan voluntariamente en sus relaciones con sus semejantes. La extensión del principio de igualdad a las reglas de conducta social y moral es la principal expresión de lo que comúnmente denominamos espíritu democrático, y, probablemente, este espíritu es lo que hace más inofensivas las desigualdades que ineludiblemente provoca la libertad.

La igualdad de los preceptos legales generales y de las normas de conducta social es la única   clase de igualdad que conduce a la libertad y que cabe implantar sin destruir la propia libertad. La libertad no solamente nada tiene que ver con cualquier clase de igualdad, sino que incluso produce desigualdades en muchos respectos. Se trata de un resultado necesario que forma parte de la justificación de la libertad individual.

Si el resultado de la libertad individual no demostrase que ciertas formas de vivir tienen más éxito que otras, muchas de las razones en favor de tal libertad se desvanecerían. Las razones en favor de la libertad no exigen que el gobernante trate a todos igualmente, porque se presuma que los hombres son de hecho iguales, ni tampoco porque se pretenda hacerlos iguales. La dialéctica en pro de la libertad no sólo proclama que los individuos son muy diferentes, sino que en gran medida se apoya en dicha presunción; reitera, por lo demás, que las diferencias existentes entre los humanos no pueden servir de justificación cuando el gobernante intenta discriminar coactivamente entre los gobernados, y obstaculiza la implantación de aquel trato diferencial a  que habría de acudir la autoridad si deseara garantizar posiciones iguales en la vida de los individuos que de hecho presentan entre ellos notables diferencias.

Quienes modernamente abogan por una igualdad material de más largo alcance, rechazan constantemente que su pretensión se fundamenta en el supuesto de que todos los mortales, de hecho, sean iguales. Ello no obstante, amplios sectores todavía creen que esta es la principal justificación de tales aspiraciones. Pero nada produce más daño a la pretensión de igualdad de tratamiento que basarla en una presunción tan obviamente falsa como la de la igualdad de hecho de todos los hombres. Basar los argumentos para la igualdad de trato de las minorías nacionales o raciales en el aserto de que no difieren de los restantes hombres es admitir implícitamente que la desigualdad de hecho justificaría un tratamiento desigual y la prueba de que en realidad existen algunas diferencias no tardaría en manifestarse. Es esencial afirmar que se aspira a la igualdad de trato no obstante el hecho cierto de que los hombres son diferentes.”

6 pensamientos en “Hayek sobre la igualdad, la libertad y el mérito, ahora que éste es cuestionado

  1. Friedrich Hayek continúa construyendo en base del texto anterior, pretendiendo diferenciar como el abuso del término justicia afecta la propia importancia que tiene la ley, cuyo objetivo máximo es proteger la libertad y derechos de terceros, y delimitar las acciones que puedan atentar contra ellos. Las sociedades, por la herencia primitiva, sospecha que los resultados de la aleatoriedad de nuestras decisiones que se desarrollan hacia dentro del mercado, son producto de una mente racional, y por tal, estos resultados pueden ser manipulados a voluntad para alcanzar un objetivo determinado. Sobre estos fundamentos descansan los valores de la justicia social o distributiva, sobre la premisa económica de que se puede reasignar aquello que el mercado se ha encargado de asignar de manera eficiente, de modo tal, que todos los miembros de la sociedad reciban una parte justa de lo producido. Estos ideales, dice Hayek, están íntimamente ligados al socialismo, cuya fundamentación de la sociabilización de los medios de producción guardan una relación más que estrecha con la finalidad que busca la justicia social, hacer más justa la distribución de la riqueza, pero desde perspectivas diferentes. El socialismo ataca la creación de riqueza al expropiar los medios de producción, la justicia social ataca los resultados de tal producción. En las sociedades libres donde prima un modelo de libre mercado, cada individuo realiza una tarea de acuerdo a las capacidades con las que cuenta y puede de ofrecer al resto de sus conciudadanos, y, a partir de ello, recibir una remuneración. Por el contrario, una sociedad basada en un sistema donde prime la justicia social debería de ser controlada por un órgano central que dicte lo que cada individuo ha de hacer, y recibir una justa retribución por ello.

    En lo personal me pareció interesante de destacar como Hayek encuentra en el socialismo y la justicia social un punto de encuentro destacable, ya que ambas ideologías partes de la fundamentación de que la sociedad se vea favorecida al poder distribuir aquellos que estaría concentrado en manos de pocos. El socialismo se encargaría de distribuir los medios de producción, y con ello, la posibilidad de que todos los miembros de la economía puedan producir y disfrutar la rentabilidad de su producción. La justicia social, por otro lado, no hace foto en las raíces de la riqueza, sino que, al contrario del socialismo, avanzaría inmediatamente contra los resultados de la producción. Por otro lado, me pareció interesante el análisis sobre las implicancias de la justicia social en el plano real, la cual, solo tendría razón de ser en un contexto de gobierno centralizado que apunte a cada miembro de la sociedad qué tareas hacer, y asignar retribuciones por ello, lo cual sería la retribución justa para el trabajo realizado. Pero esto último choca con la historia, ya que, a lo largo de los siglos, ningún gobierno ni entidad pudo establecer a través de un análisis racional qué es lo justo en cuanto a las retribuciones, ya que, para ello, debería de conocer cómo funciona el sistema de precios y manipularlo a voluntad.

    · ¿Por qué nuestras democracias liberales han mutado de tal manera que día a día se hace más popular el concepto de justicia social? En especial en Estados Unidos, uno de los países que más ha estado ligado al individualismo y los ideales de libertad.
    · ¿Puede que sea el pensamiento primitivo que menciona al iniciar este capítulo el que explique tal metamorfosis? ¿O acaso existen otras indicios que lleve a las sociedades a esta ideología?
    · ¿Qué deberían de hacer los académicos liberales para cambiar esta visión? ¿Cómo se combate tal dogma en una sociedad guiada por los sentimientos?

  2. En este capítulo, Hayek empieza diciendo que su labor en este escrito va a ser el de realizar una critica al abuso del termino justicia que amenaza con acabar con este concepto como baluarte de la libertad individual. Se incluye una cita de mills en la cual establece que la idea de justicia tiene que ser aquella situación en la que cada persona obtenga lo que merece. La exigencia de justicia social se dirige a la sociedad en sentido estricto (sin tener en cuenta el gobierno). Hayek menciona que el termino de justicia social se utiliza a día de hoy especialmente en peticiones políticas. La sociedad actual exige acciones en materia de justicia por parte de las autoridades, las cuales deben ordenar a la gente lo que tiene que hacer. La justicia social es la principal característica del hombre bueno. Por otra parte, el autor realiza una reflexión acerca de la influencia de la justicia social en el orden de mercado y en el orden económico basado en el mercado. Solo podemos hablar de justicia social en un sistema de economía administrada, ya que en una economía en la que cada individuo puede usar sus propios conocimientos para sus propios fines, la justicia social es un término vacío. Se habla del fundamento del orden económico, en el que se menciona que esta idea que ya hemos leído acerca de que los individuos pueden elegir el trabajo que les apetezca siempre que la remuneración esperada se corresponda con el valor que sus servicios tienen para quienes los reciben.

    Es interesante ver como Hayek introduce el concepto de justicia social (así como su demanda) en procesos espontáneos como el orden de mercado. La reflexión acerca de que la introducción del “mito de la justicia social” hará que lleguemos de manera progresiva a un sistema totalitario es sorprendente, me parece que es un poco exagerado, quizás por que Hayek tiene una idea distinta de “sistema totalitario”, quizás se está refiriendo a un sistema sin libertad de mercado. Por otra parte, Hayek solo concibe la justicia social en una economía administrada, lo cual me ha hecho preguntarme si Hayek no concibe injusticia en su sistema económico ideal. Por último, me ha gustado la idea de que en un sistema de normas de conducta individual, ninguna acción libre de los individuos puede producir resultados que puedan satisfacer el principio de justicia distributiva, ya que Hayek está diciendo que en ausencia de un ente que imponga normas en base a su concepto de justicia social, va a primar el individualismo y la idea de que cada cual es responsable de sus actos.

    En una economía con total ausencia de gobierno, ¿por que la justicia social es un término vacío?
    Hayek menciona que quizás deberíamos replantear la idea de que esfuerzo equivale a recompensa ¿está Hayek criticando la meritocracia?
    Si Hayek viese la sociedad actual ¿que opinión le suscitaría en relación a la justicia social?

  3. Hayek en este texto explica que os fundamentos de la justicia social descansan sobre la premisa económica de que es posible reasignar lo que el mercado asigna de forma eficiente de modo que cada una de las partes reciben parte de lo producido. Estas ideas para Hayek están ligadas al socialismo ya que la finalidad del mismo será la justicia social a partir de la socialización de los medios de producción. En cambio, en una sociedad liberal los individuos se organizan en base a sus habilidades que desemboca en la división internacional del trabajo.
    Lo novedoso del texto es que se mete de lleno en un tema del cual no se habla tanto ya que la idea de que un órgano central organice casi todos los aspectos de la economía esta mas que presente hace mucho tiempo y ya no lo criticamos. En el imaginario social persiste la idea de que debe haber un ente regulador que se encargue de estas cuestiones. Creo que el socialismo ha aprovechado de mejor manera las herramientas existentes para así ganar la batalla cultural al liberalismo.
    Preguntas:
    1-¿Por qué cree que en el imaginario social persiste la idea de que si o si debe haber un organismo central en casi todas las áreas de la economía?
    2-¿Por qué los pensadores liberales no han dado una batalla mas firme en esta cuestión?

  4. Tal como describe Hayek, la justicia social se basa en la creencia de que los resultados de la coordinación espontánea en el mercado están determinados deliberadamente y pueden, por lo tanto, ser juzgados bajo ciertas reglas morales. Quienes defienden esta premisa, pretenden someter a la sociedad a un modelo de distribución particular, con el fin de alcanzar un output considerado como justo. En el texto que acá se describe, Hayek no sólo demuestra la imposibilidad aplicar aquel concepto en la Sociedad Abierta, sino que además deja en evidencia que la llamada “justicia social” no es justicia ni es social. En primer lugar, no es justicia porque, puesto que cada individuo puede usar sus propios conocimientos para sus propios fines, no hay ninguna voluntad que pueda determinar los ingresos relativos de las distintas personas en el libre mercado. Por lo tanto, no hay a nadie a quién acusar de ser injusto. Análogamente, estas políticas sólo pueden considerarse compatibles con un estado de derecho desde la perspectiva del derecho positivo. Bajo el cual, el legislador determina arbitrariamente qué es o no justo. En segundo lugar, la justicia social no es social en el sentido de que no es producto del proceso social espontáneo. Es una concepción que debe imponerse a la sociedad.

    De lo más importante del texto de Hayek, destaco la forma en la que llega a la conclusión de la imposibilidad de imponer un régimen basado en la justicia social en la sociedad libre y, la defensa del orden espontáneo tanto desde el utilitarismo como desde el deontologismo. En primer lugar, el autor entiende que, entre las reglas abstractas de la Sociedad Abierta, está la de que nadie puede coaccionar al resto. Por lo tanto, si se quiere mantener aquel orden, hay que conformarse con los resultados que de él afloren. En segundo lugar, Hayek explica que mantener el principio bajo el cual se trata a todos los hombres por igual es la única forma de mantener la paz y que, por lo tanto, “nuestra percepción racional debe dominar los instintos que hemos heredado”. Es decir(?), la igualdad jurídica debe ser preservada, teniendo en cuenta “percepción racional” que nos dice qué es lo más útil, aún cuando no nos agrade bajo los principios heredados. Sin embargo, Hayek continúa en el mismo párrafo y, como cada vez que menciona su “Sociedad Abierta”, argumenta desde una posición más bien deontologista diciendo que la “aventura moral en la que se ha embarcado el hombre moderno al crear la Sociedad Abierta está amenazada”.

    Hayek dice que, tratando a los hombres bajo las mismas condiciones, se producirán necesariamente resultados diferentes en el mercado pero, aún así: ¿no podríamos conciliar su posición con la de Rothbard respecto a la tendencia a la igualación del ingreso psíquico en el libre mercado?

    Hayek dice que “nuestra percepción racional debe dominar los instintos que hemos heredado”, ¿No sería esta una pretensión de guiar el desarrollo de las normas sociales hacia un objetivo particular quitándole su carácter espontáneo? ¿No sería constructivismo?

    En su apartado *No existe un «valor para la sociedad»*, Hayek defiende la idea de que, en sus propias palabras, los valores ligados a varios servicios por grupos distintos de personas son inconmensurables. Muy parecido a como lo haría Rothbard o Hoppe. ¿No sería esto contradictorio con su defensa del estado como proveedor de bienes públicos o asistente de los más desfavorecidos?

  5. Justicia Social
    Resumen
    El foco del argumento de Hayek reside en la insignificancia del término “justicia social” y la imposibilidad de evidenciarlo en la sociedad de libre mercado. Por definición, el termino se halla en conflicto con la libertad individual. Es absurdo hablar de lo socialmente injusto, donde nadie intención el estado de las cosas y este depende de las voluntades individuales dispersas y enfocadas en sus propios fines. Sin embargo, para Hayek, la justicia “universal”, es requisito para la sociedad libre. A partir del error conceptual mencionado, se derivan ciertas aplicaciones que generan distorsiones en el propio funcionamiento del orden. En este sentido, Hayek asegura que dichas aplicaciones necesitarían de un planificador que direccione los recursos según su limitado conocimiento e intereses, y/o exigir que las recompensas deben darse en función de cierta cualidad, como lo puede ser el mérito o el esfuerzo.
    Novedoso
    Para este punto del curso, se puede reconocer que Hayek basa toda su teoría en torno a la dispersión de la información y la imperfección del conocimiento, en síntesis, una crítica a los límites de la razón práctica. En este caso, dentro de la crítica al concepto de justicia social, encuentro llamativo que en ultima instancia no podemos discriminar entre justo o injusto a partir de un orden donde las recompensas no están determinadas por nadie en particular. En efecto, aquí podemos ver como para poder hablar de justicia social, necesitaríamos personificar a la sociedad y centralizar la distribución de recursos. Por otro lado, la justicia en si misma es social por definición, en cambio la justicia distributiva es una acción impuesto y no producto de la espontaneidad.
    Preguntas
    ¿Como justificaría la cultura anti-mercado que se ha formado y persiste en el tiempo, la propia sociedad no se supone que evolucionaria hacia una ética a favor del libre mercado?
    ¿La actual concepción común de la justicia social, es fruto de la evolución y la tradición?
    ¿Por qué Hayek presenta una situación de todo o nada, entre libre mercado y socialismo/ totalitarismo, cuando el debate se centra en los términos medios?

  6. En el capítulo llamado “igualdad, valor y merito”, Hayek se pasea sobre estos conceptos explicando en profundidad puntos importantes sobre los mismos y dejando algunas ideas importantes. La igualdad ante la ley y comportamientos bajo “leyes sociales” que se implantan en la sociedad, no significa que la igualdad en la sociedad debe estar presente en todo sentido, debido a que las personas presentan comportamientos e ideas diferentes, valores diferentes y generan méritos diferentes, algunos en mayor medida y otros en menores (lo cual no implica que la vida en sociedad se rige a partir de los méritos ya que no se es mejor como persona ni más exitoso por generar más mérito que los demás). Si todo se distribuyera de manera igualitaria y obligatoriamente, se perderían de manera muy brusca las libertades individuales.

    Me resulta interesante, volviendo en cierta forma al punto de la igualdad y de la justicia social tocada en el trabajo anterior, el hecho de como el autor se opone con tanto fervor /ímpetu y dejando ver entre líneas si se quiere, que esta idea básicamente podríamos decir que es inútil en el sentido de que genera condiciones peores para la población y para las personas a las cuales se las debería ayudar/beneficiar con estas medidas, aparte de obligar a los que no se encuentran en esta posición, a tener que ayudar (lo cual va en contra de la libertad de elegir qué es lo que prefieren hacer con sus recursos en este caso) . El autor también expresa en un pasaje del capítulo llamado “Justicia social o distributiva” lo siguiente: “Pocos ponen en duda que sería deseable que algunas, instituciones públicas asistieran en lo posible a los niños desafortunados cuando los padres o los vecinos no pueden hacerlo. Sin embargo, pocos creen seriamente (como Platón) que pueda repararse completamente tal deficiencia, y considero aún más inaceptable la pretensión de que, como ese beneficio no puede garantizarse a todos, se deba –en razón de igualdad- privar de el a quienes lo disfrutan. Además, creo que ni siquiera la igualdad material podría compensar aquellas diferencias en la capacidad de disfrutar…”
    ¿Hay alguna manera de tener igualdad en la sociedad sin perder las libertades individuales?
    ¿Considera que podría llegar a lograrse la igualdad en un país, en sentido económico, pero en niveles altos y no en la pobreza?

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