Conferencia de Ciudades Libres y Privadas (Praga, octubre 2022) sobre estructuras legales y monetarias alternativas

Anteriormente he publicado aquí artículos del Journal of Special Jurisdictions, que tratan sobre zonas especiales de gobierno privado. Ahora el tema es parte de un artículo titulado “El mercado realista de la gobernanza privada” por Jeff Deist, [Extraído de los comentarios pronunciados en la Conferencia de Ciudades Libres y Privadas «Libertad en nuestra vida», celebrada en Praga el 22 de octubre de 2022]. https://mises.org/es/wire/el-mercado-realista-de-la-gobernanza-privada

Así comienza:

“En esta conferencia y en otras similares, que tratan sobre estructuras legales y monetarias alternativas, he notado en los últimos años una fuerte tendencia a favor de la acción sobre el argumento, de la construcción sobre la persuasión, de la práctica sobre la teoría. Esto es loable y comprensible para todos nosotros, frustrados por el estatismo y todos sus terribles vástagos: la guerra, el dinero malo, la división, junto con la degradación económica, social y cultural. Es comprensible que queramos salir, y no dentro de cien años, sino dentro de nuestra vida.

He visto una respuesta a un tuit que promocionaba este encuentro en este sentido: tienen programados grandes pensadores y teóricos para hablar, pero lo que realmente necesitan son planificadores urbanos. O, podríamos pensar, arquitectos e ingenieros. Sin duda, es un punto justo. Pero debo confesar que hoy represento a los teóricos, y a los rothbardianos en particular.

En mi defensa, la teoría que sustenta cualquier nuevo modelo de gobierno privado o de ciudades libres es tan importante como los planos de un edificio. Los carpinteros tienen un dicho: «Mide dos veces y corta una». Otra versión de esto se encuentra en el koan zen «Reduce la velocidad para acelerar». Tal vez sea un buen momento para repensar nuestro enfoque de lo que podría significar la gobernanza privada, y cómo alinear mejor este movimiento con las realidades políticas, económicas y culturales actuales. Recordemos que «paralelo» implica la coexistencia pacífica con las estructuras políticas existentes. No es amenazante y es voluntario.

Para promover la idea de la gobernanza privada, debemos comprenderla plenamente nosotros mismos. Debemos asegurarnos de que nuestra visión se ajusta a la naturaleza humana, que es otra forma de decir que se alinea con el mercado. Como empresarios, debemos tomar el mundo tal y como es y no como nos gustaría que fuera. De lo contrario, nos arriesgamos a crear un producto que nadie compra.

Y, hablando de crear, no olvidemos que la primera y más duradera forma de gobierno privado es la familia. Quizá la forma más rápida de construir tu propia «estructura paralela» sea empezar a tener hijos. Ayer oímos hablar mucho de vivir como un nómada digital, de buscar múltiples pasaportes y de la vida en el mar, pero no debemos olvidar que el objetivo de construir mejores estructuras de gobierno es que los seres humanos puedan vivir mejor. Esto requiere nuevos seres humanos.”

Un orden espontáneo dentro de una ciudad planificada: el caso de los pueblos de Shenzhen

La Zona Económica de Shenzhen, situada al lado de Hong Kong, fue donde se iniciaron todos los cambios económicos en China promovidos por Deng Xaoping. Pero en ese invento de una gran ciudad sobrevive un “orden espontáneo”, que es comentado en este articulo de la muy interesante Journal of Special Jurisdictions: “Unexpected Laboratories Within the State-Sanctioned Laboratory:  Shenzhen’s Urban Villages”, po Michael Castle-Miller, de Politas Consulting: http://ojs.instituteforcompgov.org/index.php/jsj/issue/view/5

“Cuando Deng Xaoping anunció su “experimento” de zona económica especial en 1979, pocos podrían haber predicho el sorprendente crecimiento que ocurriría en Shenzhen. En poco más de tres décadas, el conjunto de pueblos pesqueros y agrícolas en la frontera de Hong Kong creció de una población de 300 000 a 14 millones (Feng, 2011). Sorprendentemente,  el  crecimiento  de  Shenzhen  no  se  produjo  a  expensas  del  desplazamiento  de  la  población  original. como lo han hecho zonas en la India y muchos otros países (p. ej., Cook, 2013). En lugar de aplastar las pequeñas aldeas rurales basadas en clanes, la ciudad se vio obligada a construir alrededor de ellas y los aldeanos se convirtieron en una clase rara de terratenientes de élite en un país en el que se supone que todas las tierras ur-banas son propiedad del gobierno. los esfuerzos del gobierno por borrarlos y absorberlos en su propia visión de la civilidad  de  la  ciudad,  los  aldeanos  resistieron  y  se  aferraron  a  sus  tierras,  transformándolas  en  chengzhongcun,  o “pueblos urbanos”. Los pueblos urbanos se convirtieron en enclaves experimentales accidentales dentro del en-clave experimental planificado más grande de la ciudad. En la actualidad, alrededor de siete millones de aldeanos indígenas y arrendatarios migrantes habitan las 318 aldeas urbanas restantes. Este documento argumenta que, de acuerdo con el espíritu experimental de Shenzhen, las aldeas urbanas deben verse como sus propios experimentos involuntarios  que  demuestran  la  capacidad  de  las  regulaciones  relajadas  de  planificación  y  residencia  para  promover la equidad, la inclusión y el desarrollo económico. La primera parte describirá el rápido crecimiento de la ciudad de Shenzhen  y la formación de sus aldeas urbanas. La segunda parte discutirá los discursos dominantes sobre los pueblos urbanos. La tercera parte explorará los efectos de las aldeas urbanas como medios de crecimiento económico e inclusión tanto para los habitantes indígenas como para los migrantes.”

Nace una zona libre para negocios digitales: La Zona Económica Digital de Catawba

Muy bueno el Journal of Special Jurisdictions. En la última edición trae un artículo titulado “The Catawba Digital Economic Zone:  A Native American SEZ”, por el Prof. Tom W. Bell, de Chapman University, Fowler School of Law: http://ojs.instituteforcompgov.org/index.php/jsj/issue/current

“La Nación Indígena Catawba anunció recientemente el lanzamiento de un nuevo tipo de zona económica especial (SEZ) en sus tierras de reserva en la región del piedemonte de las Carolinas. La Zona Económica Digital de Catawba (CDEZ) tiene como objetivo proporcionar “Una jurisdicción construida para la industria de activos digitales y Fintech”. Las leyes federales y estatales afirman que la Nación tiene jurisdicción original y exclusiva sobre dos categorías de controversias: las derivadas de contratos en los que la Nación o sus miembros son parte y las derivadas de cualquier código civil que expida la Nación para la conducción de negocios y individuos en su reserva. Juntos, otorgan a la Nación autoridad soberana sobre el comercio, real o virtual, que tiene lugar en las tierras de Catawba. La Nación ha invocado esta facultad para crear la CDEZ. El Consejo General de Catawba, una asamblea democrática de miembros de la tribu, promulgó recientemente una ordenanza civil que crea un marco legal especialmente diseñado para respaldar la banca electrónica, las criptomonedas, los tokens no fungibles y otras industrias de acti-vos digitales y fintech. Este documento, escrito por uno de un equipo de codificadores que trabajó en él, describe los orígenes, la base legal y la estructura básica de la CDEZ, el ejemplo más reciente y avanzado de una jurisdicción especial centrada en los activos digitales.”

En Venezuela la política económica es un desastre, pero ahora aprobaron una ley de Zonas Económicas Especiales

Muy interesante trabajo sobre un tema que hemos analizado varias veces en estas páginas: las zonas económicas especiales, free cities o jurisdicciones especiales, como se quieran llamar. En un artículo publicado por CEDICE se analiza este tema en relación a Venezuela. Se titula: Las Zonas Económicas Especiales, aspectos necesarios para su desarrollo en el país, por Listay Guerrero, Economista, Especialista en Derecho Internacional Económico y de la Integración. Investigadora de CEDICE Libertad: https://cedice.org.ve/temas-del-conocimiento-3/#zee

Así comienza:

“Los programas de Zonas Económicas Especiales (ZEE) son una herramienta de políticas públicas con los que cuentan los países para la atracción de inversiones, visualizando las oportunidades de desarrollo de actividades productivas en territorios delimitados, que cuentan bajo este esquema con un marco regulatorio propio para estos y que los distingue de lo aplicable en el resto del país, además de ofrecer la infraestructura necesaria para el desarrollo de negocios.

La literatura sobre la materia además destaca que las ZEE requieren que su diseño e implementación se haga con una adecuada coordinación institucional y con una visión integral de políticas públicas, que considere entre otros, la política industrial, de comercio exterior y el debido balance fiscal, tomando en cuenta los eventuales ingresos y costos que pueden acarrear las zonas, sobre todo cuando son administradas por entes estatales.

El marco regulatorio de las ZEE debe ofrecer un correcto balance de deberes y derechos para los actores que decidan participar en estas, de manera que cuenten con seguridad jurídica, respeto a los derechos de propiedad y libertades económicas, también deben ofrecer los elementos básicos tales como: facilitación de negocios, infraestructura, mano de obra, esquemas de incentivos.

En Venezuela se estuvieron discutiendo propuestas de ley hasta que finalmente se aprobó la “Ley de Zonas Económicas Especiales”[1], que contempla un marco general, pero que aún faltan por conocerse aspectos formales y detalles de cómo se evaluarán e implementarán los distintos programas de ZEE, de cómo operará la burocracia administrativa, considerando lo que esto pesa en el día a día de las empresas[2].”

¿Una «Zona Económica Especial» china en Brasil? el caso de Pouso Alegre

Seguimos con el tema de las “free cities” y algunas experiencias en todo el mundo, en particular en América Latina. En este caso, también en el Journal of Special Jurisdictions, un artículo titulado “Special Economic Zone: A Path to Increase Brazil’s Economic Position with Chinese FDI, por Isabela Christo, de Tsinghua University and Government of the State of Minas Gerais, comenta la experiencia con la zona económica especial china en Brasil. La zona se encuentra en Pouso Alegre, estado de Minas Geraes.

http://ojs.instituteforcompgov.org/index.php/jsj/article/view/26/17

“Este artículo examina la creación de una Zona Económica Especial (ZEE) en la ciudad de Pouso Alegre (en el estado de Minas Gerais, Brasil) como una forma de atraer Inversión Extranjera Directa (IED) de China. La hipótesis de la autora es que Minas Gerais recibiría más IED si se implementaran los incentivos adecuados. Las ZEE son una herramienta de este tipo para fomentar el desarrollo económico y  social  de  Pouso  Alegre.  Este  documento  analiza  los  entornos  micro  y  macro  de  la  planificación estratégica de la zona para comprender la viabilidad del esfuerzo y lo que dice sobre la elección de la ciudad de  Pouso  Alegre.  El  documento  también  presenta  los  antecedentes  económicos  de  Brasil  y Minas  Gerais  para  mostrar  las  oportunidades  de  inversión  que  ya  existen.  Este  documento  destaca cómo  las  medidas  económicas  necesarias  para  implementar  las  ZEE  son  una ruta  formidable  para reducir los obstáculos burocráticos y promover la inversión internacional desde lugares como China.”

Zonas de Oportunidad en los Estados Unidos: de nuevo, el básico impulso de bajar impuestos y regulaciones para que crezca la inversión

Hemos visto el tema de las Zonas Económicas Especiales anteriormente. Ahora la consultora McKinsey publica un informe sobre las que se denominan “Opportunity Zones” en Estados Univos. No es lo mismo, pero es interesante el tema y el análisis de políticas similares en países como UK y otros tibios intentos anteriores. El informe aquí: https://www.mckinsey.com/industries/public-sector/our-insights/making-the-most-of-us-opportunity-zones

La introducción:

“Un nuevo programa busca impulsar el desarrollo en las comunidades más necesitadas e impulsar la economía nacional. Similares, los esfuerzos pasados ​​ofrecen ideas que pueden ayudarles a tener éxito.

La mayoría de los programas de desarrollo económico siguen un patrón similar. Por lo general, los gobiernos ofrecen una combinación de beneficios fiscales, exclusiones y menos regulaciones con la esperanza de atraer nuevas inversiones a comunidades económicamente en dificultades. El nuevo programa federal de zonas de oportunidad, establecido por el Congreso de los EE. UU. En la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos de diciembre de 2017, también sigue ese modelo. En este caso, el gobierno espera que un impuesto a las ganancias de capital efectivo más bajo atraiga el capital de los inversionistas a proyectos en aproximadamente 8,700 distritos censales de EE. UU.

Para ayudar a los gobiernos estatales y locales, así como a los inversionistas a sobrellevar los desafíos esperados, echamos un vistazo más de cerca a programas anteriores similares para ver cómo les fue. Específicamente, analizamos el programa de zonas empresariales del Reino Unido de la década de 1980, las zonas de empresas dirigidas por el estado de los EE. UU. De las décadas de 1980 y 1990 y las zonas de empoderamiento urbano de los EE. UU. De mediados a finales de la década de 1990.2

Estos programas tuvieron resultados mixtos. Algunas zonas experimentaron crecimiento y transformación, mientras que otras no. Sus experiencias, junto con las conversaciones con los accionistas e inversionistas del gobierno estatal y local, sugieren que las zonas de oportunidad pueden enfrentar desafíos. Dos de esos desafíos pueden ser ayudar a los inversionistas y otras partes interesadas a entender y navegar el programa, y ​​asegurar que los beneficios transformen a las comunidades y ayuden a los residentes locales. Aprendiendo de programas anteriores, creemos que cinco acciones pueden aumentar las posibilidades de éxito. Los estados, ciudades y pueblos que emplean estas medidas pueden no solo atraer capital nuevo a sus comunidades, sino también atraer negocios, empleos y desarrollo que trabajen para transformar verdaderamente las comunidades.

Entendiendo y navegando el programa.

La gran cantidad de zonas de oportunidad y el volumen de capital que se espera que atraigan crean un desafío abrumador para los inversores que eligen entre ubicaciones y proyectos. A partir de marzo de 2019, más de 230 llamados «fondos de oportunidad» buscan colectivamente recaudar más de $ 25 mil millones en un rango de inversiones.3 Los fondos son geográficamente diversos, con casi la mitad enfocados en estados específicos, un trimestre centrado en inversiones en una región específica, y el resto está abierto a cualquier oportunidad de inversión a nivel nacional.”

Las «Zonas Económicas Especiales» explican en buena medida el gran cambio de la economía china, también en Emiratos

Muy interesante trabajo de Daniel Fernández y Olav Dirkmaat, de UFM Market Trends sobre las Zonas Económicas Especiales (ZEE) en el mundo, la exitosa experiencia en China y Emiratos y su posible aplicación en Honduras. Vale la pena. Así comienza:

 

“La historia de las zonas francas y zonas económicas especiales está repleta de éxitos y fracasos. Desde que China inauguró cuatro zonas económicas especiales (SEZs) en 1984, la popularidad de estas zonas ha ido en aumento, especialmente con el fin de lograr reformas de mercado de gran alcance en las economías más pobres, en las que las reformas a nivel nacional se consideraron políticamente imposibles.

Honduras, el segundo país más grande del Triángulo Norte, está inmerso en una espiral de pobreza y corrupción. Con un PIB per cápita cercano a los $2,500 , Honduras es el tercer país más pobre de Latinoamérica, sólo Nicaragua y Haití están en peores condiciones en términos del PIB per cápita.

Se necesitan reformas urgentemente en Honduras, la capacidad del país para introducir estas reformas ha sido limitada, como lo demuestran varios indicadores económicos claves.

Honduras incremento su puntación muy levemente en el índice de libertad económica de Heritage Foundation (Honduras pasó de un puntaje de 57 de 100 en 1995 a 60.6 de 100 en 2018). En el índice de competitividad global, publicado por el Foro Económico Mundial, Honduras disminuyó su puntaje durante el mismo período, desde 53.06 en 2007 (90º país en la lista) a 52.46 en 2018 (101º país).

Honduras está lejos de convertirse en un país desarrollado. A su ritmo actual, Honduras tardará 160 años en lograr un PIB per cápita similar al PIB per cápita actual de Estados Unidos. Para detener la migración hacia el norte, es vital que el crecimiento del PIB en Honduras se acelere desde sus niveles actuales. Es casi imposible pedirle a la población hondureña que espere otros 160 años. Sin embargo, parece que hay pocas esperanzas de un cambio estructural en las políticas y una mejora significativa de sus instituciones actuales.

A pesar de ello, la implementación exitosa de una zona económica especial (SEZ) podría cambiar esta perspectiva pesimista. Como lo demuestran los casos de China, Emiratos Árabes Unidos y Panamá, las SEZs ofrecen esperanza para un país tan afectado por la pobreza como Honduras. Además, surgieron iniciativas recientes para establecer un tipo de SEZ más integral y de mayor alcance, denominadas zonas para el empleo y el desarrollo económico (ZEDE), que tienen una mayor flexibilidad que una SEZ típica.”

El informe completo en:

Impacto económico de una zona de empleo y desarrollo económico (ZEDE) en Honduras