El llamado “sesgo de confirmación” es el que nos lleva a descartar rápidamente opiniones contrarias a las que ya tenemos. Por supuesto, cada uno de nosotros está muy cómodo con lo que piensa y, tal vez, no quiere cambiar, pero sí quiere cambiar como piensan otros, pero éstos están a su vez cerrados por su propio sesgo de confirmación. En un paper IZA DP No. 15428 David L. Dickinson de Appalachian State University, IZA and Chapman University trata el tema con el título “Political Ideology, Mood Response, and the Confirmation Bias”: https://docs.iza.org/dp15428.pdf
“El sesgo de confirmación es una forma bien conocida de razonamiento motivado que sirve para proteger a un individuo de la incomodidad cognitiva. Escuchar puntos de vista rivales o información que se opone a las creencias crea disonancia cognitiva y, por lo tanto, evitar la exposición o descartar la validez de la información disonante son estrategias racionales que pueden ayudar a evitar o mitigar las emociones negativas. Debido a que a menudo hay un pensamiento sistemático involucrado en la generación del sesgo de confirmación, la deliberación tiende a promover este sesgo de comportamiento. Sin embargo, se subestima la importancia de la emoción negativa para desencadenar la necesidad de este sesgo. Este artículo aborda un vacío en la literatura al examinar el estado de ánimo y el sesgo de confirmación en el dominio político. Utilizando los resultados de dos estudios y tres tareas de decisión distintas, presentamos datos sobre más de 1100 participantes que documentan el sesgo de confirmación en diferentes entornos. Todos los métodos (reclutamiento y tamaño de muestra, hipótesis, variables, planes de análisis, etc.) fueron prerregistrados en Open Science Framework. Nuestros datos muestran evidencia de un sesgo de confirmación a través de distintas dimensiones de formación de creencias y preferencias. Como se planteó como hipótesis, los datos muestran un fuerte aumento en los estados de ánimo negativos autoinformados después de ver declaraciones políticas o información que son disonantes con la ideología política de uno. Finalmente, si bien no es tan sólido en todas las tareas, reportamos evidencia que respalda nuestra hipótesis de que el estado de ánimo negativo moderará la fuerza del sesgo de confirmación. Juntos, estos resultados resaltan la importancia de la respuesta del estado de ánimo para comprender el sesgo de confirmación, lo que ayuda a comprender mejor cómo este sesgo puede ser particularmente difícil de combatir.”