Algo más sobre un tema que causó polémica: la visita de Milton Friedman a Chile

Algo más sobre este polémico tema: la visita de Milton Friedman a Chile durante el gobierno de Pinochet. Es tratado en el libro MILTON FRIEDMAN. THE LAST CONSERVATIVE, BY JENNIFER BURNS, y aquí vemos parte de un comentario sobre el libro por ALAIN MARCIANO: Marciano, Alain. Review of “Milton Friedman. The Last Conservative” by Jennifer Burns. Journal of the History of Economic Thought (forthcoming). Preprint at SocArXiv,osf.io/preprints/socarxiv

“Tampoco deja de lado el delicado tema del “viaje de seis días de Friedman” a Chile. Seis días de “reuniones ininterrumpidas con la élite militar y política” (368), incluida una reunión con el propio general Pinochet, junto con Arnold Harberger y Rolf Luders, el estudiante chileno quien escribió una tesis bajo la supervisión de Friedman. Seis días sobre los cuales Friedman permaneció en silencio, pero sobre el cual se habló mucho, incluyendo “[una] enorme cantidad de simples y viejos «desinformación» que consistió en enmarcar a Friedman como el hombre detrás del plan económico de Pinochet  mientras que, “[e]n verdad”, explica Jennifer Burns, Friedman “casi no jugó ningún papel en diseño de políticas”. (372) Pero seis días impactaron a Friedman, cambiando sus puntos de vista sobre la libertad.

Antes de Chile, Friedman estaba convencido de que la libertad económica era “esencial para la vida política en libertad” (379). Chile le hizo darse cuenta de que centrarse demasiado en la libertad económica sin insistir en la libertad política “podría interpretarse como aceptar la represión política”. (379) Y podría llevar incluso a aceptar la represión. En la conferencia de 1981 de la sociedad Mont-Pelerin que tuvo lugar En Chile, alguien dijo que podría ser necesario un Estado fuerte para instaurar el “friedmanismo”.  “[H]orrizado”, Friedman “invirtió la ecuación”. (380) En “Los mercados libres y los Generales”, en un artículo de Newsweek de enero de 1982, presentaba la libertad política como “un derecho necesario”, como condición para el mantenimiento a largo plazo de la libertad económica”. (citado en Burns, 380)

El impacto de la Escuela de Chicago en Chile. Sí, empezó con Pinochet, pero abarcó incluso a opositores

Con los alumnos del curso sobre Ideas Políticas y Económicas en América Latina vemos un artículo de Francisco Rosende donde comenta el impacto de las ideas de la Escuela de Chicago en Chile, y en otros países de la región. http://fppchile.org/wp-content/uploads/2015/12/ideas-instituciones-y-lideres_poirtada.pdf

Aquí su introducción:

“A partir de mediados de los 70 se inició en la economía chilena un profundo proceso de transformaciones, el que dio impulso a un progreso sostenido de ésta en las décadas posteriores. Este proceso de reformas tuvo lugar en el contexto de un prolongado y severo estancamiento de la actividad productiva, junto con importantes desequilibrios fiscales, los que amenazaban con desatar una hiperinflación. El papel protagónico que alcanzó en el diseño e implementación de dichas reformas un importante grupo de economistas, que realizó estudios de postgrado en la Universidad de Chicago, ha llevado a una frecuente asociación del proceso de reformas y estabilización aplicado en Chile, con las lecciones que emergen de la investigación y planteamientos de quienes han sido las principales figuras del Departamento de Economía de la Universidad de Chicago en las últimas décadas, los que se han identificado como la “Escuela de Chicago”3.

De la experiencia de transformación económica iniciada en Chile a partir de mediados de los 70 surgen una serie de temas e interrogantes, los que le otorgan un especial atractivo a ésta. Por un lado, es interesante examinar cuáles fueron los factores que llevaron a una presencia tan marcada de economistas entrenados en la Universidad de Chicago en el diseño e implementación de las políticas que cambiaron radicalmente el rumbo de la economía chilena. En particular, es razonable esperar que para observadores externos de dicho episodio sea en alguna medida contradictorio, o al menos sorprendente, el comprobar que un gobierno militar estuviese dispuesto a implementar y sostener un conjunto de políticas dirigidas a liberalizar la economía, tras décadas de creciente intervención del Estado en ésta. Esto nos lleva a examinar cómo se gestó la influencia de los economistas de Chicago y en qué medida esta ha persistido tras el término del gobierno militar, ocurrido en marzo de 1990.

Por otro lado, es interesante recordar que la presencia protagónica de economistas entrenados en la Universidad de Chicago no se limitó al caso chileno en los 70. En efecto, en Argentina y Uruguay se iniciaron en dicho período procesos dirigidos a resolver importantes desequilibrios macroeconómicos y promover una mayor apertura de las correspondientes economías. Si bien la extensión y claridad de la agenda de liberalización de dichas economías fue bastante más acotada que lo que se planteó en Chile, parece razonable sostener que la dirección de dichos procesos era parecida. Sin embargo, tras la crisis de la deuda externa de comienzos de los 80, la que golpeó con fuerza a las economías latinoamericanas- en su mayoría expuestas a una peligrosa combinación de alto déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos y fijación del nivel (o trayectoria) del tipo de cambio- los movimientos hacia una mayor liberalización y apertura impulsada en Argentina y Uruguay fueron abandonados, mientras que en Chile – tras un breve período, en el que se designaron autoridades económicas con una visión fuertemente crítica del proceso de reformas iniciado en la década  previa – finalmente se terminó intensificando la agenda de política económica asociada con el “Enfoque de Chicago”. Las diferencias en la trayectoria seguida por las economías mencionadas es ciertamente un aspecto interesante de analizar. En especial, en lo que se refiere a la identificación de las causas que llevaron a distintos grados de influencia de los economistas de Chicago en cada caso. Si bien el análisis de las particularidades de cada economía excede el propósito del presente documento, aventuraremos alguna interpretación para las causas que hicieron más resistente el proceso chileno en relación a lo observado en Argentina y Uruguay.”