Los océanos no están tan mal como pensábamos. ¿Qué implica esto para políticas ambientales?

Los temas ambientales están sujetos al dramatismo, lo cual no favorece una consideración razonada de los problemas. Se tiende a pensar en términos dramáticos: el mundo está en peligro, cerca del colapso. A partir de situaciones como esas se promueven luego políticas que tendrían un alto costo en términos de crecimiento económico, y es el crecimiento económico el que ha sacado a más gente de la pobreza. Es decir, que políticas ambientales costosas se pueden medir en términos de más o menos pobres. El tema no es menor.

De tanto en tanto, sin embargo, aparecen noticias y estudios que muestran algo diferente. Por ejemplo esta noticia respecto al estado de los mares: http://www.clarin.com/sociedad/oceanos-peces-plastico-cientificos_0_1213079165.html

Las cosas no están tan mal como se piensa: “En los océanos del mundo no hay tanto plástico como se creía y viven diez veces más peces de los que se calculaba, según comprobaron científicos de la expedición española Malaspina. El biólogo, Carlos Duarte, coordinador del proyecto, presentó hoy en Barcelona los resultados de la mayor investigación mundial sobre el estado global de los mares y sobre su biodiversidad en el siglo XXI.”

Deep ocean fish

“Los científicos, que navegaron durante siete meses en una singladura de más de 35.000 millas náuticas a bordo de dos buques, comprobaron que los contaminantes químicos se hallan extendidos por todos los rincones del océano. Pese a ello, los investigadores del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) desmintieron que exista una «isla de plástico» en medio del océano Pacífico y ahora investigan por qué hay menos plástico del que esperaban encontrar.”

Puede ser que existan bacterias que destruyen los plásticos o que haya peces en las profundidades del mar que los consuman. En fin, algo así como los cerdos, que se comen la basura y la transforman en jamón.

En las profundidades del mar, hay 10 veces la cantidad de peces que se suponía:

“La expedición, que contó con un presupuesto de casi de 7 millones de euros (unos 9 millones de dólares), descubrió también que en los océanos viven entre un 10 y un 30 por ciento más peces de los que se pensaba hasta ahora. «En profundidades donde la luz solar no llega vive una biomasa de peces hasta 10 veces mayor de lo que se pensaba», afirmó Duarte. Se trata de animales que viven a entre 400 y 700 metros de profundidad, como el pez linterna o el pez dragón, que tienen la facultad de esquivar las redes. Estudiar la composición de estos peces y de los otros microorganismos encontrados permitirá en un futuro aprender a crear vida a partir de cambios químicos sin la ayuda de la luz solar.”

En fin, por lo menos, estas noticias nos muestran que hay que ser cautos en estos temas porque es muy poco lo que se conoce. Por lo tanto, proponer drásticas políticas que tendrían un alto costo en términos de crecimiento económico es algo que debería ser considerado con sumo cuidado y prudencia, al menos.

21 pensamientos en “Los océanos no están tan mal como pensábamos. ¿Qué implica esto para políticas ambientales?

  1. Este tipo de tópico siempre es llamativo. Deberíamos comenzar preguntándonos si no es gracias a esas cantidades de actividades llevadas a cabo por políticas públicas de cada uno de los estados, las que hacen posible el uso regular de esos recursos y su decreciente contaminación.
    Recuerdo el texto de Garrett Hardin, «La tragedia de los comunes» y el texto de Paul Heyne «Eficiencia» en donde citando a Hardin, explica que a falta de precios monetarios sobre esos bienes públicos, que no tienendo rivalidad en el consumo ni siendo de caracter excluyente, solo posibilita una triste consecuencia: «la libertad de los recursos comunes resulta la ruina para todos», cada uno buscando su mejor provecho en un mundo que cree en la libertad de los recursos comunes.
    El hombre busca máximizar sus intereses (el hombre por naturaleza es un ser egoista) en perjuicio de los demás, llevando a la pobreza y desaparición del recurso.
    Considero que las políticas públicas en su justa medida, son incentivos para dejar de depravar recursos públicos que utilizados conscientemente, pueden beneficiar a todos sin perjudicar a otros.

  2. El tratamiento de los asuntos relacionados con el medio ambiente con el uso del tremendismo, la exageración y la explotación de la ignorancia generalizada en esos asuntos, se convirtió, lamentablemente, en importante recurso para que buscadores de posicionamientos políticos, de apoyos económicos, de status y holgados medios de vida o de sintonía y audiencia, puedan hacerse a ellos.

    Se adelantan opiniones y conceptos, se emiten juicios, se hacen afirmaciones y se propagan versiones sin sustento, sin estudios serios y sin análisis y ponderaciones detenidas y sin que estén libres de particulares intereses.

    Es lamentable, ya que se pueden desencadenar procesos de intervenciones y estigmatizaciones que dañan el presente de las generaciones y vulneran su futuro. El medio ambiente hay que cuidarlo desde luego, hay que proteger la calidad y la abundancia de las aguas, hay que velar por el aire limpio, hay que pensar en las oportunidades para las generaciones futuras, hay que evitar hasta donde es posible la alteración del entorno. Todo ello, dentro de la sensatez, dentro del sentido común. No hay actividad humana, animal o vegetal que no altere de algún modo el medio ambiente. Desde que nace, un ser humano empieza a generar contaminación, para vivir altera, poco o mucho, los ecosistemas; muere e igualmente contamina. Cuánto de lo que se llama contaminación es realmente parte del ciclo normal de la vida?

    Hecho claro es que es mucho más lo que desconocemos de nuestro planeta que lo que hemos logrado comprender del mismo. El cambio climático ha sido una constante de este planeta al que tantos conciben como un ser vivo. Ha habido enfriamientos que han llevado a grandes, medianas, pequeñas y micro glaciaciones, seguidas de otros procesos de mayor o menor calentamiento que han producido climas más benignos y propicios para la vida. Los estudios geológicos han puesto en evidencia ciclos regulares o no del clima a lo largo de millones de años.

  3. También en materia ambiental hace poco salió esta noticia: http://tn.com.ar/internacional/el-agujero-de-ozono-se-estabiliza-en-un-area-del-tamano-de-america-del-norte_540917
    «El agujero de ozono antártico alcanzó su tamaño máximo anual el 11 de septiembre: 24,1 millones de kilómetros cuadrados, un área similar al tamaño de América del Norte. »
    «Esta dimensión del agujero de la capa de ozono no es alarmante, ya que es comparable al de los dos años anteriores y más pequeño que los grandes agujeros del período crítico de 1998 al 2006. El agujero de ozono de un solo día más grande jamás registrado por satélite fue de 29,9 millones kilómetros cuadrados -un área similar a África- en septiembre de 2000.»
    «La capa de ozono ayuda al blindaje de la vida en el planeta contra la radiación ultravioleta potencialmente dañina, que puede causar cáncer de piel. El acuerdo del Protocolo de Montreal reguló a partir de 1987 sustancias que agotan el ozono, como los clorofluorocarbonos que contienen cloro y los halones que contienen bromo. El nivel de estas sustancias sobre la Antártida disminuyó un 2014 alrededor de un 9% por debajo del máximo registro en 2000.»
    Aquí también vemos una mejora, pero ésta es en gran parte debido a la disminución de los niveles de emisión de cloro, que causa su destrucción. Y esto es gracias a la regulación estatal e internacional, gracias a «políticas económicas». Como decía Tyler Cowen en «Bienes Públicos y Externalidades», luego de encontrar con los derechos de propiedad bien definidos una solución a varios problemas de los bienes públicos en otras áreas medioambientales, como el uso de la tierra y la conservación de las especies, o los lagos polucionados, reconoce que «los derechos de propiedad son sin embargo una solución menos efectiva a los problemas medioambientales relativos al aire, puesto que los derechos sobre el aire no pueden definirse ni protegerse con facilidad. Resulta difícil imaginar, por ejemplo, como únicamente los mecanismos del mercado pueden impedir la disminución de la capa de ozono de la Tierra. En tales casos, los economistas reconocen la probable necesidad de una solución reguladora o gubernamental.»
    Y coincidentemente con esto plantea Garrett Hardin en «La tragedia de los comunes»: «»EL tamaño altera las propiedades de un sistema, los ingenieros hablan de un efecto de escala. Un efecto de escala, basado en la psicología humana, limita la funcionalidad de los sistemas comunísticos. Incluso cunado se comprenden las limitaciones de los comunes, hay áreas en las cuales la reforma es difícil. Nadie es propietario de la atmósfera de la Tierra. En consecuencia, ésta es tratada como un basurero común en el cual todo el mundo puede descargar sus desechos. Entre las consecuencias no deseadas de este comportamiento están la lluvia ácida, el efecto invernadero, y la erosión de la capa protectora de ozono de la Tierra. Las industrias e incluso las naciones consideran el limpiar las descargas industriales como algo prohibitivamente caro. Los océanos también son tratados como un basurero común. Sin embargo, seguir defendiendo la libertad de polucionar conducirá finalmente a la ruina para todos. Las naciones apenas están empezando a desarrollar controles para limitar este daño».
    Pero con las medidas que se fueron tomando para disminuir las emisiones nocivas, se empiezan a ver lentamente los cambios en el agujero de la capa de ozono. Quizás en el Océano con otro tipo de regulaciones, también. Porque por suerte el ecosistema va biodegradando la basura (dicho así genéricamente), el tema es no sobrepasar los límites. Resultaría prohibitivamente caro «limpiar» todo el planeta, pero no resulta tan costoso (en comparación), el limitar las emisiones y desechos tóxicos, para que el planeta a través de los años vaya limpiando solo todo lo que se emitió en las últimas décadas.
    Igualmente, quien sabe, si en un futuro incluso estos bienes que son considerados bienes públicos («por excelencia», podría decirse), no pueda anexarse a un bien privado. Ha pasado con el ejemplo del faro, que es (o era) uno de los ejemplos más famosos que dan los economistas de bienes públicos que no pueden ser proporcionados privadamente. Como dice Tyler Cowen: «Los economistas han argumentado que si los propietarios de un faro privado intentaran cobrar a los propietarios de los barcos los servicios de su faro, de ello se derivaría un problema de usuario gratuito. Sin embargo, los faros a lo largo de la costa de Inglaterra en el siglo XIX eran de propiedad privada. Los propietarios de los faros se dieron cuenta de que no podían cobrar sus servicios a los propietarios de los barcos. Así que no intentaron hacerlo. En vez de ello, vendían sus servicios a los propietarios y comerciantes del puerto más cercano. Los comerciantes del puerto que no pagaban a los propietarios del faro para que encendieran las luces por la noche tenían problemas en atraer los barcos a su puerto. Tal como estaban planteadas las cosas, resulta que uno de los ejemplos más comúnmente utilizados por los instructores de economía de un bien público que no puede ser proporcionado privadamente no es en absoluto un buen ejemplo.» «Otros problemas con los bienes públicos pueden resolverse definiendo los derechos de propiedad individual en el recurso económico apropiado. Limpiar un lago polucionado, por ejemplo, implica un problema de usuario gratuito si nadie es propietario del lago. Los beneficios de un lago limpio son disfrutados por mucha gente, y a nadie pueden cobrarse estos beneficios. Una vez existe un propietario, sin embargo, esa persona puede cobrar precios más altos a pescadores, boteros, usuarios de instalaciones recreativas y otros que se benefician del lago. Las masas de agua de propiedad privada son comunes en las Islas Británicas, donde, y no es sorprendente, los propietarios de los lagos mantienen su calidad.» «UNos derechos de propiedad bien definidos pueden resolver los problemas de los bienes públicos en otras áreas medioambientales, como el uso de la tierra y la conservación de las especies».

    Quizás dentro de muchos años, otro economista escriba un paper, describiendo cómo se solucionó la polución en el aire y en los océanos, gracias a los derechos de propiedad bien definidos. Todavía no se nos ocurre cómo. Pero es cuestión de que haya empresarios que tengan una idea original y saquen provecho de ello. ¿Acaso la basura no recobró valor con la industria del reciclado? Los recicladores persiguiendo su propio interés, comprando residuos mucho más barato que lo que les saldría la materia prima, al mismo tiempo tienden a beneficiar a la comunidad disminuyendo la cantidad que va a parar en basureros.

  4. Hay decenas de estudios que demuestran la contaminacion de los mares y oceanos, basarse en este estudio, y seguir la linea de que los mares no estan tan mal como se creia o de que no existe tal cosa como el sexto continente de basura, da pie a «sigamos contaminando al menos hasta llegar donde se pensaba que estamos». Quiza es un pensamiento extremo, pero si no hay alarmas, si no hay limites y restricciones. Si cada estado hace la vista gorda a la espera que otro estado se ocupe de tomar medidas.. es a corto plazo que tendremos consecuecias graves. A modo de ejemplo. Si una pensona cree que tirar un papel en la calle no daña el ecocistema porque es un simple envoltorio de caramelo, si los 40 millones de habitantes del pais, pensaran igual todos los dias habrian 40 millones de papelitos nuevos en la calle.
    Contamos con mucha informacion dispersa, las incertidumbres son mayores y los costos aun mayores porque se necesita mas informacion y mas conocimiento al respecto. Un mandato global, una istitucion mundial, tratados internacionales que sean universales y obligatorios sin requerir de la ratificacion de los estados. Que se ocupe del control, en este caso de los mares. Porque o todos nos perjudicamos o todos nos beneficiamos.
    Intentar salir de ideologias porque impide la diversidad de miradas, de opticas. No hay una unica solucion. Es indispensable la colaboracion y solidaridad mundial.
    Optar por esas politicas tiene un alto costo en cuanto al crecimiento economico? Si. En lo inmediato. Pero cuando se trata de cuidar el planeta creo yo que no es un error usar esas medidas
    despues que cada estado se haga cargo de su crecimiento y desarrollo.

  5. Hay varios puntos que me llamaron la atención sobre este tema:
    1) Si bien el Centro Superior de Investigaciones Científicas es una reconocida institución (de las 3°ras mejores de Europa) la investigación realizada es solo una de varias que dicen lo contrario.
    2) Desmentir algo solo por el hecho de no encontrarlo no implica que no exista.
    3) El medio ambiente es un derecho de todos, un patrimonio de la humanidad, y consentir su deterioro es inconcebible, mucho mas aun cuando la polución es generada para el beneficio económico de unos pocos (a quienes podríamos denominar free raiders, ya que se benefician a costa del perjuicio de otros).
    4) Concuerdo con el comentario anterior, el cual expone que «…seguir la linea de que los mares no están tan mal como se creía… da pie a “sigamos contaminando al menos hasta llegar donde se pensaba que estamos”.
    Es decir, el hecho de que un problema que un problema, como la contaminación, no tenga la magnitud que se creia eso no implica que hay que mantener un mismo ritmo de contaminacion jugando con el limite de alcanzar un punto critico. Poluir el medio ambiente es algo que no debe hacerse, ni en menor ni en mayor medida.
    5) Somos conscientes de que la contaminacion necesariamente genera un mal a la flora y fauna marina, pero el hecho de que se haya comprobado que en las profundidades habitan mas peces de lo pensado no implica que no pudieran haber existido mas. En otras palabras, si con la contaminacion actual existe un nivel mayor al pensado de peces, reduciendo la contaminación podría obtenerse un numero mayor aun.
    6) El estudio hecho mide la fauna marina hasta una determinada profundidad, por lo que no podemos determinar si a una mayor profundidad los desechos no están causando estragos en otras especies aun no descubiertas por el hombre.
    Por estas razón considero que el Estado debería profundizar aun mas sus políticas respecto al medio ambiente, porque pareciera que lo único que se espera es que una consecuencia extrema de la contaminación se haga presente para que se tome consciencia de lo malo que es contaminar.
    Por otro lado, desde un punto de vista mas económico, podría afirmarse que la falta de cuidado del ambiente puede generar la destrucción de algunos recursos (flora, fauna, minerales, etc.) que no conocemos, o que conocemos, sin ser conscientes de su potencial.
    La contaminación es tiempo que se le quita a la tierra, y por ende a la humanidad, por lo que otra afirmación que puede hacerse es que es preferible acumular menos riqueza en un plazo prolongado, que acumular mas riqueza en un plazo inferior de tiempo.

  6. Creo que no cabe duda con respecto del grado de contaminación que tienen los océanos, como los suelos y el aire. Todo esto que analizamos si es tan así, lo vemos plasmado en el calentamiento global, que a veces no le prestamos mucha atención porque pensamos que es algo que no nos toca de cerca, recién cuando tenemos que tolerar sus consecuencias como el aumento de lluvias torrenciales estilo tropical en zonas que no están acostumbradas, y esto conlleva a las inundaciones, ahí empezamos a pensar en el calentamiento global y como verdaderamente nos afecta.
    Cada año se arrojan a los océanos grandes cantidades de desechos y contaminantes, muchos de ellos ni siquiera existían hace algunos años.
    Aunque cambian constantemente las cifras a través de los años (y más como avanza las sociedades) creo que es interesante mencionar el informe Stern de octubre de 2006, sobre la economía del cambio climático. El informe realiza un estudio sobre sus consecuencias en la vida humana, el medio ambiente, la economía mundial; el impacto económico del cambio climático y el uso de los modelos económicos de transición a modelos energéticos bajos en consumo de carbono; además de comparaciones estadísticas entre los costes actuales y futuros del consumo de carbono. Sus principales conclusiones afirman que “se necesita una inversión equivalente al 1% del PIB mundial para mitigar los efectos del cambio climático y que de no hacerse dicha inversión el mundo se expondría a una recesión que podría alcanzar el 20% del PIB global”.
    El informe también sugiera la imposición de ecotasas para minimizar los desequilibrios socioeconómicos, afirmando que:
    “Nuestras acciones en las décadas inmediatamente venideras pueden implicar el riesgo de una disrupción de la actividad económica y social durante el resto de este siglo y el siguiente, de una escala parecida a la de las grandes guerras y la Gran Depresión.”

    Cabe mencionar un estudio mas reciente acerca de la contaminación de los océanos (informe del 2014). Un estudio del Instituto Oceanográfico Woods Hole de Massachussets, referido especialmente al aumento en los niveles de mercurio presentes en los océanos, derivados del consumo de combustibles fósiles y la minería de oro. Al leerlo, lo mas importante como para mencionarlo aquí, fue como el mercurio penetra en la cadena alimenticia marina y llega hasta nosotros, como por ejemplo con el consumo de estos alimentos contaminados, que acrecienta el riesgo de trastornos de diversa índole.

  7. En mi opinión, estimo que sería necesario empezar haciéndose la siguiente pregunta ¿cómo aseguramos que los recursos serán utilizados en forma tal que nos ayuden a garantizar que las necesidades de esta generación serán atendidas de forma que aún queden suficientes recursos para que las generaciones futuras?

    A partir de esto, nos encontramos con un Estado que se ve enfrentado a demandas contrapuestas: de la fábrica cuyos dueños pretende eliminar así los desechos de su proceso de producción, de los habitantes pobres que viven en sus orillas y arrojan allí toda su basura, de la misma empresa estatal de cloacas que también arroja allí cualquier vertido o de los que quieren pescar peces no contaminados. Se trata de demandas contrapuestas, que muchas veces paralizan a una burocracia lenta e ineficiente, donde se presentan problemas por la presencia de distintas jurisdicciones, donde se trata de eludir las responsabilidades.

    Ya con esta situación comienzan los problemas burocráticos que no permiten dilucidar cuál el el verdadero tema ha atender. Por ejemplo, a partir de lo dicho por el artículo, nos encontramos con la cuestión de que la contaminación de los océanos no tiene la magnitud que se creía y por lo que las políticas por parte de las autoridades que deberían regular el problemas deberían ser menores y evitar el despilfarro de dinero en ello, dado que con ello los principales afectados serían quienes menos tienen.

  8. En mi opinión, en esta noticia hay mucha tela para cortar. En primer lugar, no podría tomar posición del tema respecto a una noticia existiendo otros estudios que avalan lo contrario. Otros podrían opinar tranquilamente que la «magnitud» de esta buena noticia se debe a la implementación de las medidas ambientales (que en su gran parte) ayudan a evitar que el hombre pueda obrar con total impunidad. Aplicando lo visto en clase, me resulta inevitable no relacionarlo con el texto de «la tragedia de los comunes»; respecto a que la «no regulación» de políticas ambientales podría acaecer en una «depredación» excesiva de recursosy/o contaminación de los mismos.
    Por otro lado, si bien es cierto que algunas de estas regulaciones tienen un alto costo y hay una tendencia a «dramatizar» la cuestión, en materia de medio ambiente son necesarios algunos de estos «ingredientes». Es decir, la gran mayoría de los atentados que el hombre realiza contra la naturaleza son de carácter irreversible; no hace falta ser un experto para observar los fenómenos climáticos que se suceden consecutivamente y nos afectan a todos. Habría que colocar en la balanza «medio ambiente» y «desarrollo económico» y ver que variable es más importante.

  9. Es muy cierto que desde antaño y hasta la actualidad han sido varias las voces que se levantaron en pos de criticar y objetar la explotación de ciertos recursos, en muchos casos no renovables, tratando de concientizar sobre lo nocivo que podría resultar la maximización de esta explotación en el tiempo como también en el espacio territorial. Comparto con el profesor que desde hace ya tiempo varios estudios han demostrado que por ejemplo, el petróleo, lejos de agotarse, cada día se demuestra que hay mas cantidad debido al descubrimiento de muchas nuevas zonas explotables y de muchas mas cuencas petrolíferas a lo largo y ancho del mundo, como la cuenta del amazonas o mismo en Estado Unidos (que, según las noticias, se estima que en el mediano/corto plazo no necesitará importar este recurso por la técnica conocida como «Fracking»), y esto mucho tiene que ver con lo planteado por Adam Smith en su teoría de la mano invisible respecto a las barreras que tiene el mercado para poder llegar al punto de equilibro, y en este caso en particular, nos referimos a la tecnología, puesto que se han desarrollado nuevas técnicas de extracción del petroleo que en la década del ’50 no habían sido descubiertas. Además, desde que se ha acuñado el término «calentamiento global» para explicar los efectos que la contaminación y la explotación indiscriminado de los recursos han generado en el medio ambiente, también se genero otra corriente de pensamiento científico-ambiental que han tratado de explicar que este fenómeno del calentamiento global se viene desarrollando desde antes que el hombre inicie el proceso de explotación a nivel mundial (de hecho, se dice que es anterior a la existencia del hombre) y que es producto de la misma naturaleza.
    Ahora bien, luego de explicar lo anterior, el gran problema que creo que se suscita esta emparentado con la naturaleza antropológica del hombre, es decir, con el interrogante sobre si el hombre es bueno o malo desde su existencia. Si bien esto que planteo esta mas ligado a la filosofía o a la antropología, entiendo que se relaciona ya que, si bien da cierta tranquilidad saber que todavía se está a tiempo de solucionar algunos problemas, ¿que nos hace pensar que eso va a cambiar? si la realidad nos indica que, pese a que se vislumbraba el peor de los futuros hasta hace unos años, ningún Estado se ha tomado realmente en serio las problemáticas que se han venido planteando y no solo eso, sino que muchos de los conflictos y guerras que vienen desarrollando desde la antigüedad tienen que ver con esto, con la posibilidad de explotar cada vez mas recursos y ser cada vez mas competitivos (o corruptos, en el caso de los gobiernos y funcionarios que no tienen ni el interés ni el estímulo para gobernar en pos de sus ciudadanos).
    Intentando ver el tema desde un punto de vista económico, considero que es cierto que no se deben llevar a cabo obras faraónicas en aras de favorecer al medio ambiente sin antes hacer estudios exhaustivos que justifiquen dicha inversión de dinero, que podría ser utilizado en otras cosas y que hoy en día es posible gracias a la tecnología disponible. Pero por otro lado, no podemos dejar de tener en cuenta lo dicho por la compañera Laila Masacaso respecto a la eficiencia como se plasma en el cuento de la tragedia de los comunes, puesto que si dejamos de tener en cuenta la posibilidad de efectos realmente nocivos por la explotación de recursos, podríamos estar en un verdadero problema. Considero que aquí es donde podemos encontrar el verdadero significado del precio de las cosas y el valor (con la teoría de la utilidad marginal decreciente) como forma de comunicación y de brindar información, puesto que a través de este mecanismo se puede indicar si es beneficioso adquirir algún producto/recurso o por el contrario, se deben buscar variantes para satisfacer las necesidades. Es decir, es necesario seguir recurriendo a la tecnología e innovación para saber la real dimensión del problema ambiental mundial, y poder conocer nuevas formas de explotación sustentables para evitar todo tipo de catástrofes, tanto ambientales, como bélicas y socio-políticas.

  10. siempre se debe pensar antes de tomar determinaciones drasticas en el ambito politico, hacer estudios profundos y certeros.
    el tema ambiental es delicado porque ademas solo se toman decisiones ante situaciones extremas y si los oceanos no estan tan mal, es seguro que no se tomaran decisiones
    pero si se tocan situaciones dificiles como la pobreza o la vida de la poblacion habria que considerar todas las variables posibles, y si bien el recurso oceanico es importante porque es una fuente de alimentos y energia, las personas podrian disgustarse

  11. El desarrollo de políticas ambientales surgen entonces con la base de la desesperación y el dramatismo, que con la base de estadísticas y datos reales sobre la situación. Esto es muy comparable a la información asimétrica de los mercados (aunque en este caso estaríamos ante una falta de información efectiva directamente). El no saber como actuar según estadísticas concretas y reales provoca que se tomen medidas que tal vez perjudiquen el desarrollo y crecimiento económico. Los incentivos que lleva a cabo el Estado para que los comercios por ejemplo den información en base a los productos que venden para compensar el problema de la información, sería comparable a los incentivos que debería llevar a cabo el Estado para que diferentes grupos científicos tal vez de diferentes universidades o laboratorios lleven a cabo las investigaciones pertinentes para conocer el verdadero estado de los mares y océanos.
    Estas clases de incentivos para la ciencia podría aplicarse para todo tipo de enigmas científicos de toda naturaleza, ya que hoy vivimos una vida constante en base a pilares que creemos sólidos, pero que tal vez no tenemos la suficiente información sobre el tema como creemos tener, y de la misma manera que tal vez se perjudique el crecimiento económico aumentando la pobreza en cuestiones ambientales, también podríamos afectar dicho crecimiento de alguna manera que todavía no conocemos a ciencia cierta.
    En definitiva, incentivar a la información en estos casos contemplados sería entonces igual a incentivarse a uno mismo para conseguir un progreso y desarrollo económico.

  12. Leer el titular “Los océanos no están tan mal como pensábamos. ¿Qué implica esto para políticas ambientales?” me resultó tan inusual como atractivo. Tal cual lo aclara el autor al comenzar el artículo, todo aquello relativo al estado actual del medioambiente está dotado de una cuota de peligro, de dramatismo, como si el colapso del mundo estuviera cerca. Casualmente un artículo emitido por el Diario Clarín (http://www.clarin.com/buena-vida/vida-eco/zoologicos-conservacion-biodiversidad_0_1100290164.html) postulaba la siguiente realidad “Una de las preocupaciones más extendidas en todo el mundo científico y conservacionista es la progresiva pérdida de áreas naturales y especies tanto de flora como de fauna.”. Al respecto, cabe aclarar que en la actualidad, este es el panorama que generalmente conocemos a través de los medios de comunicación y es la razón por la cual nos sorprendemos al leer una afirmación que versa sobre el estado actual de los mares, argumentando que “la salud del océano no es tan mala como los ciudadanos puedan pensar”.

    Ahora bien, envueltos en esta dinámica de culpa y responsabilidad por los daños al medioambiente, los gobiernos desarrollan e implementan políticas públicas con el fin de desincentivar las prácticas o los factores que provocan dichos daños. Las políticas públicas conllevan, además de un alto costo en el crecimiento económico de un país, un alto costo político ya que la sociedad desaprueba cada vez más los comportamientos llevados a cabo sin contemplar el cuidado al medioambiente. Los medios de comunicación y la respectiva era de telecomunicaciones contribuyen a que crezca la concientización sobre el cuidado del medioambiente, por lo que la sociedad se verá cautivada por aquellos partidos políticos y/o gobiernos que postulen prácticas “eco-friendly”. En consecuencia, teniendo en cuenta el panorama en el que se encuentra nuestro medioambiente y el hecho de que a los políticos les interesa perpetrarse en el poder, sin importar los altos costos que deban afrontar los futuros gobiernos, prefieren desarrollar políticas ambientales drásticas y costosas. Por otro lado, si tomamos en consideración el título del artículo de hoy, entiendo que las políticas ambientales se verían desmotivadas, ya que no habría razón para que los gobiernos inviertan en su implementación. Al notar esta diferencia de criterios, vuelvo a hacer hincapié no solo en la importancia de la opinión pública en el accionar de los gobiernos y en las plataformas de los partidos políticos, sino en la radical influencia de los medios de comunicación que aprovechándose de la ignorancia generalizada del público, crean el escenario de caos a piacere.

    Por otro lado, cabe preguntarse cuál es el fin perseguido por los políticos al implementar políticas ambientales: acaso es lograr el efectivo cuidado del medioambiente o responder a los estímulos propios de la política, conseguir votos, estar en el poder depositando los costos en los futuros gobiernos. La triste realidad es que siempre hay un interés político por detrás, bastante relacionado con la segunda hipótesis. Un claro ejemplo de esto fue mencionado por Ricardo A. Gutiérrez y Fernando Isuani en su artículo “Luces y sombras de la política ambiental argentina entre 1983 y 2013” (Revista SAAP vol.7 no.2 Ciudad Autónoma de Buenos Aires nov. 2013) (http://www.scielo.org.ar/scielo.php?pid=S1853-19702013000200010&script=sci_arttext) en donde se detalla que la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente Humano (SRNAH), creada por el presidente Carlos Menem, “respondía a la decisión presidencial de dar respuesta a estímulos internacionales… El gobierno de Menem buscaba adaptarse a un nuevo paradigma ideológico y normativo internacional centrado en el concepto de desarrollo sostenible. Todo ello puede ser interpretado como un capítulo más del esfuerzo del entonces presidente por ajustarse a la agenda de los organismos internacionales. En cualquier caso, es claro que en esos años la política ambiental respondía a la expectativa de obtener préstamos multilaterales y fondos de cooperación internacional sujetos a la adopción del nuevo paradigma.”. No obstante, dichos autores también hacen alusión a otro caso en el que la agenda política determina el lugar que la cuestión ambiental y las políticas correspondientes debían tomar. Es el caso del ex presidente Néstor Kirchner, quien en un primer momento no pretendía avocarle gran importancia a la política ambiental. “Eso cambió en 2006 cuando la cuestión cobró repentino interés a raíz del conflicto por la construcción de pasteras en el río Uruguay. En respuesta a ese conflicto, Kirchner reemplazó al entonces secretario ambiental (Atilio Savino) por Romina Picolotti, una abogada que presidía la ONG Centro de Estudios de Derechos Humanos y Ambiente (Cedha) y que asesoraba al gobierno de la provincia de Entre Ríos y a la propia Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú en torno al conflicto de las pasteras. Además, Kirchner colocó la secretaría bajo dependencia directa de la Jefatura de Gabinete de Ministros. De ese modo, la secretaría recuperaba el rango de ministerio que había tenido bajo el gobierno de Menem. Los fondos presupuestarios de la secretaría se multiplicaron ampliamente y la agenda de programas nacionales alcanzó mayor diversificación y visibilidad.”. De esta forma, Kirchner conseguiría capitalizar la alta repercusión del conflicto de nivel regional.

    De los ejemplos provistos y a modo de conclusión, noto que atrás de toda política de tinte ambientalista efectivamente existe no solo un escenario caótico del medioambiente, perfilado por los medios de comunicación, sino un interés político al que se apunta a fin de cautivar votos, es decir, una sociedad racionalmente ignorante.

  13. Particularmente soy de los que son escépticos a las teorías del calentamiento global poniendo al ser humano como principal participe de los «desastres» que ha provocado sobre la tierra afectando radicalmente los climas, etc.
    Considero que en realidad todos los cambios climáticos que notamos pasan básicamente por dos situaciones: la primera es que las estadísticas sobre sucesos metereologicos son relativamente nuevas, la mayoria de los datos que contamos no son de mas de 200 años, lo que hace pensar que en la actualidad la industrialización es la que culpable de todos los desastres climaticos, como huracanes, grandes inundanciones, etc, sin siquiera saber que ocurria hace 500 años. La segunda es que existen muchisimos mas lugares habitados en donde puede recaer determinada tragedia, incluso lugares que a priori se saben que son riesgosos (como la ribera de un rio) , seguramente hace 1000 años, las ciudades eran mucho mas pequeñas y menos complejas con menores posibilidades de destrucciones por tormentas u otros.
    En conclusion si hoy existiera una tragedia como la que vivieron los dinosaurios hace millones de años, todos le atribuirian la culpa a la humanidad por no cuidar del planeta, pero la realidad que las causas por la que ocurre el calentamiento, grandes tormentas, etc, no se puede atribuir a ningun hecho en concreto y ni siquiera esta comprobado de que lo haga el humano en la tierra, afecte de verdad el medio ambiente. El solo hecho de que el principal gas que deteriora la capa de ozono, sea el metano, emitido por las vacas (y no por empresas petroleras) hace dudar hasta que punto el humano es siempre el culpable.
    Dicho esto , yendo a un punto de vista mas economico, el asunto de la contaminacion a grandes escalas (es decir contaminacion de oceanos por plastico, el deterioramiento de la capa de ozono) y no la pequeña contaminacion que puede afectar directamente a un vecino (una empresa que le tire gases contaminantes directamente a su propiedad) es dificil de determinar si son una externalidad negativa o no.
    Alli radica el quid de la cuestion, si consideramos que la fabricacion de plastico que luego termina en el oceano de alguna forma es una externalidad negativa para todos quizas sea viable tomar alguna medida publica o utilizar algun mecanismo para desincentivarla. Pero la realidad demuestra que la mayoria de las veces no esta comprobado fehacientemente que sean determinadas actividades contaminantes y «por las dudas» se adopta recursos del estado publico para combartirlas o se aplican grandes impuestos o multas a la actividad, generando en definitiva una deficiente asignacion de recursos por una presunta externalidad negativa no comprobada.
    Ahora bien, si efectivamente se comprueba que hay una externalidad negativa de cierta actividad, hasta que punto me es conveniente contribuir y que otros paises sean free riders, como el caso de China o EEUU, que son los paises mas contaminantes en la actualidad, pero que curiosamente son los que no han ratificado convenios internacionales como el Protocolo de Kiotto.
    Sin dudas los Estados, deberian ser sumamente cuidados a la hora de afrontar una seria politica ecologica, que puede generar altos costos y en definitiva afectar a todos sus pobladores, asignando erroneamente el dinero de sus impuestos. En realidad el problema radica en que justamente los politicos tiene distintos incentivos que el bien comun y financiar una politica pro-ecologica es inexorablemente algo que encanta a los ciudadanos y genera votos, a pesar de tal vez no servir para nada lo que se esta haciendo.

  14. Que el medio ambiente no este tan mal como pensabamos es algo que claramente puede afectar la economia a nivel global. Sin embargo creo que una de las palabras mas acertadas del texto es cuando habla de la necesidad de ser cautos. A pesar de lo que muestra el estudio no se debe automaticamente suspender las politicas ambientales ya que dicha reduccion de los problemas ambientales puede ser un efecto de la implementacion de las mismas.
    La pregunta que debemos hacernos y que se relaciona con la cautela es ¿cómo deben hacer los Estados para maximizar la eficiencia de ese gasto y no tener que derrochar recursos que terminan siendo ineficientes?
    La suspension de las politicas ambientales tambien puede llevar a que se produzca la ya vista Tragedia de los Comunes, depredandose asi los recursos naturales ya que existirian menos impedimentos.
    Por lo tanto, creo que es fundamental para la economia que las politicas ambientales sigan su curso pero, como dije anteriormente, el gasto que se efectue debe ser eficiente para asi no desperdiciar recursos. Recordemos tambien que un medio ambiente sano tiene un efecto colateral como lo es la preservacion del planeta para las generaciones futuras, las cuales de ninguna manera deben ser dejadas de lado.

  15. La contaminación es un problema tanto de los países en desarrollo como de los países desarrollados.
    El agua tiene una importancia fundamental en el desarrollo de nuestras actividades. Es un recurso importantísimo que no siempre se cuida.
    Vemos cada tanto en los noticieros los derrames de petróleo en océanos y nos alarmamos. Sin embargo, eso es lo que se puede mostrar. Pero los vertidos que realizan las fábricas, la contaminación sonora, el calentamiento global, etc. Son también causas y sus efectos no desaparecen de forma inmediata, se requieren muchos años para la recuperación de los ecosistemas.
    La contaminación de mares y océanos se debe al incremento de la población, la creciente demanda de bienes materiales por parte de la “sociedad de consumo”, el carácter limitado de los recursos naturales renovables y el egoísmo del hombre depredando los recursos.
    El crecimiento económico se ve como sinónimo de bienestar y progreso pero se debe pensar en dónde se realiza ese crecimiento y ese escenario es nuestro planeta. El modo de vida actual se basa en la competitividad y el consumo, esto lleva a generar residuos derivados de los bienes de consumo y los procesos de producción explotan el medio ambiente. Crecimiento, competitividad y consumo, tres actividades que hipotecan el bienestar de generaciones futuras.
    Las externalidades como en este caso la contaminación aparecen por la ausencia de derechos de propiedad. Tener un nivel de contaminación cero sería poco real, ya que para ello tendríamos que anular bienes y servicios necesarios. Lo que tendríamos que lograr es el nivel óptimo de contaminación.
    Muchas leyes nacionales y protocolos internacionales prohíben en la actualidad el vertido de sustancias nocivas en los océanos. Asimismo, se están llevando a cabo iniciativas aisladas que han logrado también cierto éxito. Si se han tomado estas medidas es porque en algún momento se difundieron datos alarmantes sobre la contaminación. Creo que la exageración de información ha dado conciencia del problema, de sus causas y de sus consecuencias. En este caso el fin justifica los medios.

  16. ¿Realmente los océanos están tan mal como pensábamos? ¿O podrían estar peor y por eso “nos conformamos” con que no estén en tan malas condiciones como creíamos.
    Desde mi perspectiva las cosas SÌ están mal, y que no lo estén en la medida en que se creía que estaban no quiere decir que estén bien. Sea cual fuere la medida de la contaminación esto es alarmante y en mayor o menor tiempo veremos los resultados de “las cosa que están mal pero no tanto”.
    Pues bien, si estos científicos a los cuales se hace referencia en el articulo afirman que los océanos del mundo no hay tanto plástico como se creía hasta entonces, ¿acaso es descabellado creer que indirectamente lo que están afirmando es que podría haber menos plástico del que hay?.
    Si viven diez veces mas peces de lo que se calculaba, ¿por que no podrían vivir veinte veces mas peces en vez de diez? ¿Será porque acaso las cosas si están mal y lo que se ve es menos de lo que ocurre en la realidad?.
    Según el estudio no existe la “isla de plástico” en el océano, pero lo que justamente no existe es la isla, lo que no quiere decir que no existan plásticos dispersos en el.
    Si lo que se conoce muy poco de cualquier forma lo que observamos a simple vista ya es suficiente para saber que cuando hablamos de contaminación no podemos “desdramatizar” la cuestión, ya que la cuestión es el medioambiente, un medioambiente que es derecho de todos y si los que se perjudican son algunos pocos en realidad los que nos perjudicamos somos todos. No podemos alardear con “tranquilos muchachos, no alcanzamos el nivel de contaminación, pero no importa, podríamos estar peor”. El fundamento de esta afirmación lo encuentro en una analogía con una fabula infantil, la liebre y la tortuga: a la primera se le escapo la tortuga, y esta llegó a su meta. Claramente la liebre la subestimo, en capacidad, en talento, en rapidez, etc. Pero increíblemente la tortuga gano.
    Con la naturaleza ocurre lo mismo, si no se implementan políticas ambientales a nivel internacional, nacional, provincial y municipal para evitar la depredación y/o contaminación de los recursos lamentablemente ella se va a transformar en la tortuga de la fabula.

  17. Considero que uno de los motivos por los cuales hoy los mares no estan en tal malas condiciones como se había previsto tiene que ver con el hecho de que se han tomado medias efectivas para protegerlo, no creo que simplemente haya sucedido porque si. Existe una mayor conciencia de que debemos proteger nuestro ambiente para poder continuar viviendo en este planeta. Es posible que ciertos sectortes aprovechen esta situación pero en todo caso resultará necesario elaborar medidas para detectar esta situación, pero la consecuancia en ningún caso según lo que opino debería ser parar con las medidas de protección, desde que si haríamos eso lo que generariamos sería perder todos los beneficios obtenidos hasta hoy.
    El objetivo de los Estados y el mercado debe ser desarrollar mecanismo e instituciones que busquen un equilibrio entre desarrollo y protección del medio ambiente, ya que uno sin el otro terminará perjudicando la posibilidad de existencia efectiva de cualquiera de los dos. Sin progreso no se tendrá acceso al dinero necesario para llevar a cabo la protección al medio ambiente. Y sin proteger al medio ambiente existirán recursos indispensables para el hombre que no podrá utilizar y de los cuales no sólo necesita para producir sino esencialmente para sobrevivir, y el agua es uno de los principales.
    En definitiva ninguna medida drástica es positiva.

  18. No tengo dudas de que sigue habiendo gran contaminación marítima a lo largo de todo el mundo, pero creo que la sociedad está tomando más conciencia sobre el tema, y puede que sea un factor para que aquella disminuya.
    Sin embargo, y en base a la noticia, se encontraron más especies de lo que pensaban. Seguramente estos sean un recurso a utilizar (ya que antes no se sabía de su existencia). Entonces, ¿cómo hacer para que los hombres no los depreden de forma masiva? Creo que será un problema que deberá resolverse, y para ello se puede invocar la «Tragedia de los comunes», en donde se menciona que si un recurso es propiedad de alguien, no se saquean, sino que se consumen con cautela.
    Otra cuestión que podría suceder, es que los Estados apliquen políticas públicas a largo plazo para que estas especies sigan viviendo, pero al mismo tiempo, las sociedades puedan utilizarlas como recursos.
    Y por último, es evidente que se han utilizado otras políticas para tratar de que los océanos no estén tan contaminados como se creía.

  19. Hemos estudiado que los problemas ambientales son generalmente (aunque siempre puede haber excepciones) resultado de externalidades negativas. Y al ser un mal público, para resolverlo se necesitaría un bien público que debería estar a cargo del Estado. Pero ya vimos que no solo el mercado falla, sino que también el Estado lo hace, lo cual nos hace pensar en la dificultad que conlleva poder solucionar estos problemas. Para combatir todo esto creo que lo mas acertado sería la existencia de un marco institucional de normas que incentive la utilización racional de estos recursos.
    Que los océanos no estén tan mal como pensábamos es algo bastante alentador. Solemos ser bastante negativos y pesimistas en cuanto al tema de los problemas ambientales, por ejemplo respecto al cambio climático. Generalmente consideramos que estos son fenómenos de los que somos responsables todos los seres humanos y que son imposibles de revertir.Y esto generalmente termina llevando a que los Gobiernos persigan políticas que no serían del todo necesarias ni eficientes.
    Por esta razón coincido con el artículo en que proponer drásticas políticas que tendrían un alto costo en términos de crecimiento económico es algo que debería ser considerado con sumo cuidado y prudencia. Obviamente esto no quiere decir que se suspendan todas las políticas públicas tendientes a contrarrestar los problemas ambientales, sino que se trate de buscar la manera mas eficiente de llevarlas a cabo, con la tranquilidad de que la situación no es tan trágica como la mayoría creíamos.

  20. Resulta interesante conectarse con una información que hace referencia al estado de los mares. Lo lamentable es que resulta una información demasiado parcializada.
    El IPCC (Panel Intergubernamental para el cambio climático) es una organización de las Naciones Unidas que acaba de reunir a los líderes mundiales en Copenhague reclamándoles que asuman definitivamente la responsabilidad que les compete para luchar contra el irreversible cambio climático del planeta. Consecuentemente existirá una nueva Cumbre Mundial en diciembre en Lima y el año próximo en Paris, dónde concretarán sus aportes responsables.
    La afectación que por causa del cambio climático pueden experimentar los mares, consiste (sin considerar los deshechos acumulados), en el aumento de su nivel y en la acidificación que vayan adquiriendo en la medida que se mantenga la presencia en la atmósfera de la elevada proporción de gases efecto invernadero. Estamos tratando de explicar que esa profusa población ictícola puede sufrir impactos severos si se ignora la necesidad de afrontar la lucha contra el cambio climático sin mas trámite, tal cual lo han decidido las naciones del mundo.

  21. Este articulo me lleva a pensar en la intencionalidad de la investigación. Me genera muchas dudas el motivo del proyecto científico. En mi opinión, debido a la intoxicación constante que reciben los océanos (residuos plásticos, derrame de petroleo y el calentamiento global entre otras) y a la cantidad de estudios, investigaciones y documentales que demuestran lo contrario sobre la contaminación de los recursos naturales, me hace reflexionar sobre que hayan invertido 9 millones de dolares teniendo en cuenta los escasos proyectos de cuidado ambiental que se hacen al rededor del mundo.
    A mi pensar, esta investigación se encuentra asociada con las potencias pesqueras y explotadoras de los recursos naturales que cada vez cuentan con menos espacios físicos para abastecer su comercio.
    Así mismo me llama la atención que las muestras de ADN que se tomaron sean abiertas y utilizadas recién dentro de 20 años esperando avances tecnológicos para su provecho cuando la tecnología científica tiene la capacidad demostrada de avanzar rápida y eficazmente en un periodo de tiempo mucho mas corto del que se piensa necesitar.
    En conclusión, lo único positivo que rescato del articulo son las muestras supuestamente tomadas (digo «supuestamente» porque si el motivo de la investigación es el que estimo, dudo que alguien dentro de 20 años recuerde la obtención de estas muestras) de no ser así podría ser un buen avance a la hora de evitar la extinción de las especies a causa de la egoísta mano del hombre

Responder a Magali Stefani Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *