De protestas y piquetes

Una alumna ha propuesto un tema interesante, el de las protestas y piquetes en las calles y espacios públicos, haciendo referencia a un artículo que comenta la legislación al respecto en distintos países de América Latina: http://www.infobae.com/2014/04/18/1558157-que-dicen-las-leyes-los-paises-la-region-las-protestas-y-los-piquete .
Quisiera considerar el tema desde la perspectiva de los temas que se tratan en el libro, que no es la única posible, por supuesto.

Piquetes
Nuevamente, estamos ante un problema de derecho de propiedad. Hacer un piquete en una propiedad privada habilitaría al propietario a reclamar por una violación a su derecho de uso y disposición. En general, los piquetes y protestas se realizan en propiedad pública.
Ésta tiene una característica que la puede acercar a la ausencia de propiedad. Es decir, está claro que hay un propietario, el estado, pero si éste no ejerce ese derecho con claridad entonces, “lo que es de todos no es de nadie” y se presenta la reconocida “tragedia de la propiedad común”, donde nadie tiene incentivo a “cuidar” o restringir nuestro consumo y todos tenemos el incentivo a “usar”.
Para evitar esto, el propietario, al igual que tendría que hacerlo cualquier tipo de propiedad privada colectiva (un consorcio, un club, una cooperativa, una sociedad comercial), tendría que establecer ciertas normas y controles para su uso, y para evitar la depredación. Entonces, en este caso, se trata de las normas que establece el estado para el uso de sus propios bienes (las calles, etc.). Esto es lo que está en discusión. Lo que veo es que hay un problema de jurisdicción, ya que se discute sobre leyes nacionales pero las calles serían propiedad de los gobiernos comunales, o tal vez lo sean en forma compartida. El asunto es que no está claro.
En fin, al margen de la discusión sobre la legislación en distintos países que plantea el artículo, y sobre lo que seguramente los alumnos de derecho sabrán opinar, planteo que lo mejor sería dejar esto en manos de los gobiernos locales, unificando propiedad y legislación.
De esta forma, además, recibiríamos los beneficios de la descentralización. Es decir, habría muchas legislaciones diferentes, sería un gran experimento del cual veríamos cuál es la que más funciona, o la que más se adapta a las características locales. Coincidiría, además, con la característica federal del origen institucional de este país.

El federalismo y la descentralización son, en cierta forma, un traslado de la idea de la competencia en el Mercado a la política.

16 pensamientos en “De protestas y piquetes

  1. Seria interesante ver como se puede resolver el asunto sin producir mas inconvenientes, ya que muchas ciudades son lindantes a otras y sus legislaciones pueden ser diferentes aunque esta claro que deberían tener un punto de coherencia.
    De igual manera no seria suficiente legislaciones municipales, ya que hay ámbitos de distinta competencia como rutas provinciales, rutas naciones, parques provinciales y nacionales,etc por lo cual seria necesario un triple nivel de legislación: municipal-provincial-nacional y esto implicaría una gran coordinación del poder legislativo, casi imposible en la practica.

  2. En mi opinión, creo que el problema de los piquetes se ha utilizado en los últimos años como una herramienta estrictamente política, dejando de lado otra consideración social, económica o cultural. Respecto a evitar o impedir que se sucedan por parte del Estado (ya sea Federal, Provincial o Municipal) , la Constitución Nacional es taxativa en cuanto quien es el encargado de imponer la autoridad, por lo cual, me parece que el problema es más político (voluntad de actuar), que normativo. Es indudable que también existe de parte de la Sociedad una legitimación a los piquetes ya que la misma es utilizada por amplios grupos sociales, independientemente de la clase social a la cual pertenezcan.

  3. Estoy de acuerdo con el artículo lo que es de todos nadie lo cuida, porque suponemos que el «Estado» lo va a hacer, pero este no es un persona física, entonces cada órgano le va pasando la pelota a otro y otro, un circulo interminable. El problema es que nadie se hace cargo de los bienes públicos, o si lo hacen es en medidas mínimas. Y otro problema es que la gente muchas veces es egoísta, corta una ruta prendiendo fuego gomas que dañan el medio ambiente o en algo mínimo como es tirar un papel de alguna golosina en la calle, la gente no tiene interés ni en cuidar los bienes públicos ni en preocuparse por el resto de la gente ni de lo que va a pasar en el futuro, justamente porque estos bienes públicos son de todos, y justamente como sabemos que es de todos le pasamos la responsabilidad a otro por su cuidado, siendo que ese otro nunca queda claramente identificado quien es. Si determinaramos que los bs publicos pasaran a ser privados, quizá tendríamos que pagar para usarlos pero también quizá disminuye un impuesto porque ya no sería tarea del estado hacer esa actividad, y lo mejor (creo) es que no habría duda quien es el responsable (dueño de esa propiedad), y el Estado no podría justificar egresos diciendo que los cuida cuando quizá no lo hace.

  4. No comprendo a estas alturas el porque de las protestas ultimas en Argentina. La idea debe ser la de reclamar, no la de paralizar el país, por ejemplo, y ver cuantos mas gremios se adhieren a un paro especifico. En algún punto creo que la protesta esta tan ligada a preferencias y sectores económicos puntuales, rivales políticos por asi llamarlos, que perdieron la esencia, el derecho por el que reclaman. Es muy serio que todavía no se pueda comprender la idea, por lo tanto si creo que debería de haber cierto tipo de restricciones o limites para cuando esta medida se aplique, y se ejerza realmente con el fin que fue creada.
    Todavía estamos rodeados de gente que no hace otra cosa que castigar a la población que esta en el medio de la puja de intereses, y que se olvidan, la mayoría, es la masa que hace mover la economía.
    Ojala muchos políticos puedan dejar de lado esos intereses que llevan a desestabilizar todo, y puedan luchar, protestar, reclamar, por la unidad y con las bases y situaciones que están vigentes, buscar soluciones y no mas conflictos al conflicto vigente.

  5. Considero que la mejor contribución es una salida jurisdiccional local y descentralizada, que representa el espíritu federal de nuestra Carta Magna. Nos encontramos ante la colisión de dos derechos: el de libre tránsito y circulación; y por otro lado el de la libertad de expresión, ambos tutelados en el Art. 14 CN. A partir de la superposición de ambos, el alcance del derecho de propiedad en ámbito de propiedad pública (las calles), debería contemplar y respetar la libre circulación de los ciudadanos, terceros ajenos a la cuestión, que padecen una externalidad negativa.

  6. Creo que este es un tema muy interesante sobre todo por la habitualidad de los piquetes en nuestro país . Estoy de acuerdo en el sentido que la legislación debería preever algún tipo de forma de regular el derecho de propiedad de las calles, ya que, al no existir regulación alguna cualquier cuidadano cree que puede disponer de ellas a su antojo, sin embargo, no tienen en cuenta que así como ellos pueden disponer de ellas impidiendo el paso de los demás ciudadano (al no estar regulado el derecho de propiedad de las calles y ser un «bien de dominio público), otros tenemos derecho a utilizarlos con total normalidad. De todas formas pienso que es un tema muy controvertido en lo relativo a la competencia, es decir, si es al estado como tal al que le corresponderia regularlo o cada jurisdicción especifica.

  7. Estoy totalmente de acuerdo con la legislación de los «piquetes» de manera descentralizada, creo que sería una alternativa a la solución de la colisión de derechos positivizados en nuestra Constitución, que si bien están perfectamente reconocidos no resulta claro en que momento o circunstancia termina mi derecho a expresarme libremente y a su vez comienza el derecho del otro a transitar por las calles/ rutas.. tema que resulta muy debatido y con diversas posiciones, ya que lamentablemente el tratamiento de dichos derechos siempre va a estar teñido de política.. muchas veces la propiedad pública del estado, en este caso la protección de la libre circulación pesa menos que la libertad de expresión, por lo que la represión ( legítima) decide ser evitada por el gobierno de turno.

  8. El tema de los piquetes es algo que lleva a una constante discusión ya que, es donde más se refleja una colisión de derechos : unos se sienten con derecho a hacer reclamos y huelgas y otros sienten que tienen derecho a utilizar la vía pública libremente. El tema de los piquetes y de las huelgas me recuerda al verano, donde yo no tenía luz, estaba cansada de la situación, tenía que ir a trabajar arreglándomelas como podía y encima en el regreso a mi casa tardaba de 40 minutos a 1 hora más de lo normal porque otros vecinos sin luz cortaban las calles… yo también estaba siendo perjudicada por la falta de luz y a caso no tenía derecho de llegar a casa sin sufrir más inconvenientes de los que ya venía teniendo a raíz de la falta de luz? El derecho de uno a reclamar y el derecho del otro a transitar es una pelea interminable ya que como dijeron mis compañeros no resulta claro en que momento o circunstancia termina un derecho y empieza el del otro. Creo que sólo puede mejorar y equilibrar esta situación el Estado. Es él quien debe intervenir impulsando las medidas que sean necesarias para que esta colisión de derechos tenga de una vez por todas una solución, solución que bien podría ser la unificación de la propiedad y la legislación.

  9. De lo que resulta del artículo considero que no hay una falta de normativa, la normativa esta, lo que falta es darle operatividad, porque existen sanciones a este tipo de situaciones, entonces habría que analizar porque no se aplican estas sanciones en este tipo de problemas sociales, además me parece que estas situaciones que se producen se están utilizando como una herramienta política y no como un reclamo social para lograr objetos buenos.

  10. Este tema se relaciona con el articulo que vimos en clase el jueves «la tragedia de los comunes». Creo que estamos de acuerdo en que debe haber una legislación pero hasta que punto y que pasa si esta se utiliza como medio para callar las voces más débiles? Por otra parte y sin entrar en el detalle jurídico la misma contradice un código de fondo al legítimar un delito penal. Creo que el marco normativo no es malo sino su implementacion como medio para disuadir aquellas voces críticas y como medio de llevar adelante una política de gobierno autoritaria y poco crítica no obstante es mi simple opinión

  11. Veo en la opción de dejar en manos de los gobiernos locales una buena solución al problema planteado, ya que como bien dice el artículo al haber diferentes legislaciones al respecto, se podría evaluar cual es la salida más favorable en este conflicto que se plantea.
    En mi criterio, esto sería un medio para buscar una solución definitiva, ya que creo que lo más coherente seria tener una legislación unificada a lo largo del país, para evitar que por ejemplo de una ciudad a otra cambien las reglas y generar cierta confusión en las personas.
    Es decir, ver qué es lo que mejor funciona y luego aplicarlo a lo largo de todo el territorio argentino.
    Sería de gran utilidad tener normas que verdaderamente se apliquen sobre el tema en cuestión, ya que es realmente delicado y vemos en el día a día las dificultades y opiniones encontradas que hay respecto a los piquetes, cuando uno entiende a veces el reclamo pero no comparte que eso le impida hacer su rutina, como por ejemplo ir a trabajar.

  12. Me parece fenómeno que se discuta sobre este problema, lamentablemente tan común hoy dia, los cortes de calles parecen formar parte de lo cotidiano, la gente esta acostumbrada a esto, como a la inseguridad, como a la inflación, etc., pero mas alla de eso me parece bueno conversar este tema y la verdad en mi opinión creo que esta bien que la gente exprese sus propuestas, sus reclamos lo que me parece mal es que no respeten derechos de las demás personas, me resulta bastante egoísta e irrespetuoso. Hace poquito escuche que se esta elaborando una ley sobre piquetes en donde se distingue entre protesta legitima y protesta ilegitima, siendo la primera la avisada con 48hs de anticipación a las autoridades y en caso que esto no ocurra la protesta seria ilegitima y entonces Gendarmeria Nacional sera la que disuelva ese piquete. Hasta aca fenómeno, el punto esta en que la ley no prevé sanción alguna con lo cual no se hasta que punto va a ser efectiva. No obstante ello me parece que el Estado debería ponerse a trabajar en serio en esto por que no deja de ser un tema menor, y, como dije anteriormente, algo cotidiano hoy dia.

  13. Respecto al articulo me parece interesante la idea, siempre que se busquen maneras de solucionar estos conflictos sociales se debe tomar como algo positivo.
    En cuanto al tema de los piquetes, yo tengo una opinión que adaptada al articulo, en donde dice que las calles, rutas o demás son espacios públicos y no se esta violando el derecho de propiedad al estar cortando una calle que es mía como es del ciudadano que quiere circular con su vehículo, es que el Estado debería regular posibles soluciones al problema como una que se me ocurre a mi es poner un lugar en la plaza de mayo o algún lugar particular , en donde mediante medidas obliguen a los principales medios de comunicación que informen acerca de las protestas que se lleven a cabo en ese sitio, con el fin de satisfacer la necesidad y el derecho que tiene el ciudadano de peticionar a las autoridades y que se escuchen sus pedidos , sin afectar a otro ciudadano en otro derecho como el de libre circulación .

  14. Adhiero a la idea de descentralizar el control de los piquetes lo cual llevaría a generar y/o atribuir responsabilidades de manera mas eficiente. Asimismo, esta claro que cuanto más amplio es el campo de control de cierto organismo más obstáculos se le presentan, por eso, poner en cabeza del gobierno nacional dicha obligación, sea de la orientación política que sea, representa una queja desproporcionada ya que es visible la imposibilidad de operar un control tan específico si existen múltiples y diversas situaciones localizadas en toda la geografía de nuestro país. Es cierto que se presenta una suerte de «Tragedia de los Comunes» en este caso, sin embargo, cabe hacer ciertas distinciones dado que el espacio publico es tomado en cuenta como el ámbito donde es posible e inevitable proyectar medidas que reflejan el derecho de protesta. Por esto, supongo que debería reglamentarse el piquete aunque haciendo distinciones en relación a quienes protestan ya que, por ejemplo, un grupo carente de cualquier espacio o incluso de un empleo formal no posee la posibilidad de realizar una huelga. Si pueden detentar esta posibilidad aquellos que, en tanto trabajadores agremiados, tienen la oportunidad de recurrir a otras vías para ejercer su reclamo, como es el ministerio de trabajo o la conciliación. Por ultimo, cabe decir que el abuso del recurso piquete no debe ser un indicador de que todos los piquetes están mal dado que esa expresión surgió espontáneamente frente a la inoperancia o falta de atención de la dirigencia política en relación a demandas y necesidades insatisfechas e ignoradas por la misma.

  15. Creo que debería existir alguna regulación o control mas profundo por parte del Estado sobre este tema. Ya que de esta manera se crea la noción de que cualquiera y por cualquier causa tiene más derechos que otros para cortar una calle, en concepto de protesta. Donde el derecho de reclamo de unos y el derecho a transitar libremente de otros, se contraponen. Seria bueno que existan políticas que puedan controlar la actividad sin perjudicar y en beneficio de la sociedad en general.

  16. Partiendo de la idea de que el federalismo y la descentralización son, en cierta forma, un traslado de la competencia en el Mercado a la política, considero necesario recalcar una cuestión que considero fundamental: la competencia es algo sano.
    Cuando hablamos de competencia hacemos referencia a la emulación entre distintas personas para sobrepasarse unas a otras. Claramente que a esto no lo veo descabellado, más bien, lo considero necesario y en pos de beneficiar al consumidor en el Mercado y al votante (que también es consumidor) cuando se trate de política.
    Muchas personas tienen arraigada la idea de que al hablar de competencia lo hacemos paralelamente de pelea, combate, supervivencia únicamente del más fuerte, cuando en realidad, estas acepciones de acuerdo al contexto son adecuadas pero no así, en cuanto a la emulación de los individuos en el mercado. El productor grande no se come al pequeño e inevitablemente esto siempre va a ser así. Por el contrario, en la competencia que se establece en el mercado habrá un productor que tenga una mejor posición o una más importante, porque orientó sus conductas de manera tal que atendió de mejor manera las necesidades y preferencias de los consumidores. Pues bien, esto no significa que el resto de los productores desaparezcan, por el contrario, estos subsisten y además cuentan con nuevas oportunidades para competir.
    Pues bien, remitiéndome puntualmente al contenido del artículo, va de suyo, que lamentablemente estamos acostumbrados a ver y oír de los famosos piquetes. Un tumulto de personas que cortan una calle, muchas veces imposibilitan el paso de los transeúntes, algunos cubriendo sus rostros con un pañuelo, portando palos en sus manos, otros con banderas partidarias, algunos pregonando la defensa de un derecho que les ha sido vulnerado, otros que no encuentran otra manera de hacer oír sus justos reclamos y ante la impotencia optan por infringir un derecho que tan necesario es proteger: el derecho de propiedad.
    Tal como dice el artículo, en general los piquetes y protestas se realizan en propiedad pública, se afectan las calles y no podemos olvidarnos que la propiedad estatal es propiedad de todos y cuando el Estado que es su formal propietario no cumple adecuadamente su papel, tal situación es similar a la ausencia de propiedad. Sabemos que si nadie tiene incentivos para proteger , cuidar, restringir el consumo, por el contrario, nos vemos tentados a usar y abusar porque no existe una regulación que determine el control de uso del recurso en aras de evitar su depredación, lo que hace que estemos obrando en contra de la propia libertad individual.
    En este caso como se ve, es el propio Estado que debe establecer normas para el uso de aquellos bienes que son de su propiedad. Ahora bien, si las calles son propiedad de los gobiernos comunales por qué se discuten leyes nacionales?. O más bien, si la propiedad es compartida de que jurisdicción hablamos?.
    No podemos omitir que en la situación planteada en el artículo, están en juego dos derechos: el de la libertad de expresión y el de libre circulación y tránsito. Pues bien, también el de la propiedad. Ahora bien, no tengo dudas que un corte de calles, es perjudicial para terceros que gratuitamente se ven afectados por dicho corte e incluso ven menoscabado su derecho de su circulación y también el de propiedad. Hablar de una externalidad negativa es acertado a mi entender. Frente a esto no veo otra solución que dejar esta cuestión en manos de los gobiernos locales. Esta decisión posibilitaría evidenciar los beneficios de la descentralización, entre ellos el acercamiento a las preferencias de la gente, un mayor aprovechamiento de la información, la imposición de límites a las intenciones intervencionistas, mejoraría los incentivos de los representantes ya que sus intereses estarían más estrechamente ligados con un grupo particular de votantes, etc.

Responder a Contrera Denise Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *