El mercado: un lugar donde se puede hacer dinero, pero también encontrar relaciones sociales y amistad

Así es, el mercado es mucho más que un lugar para intercambiar cosas y buscar hacer dinero, puede ser también un lugar para encontrar relaciones sociales y amistades. Es el planteo en el artículo titulado “The Market as a Space for Building a Peaceful Society”, en Peace Review, por Christopher Coyne, Associate Director, F. A. Hayek Program for Advanced Study in Philosophy, Politics, and Economics; Michael Romero, PhD Fellow y Virgil Storr, Board Member, Mercatus Center: https://ppe.mercatus.org/publications/austrian-economics/market-space-building-peaceful-society

Esto es lo que plantean:

“La vida social puede tomar una variedad de formas, algunas violentas, otras pacíficas. Un tipo de arreglo social especialmente propicio para la paz son las amistades, es decir, las relaciones basadas en la confianza y la dependencia mutuas. El mercado es un espacio importante, pero a menudo descuidado donde podemos practicar hábitos de paz y desarrollar amistades. Los mercados son espacios sociales donde se construyen sociedades pacíficas. Aunque el mercado es de hecho un espacio para el intercambio económico de derechos de propiedad, también es un espacio local, nacional e internacional para la sociabilidad y la conversación extraeconómica que cruza estrechas líneas de amistad. A través de nuestra participación en los mercados, participamos en los esfuerzos morales tanto de nuestros vecinos como de la gente lejana, y nos conectamos con personas que de otro modo no tendríamos ocasión de conocer.”

Para quienes se preocupaban del «monopolio» de Facebook: el cambiante mundo de las redes sociales

Un interesante estudio del Pew Research Centre muestra algo que todos sabemos: el cambiante mundo de las preferencias en los jóvenes en cuando a las redes sociales. El estudio se refiere a los Estados Unidos, pero, además de ser interesante para entender hacia dónde va la tendencia, lo es también para todos los que se preocuparon en su momento por el “monopólico” de Facebook, ahora en decadencia.

El informe se titula “ Teens, Social Media and Technology 2022”, por EMILY A. VOGELS, RISA GELLES-WATNICK y NAVID MASSARAT: https://www.pewresearch.org/internet/2022/08/10/teens-social-media-and-technology-2022/

“El panorama de las redes sociales está en constante cambio, especialmente entre los adolescentes que a menudo están a la vanguardia de este espacio. Una nueva encuesta del Pew Research Center de adolescentes estadounidenses de 13 a 17 años encuentra que TikTok se ha disparado en popularidad desde su debut en América del Norte hace varios años y ahora es una de las principales plataformas de redes sociales para adolescentes entre las plataformas cubiertas en esta encuesta. Alrededor del 67% de los adolescentes dicen que alguna vez usan TikTok, y el 16% de todos los adolescentes dicen que lo usan casi constantemente. Mientras tanto, la proporción de adolescentes que dicen que usan Facebook, una plataforma de redes sociales dominante entre los adolescentes en la encuesta de 2014-15 del Centro, se ha desplomado del 71 % de entonces al 32 % en la actualidad.

YouTube encabeza el panorama en línea para adolescentes de 2022 entre las plataformas cubiertas en la nueva encuesta del Centro, ya que es utilizada por el 95% de los adolescentes. TikTok es el siguiente en la lista de plataformas sobre las que se preguntó en esta encuesta (67 %), seguida de Instagram y Snapchat, que son utilizadas por aproximadamente seis de cada diez adolescentes. Después de esas plataformas viene Facebook con un 32 % o menos de acciones que usan Twitter, Twitch, WhatsApp, Reddit y Tumblr.1

Los cambios en el panorama de las redes sociales desde 2014-15 se extienden más allá del auge de TikTok y la caída de Facebook. Cada vez más adolescentes dicen que están usando Instagram y Snapchat desde entonces. Por el contrario, Twitter y Tumblr vieron una disminución de la proporción de adolescentes que informan que usan sus plataformas. Y dos de las plataformas que el Centro rastreó en la encuesta anterior, Vine y Google+, ya no existen.”

Kibbutzim en Israel: ¿cambiaron sus ideas y creencias después de los cambios o tuvieron que cambiar antes para hacerlos?

Como parte de la NBER WORKING PAPER SERIES, un paper estudia lo que menciona en su título “THE EFFECT OF LABOR MARKET LIBERALIZATION ON POLITICAL BEHAVIOR AND FREE MARKET NORMS” en este caso respect a Israel y la salida de las políticas comunitarias de los kibbutzims. Los autores son Ran Abramitzky, de Stanford University,  Netanel Ben-Porath  y Shahar Lahad, de la Hebrew University,  Victor Lavy de la University of Warwick y Michal Palgi de Haifa University: Working Paper 30186 http://www.nber.org/papers/w30186

El tema es cómo cambió la visión de quienes vivían bajo un régimen comunitario-comunista en los kibbutzim de Israel cuando pasaron a mecanismos de organización y remuneración de mercado. Según los autores, las modificaciones realizadas cambiaron la visión y las creencias de los miembros de los kibbutzim, pero me pregunto si la causalidad no es también al revés: tuvieron que cambiar las ideas y creencias para embarcarse en cambios que terminaron generando condiciones de mercado en las relaciones.

Esto comentan:

“Estudiamos los efectos de la liberalización del mercado laboral en el comportamiento político y las actitudes hacia el capitalismo y el socialismo de libre mercado, explotando una reforma mediante la cual las comunidades socialistas israelíes llamadas kibbutzim pasaron de la distribución igualitaria a salarios basados ​​en el mercado. Nuestra estrategia de identificación se basa en la implementación abrupta y escalonada de esta reforma en diferentes kibbutzim. Primero examinamos los cambios en el comportamiento asociados con esta liberalización del mercado laboral y documentamos que la reforma condujo a un cambio en los patrones de votación electoral, lo que resultó en una disminución del apoyo a los partidos políticos de izquierda y un mayor apoyo a los partidos de centro y derecha en las elecciones nacionales. Usando datos de encuestas anuales sobre actitudes durante 25 años, mostramos que la reforma condujo a un mayor apoyo a las políticas de libre mercado, como la privatización total y los salarios diferenciales. Además, disminuyó el apoyo a políticas socialistas como la copropiedad de los medios de producción. Sin embargo, la reforma aumentó el apoyo a la red de seguridad para apoyar a los miembros débiles a través de la garantía mutua. Estos efectos parecen estar impulsados ​​por un aumento en el nivel de vida y la ética laboral que resultó de la reforma. Concluimos que la introducción de salarios basados ​​en el mercado condujo a un cambio de actitud hacia una economía de mercado con compasión, revelando un cambio en el apoyo de los miembros de su modelo socialista democrático tradicional a un modelo socialdemócrata.”

Se vienen los mercados predictivos, donde vas a poder invertir o apostar sobre cualquier cosa

Desde hace algunos años vienen ensayándose y desarrollándose los llamados “mercados predictivos”. Esto es, son mercados donde se pueden comprar y vender activos cuyo valor está atado a algún hecho en particular, por ejemplo, si va a crecer o no el PBI. Lo atractivo de tales mercados es que reunirían el conocimiento disperso de quienes tienen algo de conocimiento sobre ese tema y estaría dispuestos a “apostar” en favor de un determinado resultado, generando información, tal vez más completa que la de hacer una encuesta sobre el tema.

En un artículo de Bloomberg, Business Week, se comenta la reciente aprobación de uno de esos mercados. El artículo se titula: “A New Prediction Market Lets Investors Bet Big on Almost Anything”: https://www.bloomberg.com/news/features/2022-05-26/kalshi-s-stock-market-of-the-world-let-s-you-bet-on-anything?srnd=businessweek-v2&sref=htOHjx5Y

“El 3 de noviembre de 2020, día de las elecciones, dos jóvenes empresarios recibieron una llamada del presidente de la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos con noticias importantes. Luana Lopes Lara y Tarek Mansour habían pasado los últimos 18 meses tratando de obtener permiso para iniciar un nuevo tipo de intercambio financiero ambicioso y controvertido, uno en el que, en lugar de apostar por los precios de las acciones o futuros de materias primas, las personas podían intercambiar instrumentos vinculados a los resultados de eventos del mundo real, como la aprobación de una legislación, el clima en un día en particular o el ganador del Oscar al mejor actor.”

“El potencial de los mercados de predicción es bien conocido por cualquiera que haya leído el éxito de ventas de James Surowiecki, The Wisdom of Crowds. Los mercados bien diseñados pueden ayudar a extraer el conocimiento contenido dentro de grupos dispares, y la investigación muestra que cuando las personas tienen dinero en juego, hacen mejores pronósticos. “Es un impuesto a la mierda”, dice Lopes Lara. Eso explica por qué Google, Microsoft Corp. e incluso el Departamento de Defensa de los EE. UU. han utilizado internamente los mercados de predicción para guiar las decisiones, y por qué los sitios de apuestas políticas vinculados a universidades como PredictIt, donde las apuestas tienen un tope de unos pocos cientos de dólares, a veces superan las encuestas.”

Walter Castro y Julio Elías sobre el mercado de transplantes de hígado, y que diría Adam Smith

Walter Castro y Julio Elías publican un muy interesante paper como parte de los Documentos de Trabajo de UCEMA titulado INJECTING ADAM SMITH’S IDEAS IN THE MARKET FOR KIDNEY TRANSPLANTS Walter Castro y Julio Elias,  Abril 2022 Nro. 828; www.cema.edu.ar/publicaciones/doc_trabajo.html

Un tema seguramente polémico para muchos. Acá una traducción de su resumen, que no será como la han escrito los autores porque va vía Google Traductor:

“Los órganos para trasplante son extremadamente valiosos y su escasez se ha convertido en uno de los temas de política pública más candentes en la mayoría de los países con programas de trasplante desarrollados. ¿Podría el sistema de trasplante de riñón beneficiarse de una inyección de las ideas de Adam Smith? En este artículo, combinamos las ideas de Adam Smith de La teoría de los sentimientos morales y La riqueza de las naciones para analizar los principales desarrollos del mercado de trasplantes de riñón, incluido el intercambio de riñones, las reglas predeterminadas para las donaciones de personas fallecidas (consentimiento presunto versus consentimiento informado), reglas de prioridad y propuestas para pagar a los donantes de órganos. Inyectar las ideas de Adam Smith en este problema aporta nuevos conocimientos en términos de política pública y diseño de mercado. Por ejemplo, su teoría de igualación de diferencias, expuesta en el Libro I, Capítulo X, de La Riqueza de las Naciones, proporciona una base para estimar cuál sería el precio de un riñón en un mercado legal (Becker y Elias 2007). Sus visiones sobre las decisiones humanas que pugnan entre las ‘pasiones’ y el ‘espectador imparcial’ y sobre las dificultades de organizar la vida económica apelando principalmente a la benevolencia, y otros sentimientos hacia los allegados, son esclarecedores para el diseño político de cualquier sistema de donación (remunerada, donaciones o intercambios no dirigidos) proporcionando una comprensión de lo que motiva a las personas en el contexto de los mercados. Teniendo en cuenta las ideas de Adam Smith, también evaluamos muchas restricciones que existen actualmente en el mercado de los trasplantes de riñón que imponen límites severos a las decisiones individuales, algunas de ellas para compensar una posible falta de autocontrol. Esperamos mostrar con nuestro análisis no sólo la actualidad de las ideas de Smith sino la importancia para el análisis económico de combinar tanto la Teoría de los Sentimientos Morales como la de la Riqueza de las Naciones, y no considerarlas por separado como obras maestras aisladas.”

Walter Eucken: padre del ordoliberalismo, en la primera reunión de la Mont Pelerin Society

Walter Eucken es considerado uno de los padres fundadores del “ordoliberalismo”. También fue miembro fundador de la Mont Pelerin Society. Stefan Kolev y Karen Horn publican un artículo donde presentan y traducen la presentación original de Eucken en la primera reunión de la MPS. El artículo:

Kolev, Stefan; Horn, Karen (2022) : Walter Eucken on competitive order at the founding meeting of the Mont Pèlerin Society 1947, Freiburger Diskussionspapiere zur Ordnungsökonomik, No. 22/03, Albert-Ludwigs-Universität Freiburg, Institut für Allgemeine Wirtschaftsforschung, Abteilung für Wirtschaftspolitik und Ordnungsökonomik, Freiburg i. Br.

Disponible en: http://hdl.handle.net/10419/251522

Su presentación:

“Este artículo proporciona, después de una introducción contextualizadora, la primera traducción de la presentación de Walter Eucken durante la primera sesión de la reunión de fundación de la Sociedad Mont Pèlerin, del 1 al 10 de abril de 1947. Eucken fue el único académico radicado en Alemania que asistió a la conferencia y ya tomó parte activa en su preparación, especialmente a través de su extenso intercambio con Friedrich A. Hayek y Wilhelm Röpke. Si bien Eucken participó en varias sesiones posteriores, su intervención en la sesión “’Libre’ empresa y orden competitivo” es de particular interés con respecto a la economía política de la Escuela de Friburgo. Revela fuertes paralelismos con el programa de investigación contemporáneo de Hayek y la Escuela del “Old Chicago”.”

Las «big tech»: ¿monopolios anti-competitivos? ¿sería mejor que estuvieran regulados?

El notable crecimiento de las “big tech” en las últimas décadas ha desatado una discusión acerca de sus posiciones supuestamente monopólicas e intentos en distintos países de regular sus actividades. Ahora bien, una cosa es tener una posición “monopólica” y otra es tener acciones discriminatorias que abusan de esa posición en detrimento de competidores. Estas nuevas big tech tienen ciertas características que no son compatibles con la conducta de una empresa monopolista: por ejemplo, son gratuitas, mientras que un monopolista tradicional aprovecharía esa circunstancia para subir su precios; por otro son muy innovadoras (Microsoft, Amazon y Facebook invirtieron 71.000 millones de dólares en I&D en 2017, sólo detrás de las farmacéuticas), algo que no encontraríamos en un monopolio que no se preocupa de la competencia.

El Institute of Economic Affairs de Londres ha publicado una serie de conferencias sobre el tema con el título The Meaning of Competition in the  Digital Age, https://iea.org.uk/publications/the-meaning-of-competition-in-the-digital-age/

Una de esas conferencias es de Cento Veljanovski con el título “Hayek on Competition and AntiTrust in the Digital Age”, donde analiza las posiciones que tuviera el economista austriaco en relación a la competencia, la información y el conocimiento. En general, el autor cree que Hayek no estaría de acuerdo con una regulación estatal de estas empresas, pero luego comenta:

“Lo que puede haber dado motivo de preocupación a Hayek es la integración vertical de algunas grandes plataformas en línea, como Google y Facebook, que brindan la infraestructura básica de comercio y redes sociales y, al mismo tiempo, compiten directamente con quienes usan su plataforma. Esto provoca un conflicto de intereses fundamental, ya que la plataforma puede favorecer su servicio mientras recopila datos sobre las ventas, los servicios y los usuarios del negocio de su competidor intermedio. Google, por ejemplo, opera el motor de búsqueda a la vez que es un importante proveedor de espacios publicitarios en línea y servicios de búsqueda especializados, como la comparación de compras. Esto crea inevitablemente un conflicto de intereses ya que la plataforma actúa como «árbitro y jugador».”

¿Y si eso fuera así, la solución sería la regulación gubernamental? En el mismo texto Philip Booth presenta distintos casos de regulación privada, tales como las que generan las bolsas de comercio, la Asociación de Swaps y Derivados, las normas contables y hasta Uber, que si bien es una empresa establece regulaciones para la competencia entre los conductores.

El tema, como siempre, no es que esos problemas y conductas no existan, sino si el remedio termina siendo peor que la enfermedad, y convirtiendo “monopolios” privados en monopolios “legales’ contra los que no se puede competir, salvo a beneficio de la política.

Milei, vouchers y la educación estatal: artículo en La Nación

Artículo en La Nación: https://www.lanacion.com.ar/opinion/milei-vouchers-y-educacion-estatal-nid25012022/

MILEI, VOUCHERS Y LA EDUCACIÓN ESTATAL

Martín Krause

 

Si hay algo que está claro es que Javier Milei no necesita a nadie que salga en su defensa, tanto sea por su carácter como por la solidez de sus ideas, estén los demás de acuerdo con ellas o no. En un reciente reportaje es criticado en un punto específico: la educación pública. El tema es tan interesante que merecer dedicarle algo más de espacio.

La discusión sobre este tema suele convertirse cae en una típica discusión basada en chicanas, tan común entre nosotros, presentando como a Milei como un ogro sin sensibilidad social, quien no dudaría en dejar a todos los niños pobres en la calle. Equivalente a eso sería pedir a quienes lo critican que saquen la billetera y muestren cuán dispuestos están a financiar la educación de los pobres, siguiendo ese común dicho en inglés «put your money where your mouth is». De otra forma es hacer beneficencia con el dinero de los demás, lo que no parece tener mucho sustento moral. No nos abre las «puertas del Cielo», ni a nosotros ni a los funcionarios del Ministerio de Educación.

Milei plantea dos escenarios diferentes: uno, ideal, donde no habría Estado y todo se financiaría voluntariamente; otro, con un Estado pequeño, que llama «minarquista». La idea de una sociedad sin Estado puede parecer estrafalaria para algunos y no digna de la menor atención cuando la dice Milei, pero no sé si dirían lo mismo cuando la decía nada menos que Jorge Luis Borges:

“…para mí el Estado es el enemigo común ahora; yo querría –eso lo he dicho muchas veces- un mínimo de Estado y un máximo de individuo. Pero, quizá sea preciso esperar… no sé si algunos decenios o algunos siglos –lo cual históricamente no es nada-, aunque yo, ciertamente no llegaré a ese mundo sin Estados. Para eso se necesitaría una humanidad ética, y además, una humanidad intelectualmente más fuerte de lo que es ahora, de lo que somos nosotros; ya que, sin duda, somos muy inmorales y muy poco inteligentes comparados con esos hombres del porvenir, por eso estoy de acuerdo con la frase: “Yo creo dogmáticamente en el progreso”. Jorge Luis Borges & Osvaldo Ferrari, En Diálogo I (Buenos Aires: Editorial Sudamericana, 1998, p. 220.) “Creo que con el tiempo mereceremos que no haya gobiernos.», Jorge Luis Borges, “El Informe de Brodie”, Obras Completas II (Barcelona: Emecé Editores, 1996), p. 399.

En el escenario con un Estado pequeño, o para llegar a ese Estado pequeño, Milei plantea una solución conocida como «vouchers”, o vales, la cual tampoco es algo “extraterrestre». Se la puede encontrar en países tan «políticamente correctos” como Suecia, Dinamarca, Holanda o la República Checa, donde quienes reciben esos vales pueden luego usarlos para pagar la escuela, pública o privada, que elijan. En Suecia están vigentes desde 1993, cuando se estableció que todos los gobiernos locales debían financiar las escuelas que eligieran los padres, sujetos a limitaciones de espacio, asignando un presupuesto por alumno del 85% del costo de las escuelas públicas. Pueden elegir entre cualquier escuela pública o privada que participe del sistema, incluyendo en estas últimas a empresas con fines de lucro (Björklund, Anders, Melissa A. Clark, Per-Anders Edin, Peter Fredriksson, and Alan B. Krueger. 2005. The Market comes to Education in Sweden: An Evaluation of Sweden’s Surprising School Reforms New York: Russell Sage Foundation.). En caso de exceso de demanda, en las escuelas públicas se da prioridad a los alumnos vecinos; en las escuelas privadas se toma como base el orden de inscripción, con la excepción de Estocolmo, donde en las escuelas secundarias se admite con base en el desempeño. En 2016/17 el 20% de las escuelas primarias eran “independientes”. También el 32% de las escuelas secundarias. Dos empresas que administran escuelas de este tipo cotizan en la bolsa de Estocolmo.

Pero estos son vouchers financiados con impuestos. Los que propone Milei son «vouchers privados», es decir, financiados con aportes voluntarios particulares. La idea tampoco es tan extraña y la conocemos aquí y en todo el mundo como «becas”, que otorgan personas o empresas para que otros puedan estudiar. No es nada más que eso.

Claro, quedan varios temas a discutir. Por ejemplo, si el dinero alcanzaría para cubrir los gastos, que claramente serían menores porque ahora todos los establecimientos educativos, públicos y privados, estarían sometidos a la competencia, y recibirían sus fondos no del Ministerio, sino de su capacidad para convencer a padres y estudiantes sobre las ventajas de ese establecimiento en particular. Maestros y directivos podrían fijarse sus propios salarios, sin depender de un funcionario o un sindicato.

Si el monto de las becas es suficiente también tiene que ver si son «deducibles” de los impuestos que actualmente pagan los contribuyentes. ¿Acaso serían pocos los que optarían por ellos si tienen la opción entre pagar, por ejemplo, ganancias o bienes personales, o darle ese dinero como una beca a estudiantes pobres? Es su dinero, sólo que ahora tienen la posibilidad de elegir su destino, aunque todavía no la de liberarse de la imposición.

Ya en 1994, propusimos junto con Alberto Benegas Lynch (h) una reforma completa en ese sentido (El derecho de enseñar y aprender, Revista Libertas 20, 1994), convirtiendo a los actuales maestros y directivos en propietarios de las escuelas, pero ahora llamados a competir. Y no solamente en cuanto al precio o los servicios, sino fundamentalmente en cuanto a los contenidos, ya que no existiría ningún curriculum mínimo o máximo que adoctrine a los niños desde temprano y cada escuela sería libre de elegirlo, como también su metodología de enseñanza. En esa competencia podríamos ver cuál es mejor, cuál más adecuado para los tiempos modernos o para las preferencias de los padres y estudiantes.

En ese otro escenario borgiano, ya no habría Estado o impuestos y la educación se ofrecería al igual que hoy ocurre con tantos otros servicios, y con los avances de la tecnología moderna vaya a saber cómo serían, pero seguramente con mucha variedad: presenciales, virtuales, híbridos, con contenido religioso o no, con énfasis en los idiomas o la tecnología o el arte y la creatividad o la producción.

Mientras tanto, educación estatal es lo que tenemos (ya que toda la educación es “pública”, es decir, para el “público”, también la que llamamos “privada”). Es cara y no es buena, ha sido cooptada por los sindicatos en su beneficio, no el de los niños. No está mal, entonces, tener ideas osadas.

 

 

Murray Rothbard y la competencia: la posibilidad de precios diferentes para bienes homogéneos

Con los alumnos de la UBA Económicas, Historia del Pensamiento Económico II, Escuela Austriaca, vemos a Murray Rothbard en “Monopolio y competencia”. En este caso sobre la posibilidad de precios diferentes en el mercado para bienes homogéneos:

Rothbard

“Un fenómeno que a veces aparece, sin embargo, es el de los precios multiformes. (Por supuesto, debemos contemplar el caso de un bien realmente homogéneo; de otro modo, no habría más que precios diferentes para bienes distintos.) Siendo así, ¿cómo pueden aparecer los precios multiformes?, y ¿acaso tiene de algún modo sentido atribuirles violación de las normas o de la ética, dentro de una sociedad de mercado libre?

Tenemos que empezar por separar los bienes en dos especies: los que pueden revenderse y los que no tienen esa cualidad. A la segunda categoría corresponden todos los servicios de carácter intangible, los que son consumidos directamente o se desgastan en el proceso de producción; en cualquier caso, esos mismos bienes no pueden ser revendidos por el primer adquirente. Los servicios no revendibles comprenden también el uso locativo de un bien tangible, ya que en ese caso, el bien en sí no se compra, sino que se adquieren sus servicios conjuntos durante un período. Puede servir como ejemplo el “alquiler” de espacio dentro de un camión fletero.

Ocupémonos primero de los bienes revendibles. ¿Cuándo puede haber precios multiformes para tales bienes?

Claro está que es condición necesaria la ignorancia por parte de algún vendedor o comprador. El precio de mercado de cierta clase de acero puede, por ejemplo, ser de una onza de oro por tonelada; pero un vendedor, únicamente por ignorancia, puede seguir vendiéndolo a media onza de oro por tonelada.

¿Qué ocurrirá? En primer lugar, alguna persona despierta le comprará el acero al vendedor desinformado y lo revenderá al precio de mercado, estableciendo así la efectiva uniformidad. En segundo lugar, se presentarán otros compradores que ofrecerán más que el primer interesado para aprovechar la ocasión, con lo cual informarán al vendedor acerca de su precio bajo. Por último, el vendedor que persiste en su ignorancia no podrá continuar comerciando durante mucho más tiempo. (Por supuesto, puede ocurrir que el vendedor tenga vehemente inclinación a vender acero por debajo del precio de mercado en virtud de motivos “filantrópicos”.) Pero si persiste, su acción se traduce sencillamente en comprar algo que para él es un bien de consumo: la filantropía, cuyo precio paga al recibir menores ingresos. Procede así como consumidor y no como empresario, tal como ocurriría si contratara a un pariente inepto a expensas de disminuir sus ganancias. Por ende, no se trataría de un ejemplo de auténtica fijación multiforme de precios, para cuyo caso el bien tiene siempre que ser homogéneo.

Tampoco el comprador se encuentra en situación diferente. Si el comprador es un ignorante y continúa adquiriendo acero a dos onzas de oro la tonelada, cuando el precio de mercado es de una onza de oro, algún otro vendedor pronto disipará el error al ofrecerle en venta el acero por mucho menos. En caso de que no haya más que un solo vendedor, el comprador que adquiere más barato puede aún revender con ganancia al comprador que tenga un precio más alto. Y un comprador que persista en su ignorancia también quedará eliminado de los negocios.

No hay más que un único caso en el que existiría la posibilidad de establecer un precio multiforme para un bien susceptible de ser revendido: el de aquel adquirido por sus consumidores, sus últimos compradores. Mientras que los compradores que no adquieren para consumir habrán de estar alerta con respecto a las diferencias en los precios, y uno de ellos puede revender un bien a otro, al que le cobra un precio más alto, en cambio los consumidores definitivos no contemplan habitualmente la posibilidad de revender lo que compran. Un caso clásico se presenta cuando los turistas americanos van a un bazar oriental.

El turista no tiene ni tiempo ni inclinación para un estudio cuidadoso de los mercados de consumo, y, en consecuencia, todo turista ignora el precio corriente de cualquier bien.

Por lo tanto, el vendedor está en condiciones de aislar a cada comprador, cobrando mayores precios a los compradores más interesados, precios menos elevados a los que no demuestren tanto interés, y totalmente bajos a los compradores marginales, siempre por el mismo bien.

De esa manera, el vendedor alcanza un objetivo vedado en general a todos sus colegas: sacarles algo más que el “excedente del consumidor” a los compradores. En este caso se cumplen las dos condiciones: los consumidores ignoran el precio corriente y no entran al mercado para revender.

¿Acaso –como a menudo se imputa– los precios multiformes distorsionan la estructura de la producción y son hasta cierto punto algo contrario a la moral o abusivos? ¿En qué afectan a la moral? Como siempre, el vendedor se propone aumentar todo lo posible sus ganancias dentro de un intercambio voluntario y, ciertamente, no puede ser responsabilizado por la ignorancia del comprador. Si los compradores no se toman la molestia de obtener información sobre la situación del mercado, se hallan, entonces, dispuestos a que parte de su excedente psíquico resulte aprovechado en su regateo por el vendedor.

Tampoco se trata de un acto irracional por parte del comprador. Su manera de proceder nos indica que prefiere permanecer en la ignorancia antes que hacer el esfuerzo o pagar la información referente a la situación del mercado. La adquisición de conocimientos, en cualquier terreno que sea, requiere tiempo y esfuerzo, y con frecuencia cuesta dinero, por lo que es perfectamente razonable que una persona, no importa el mercado de que se trate, prefiera correr riesgos en materia de precios, utilizando sus escasos recursos en otra dirección. La elección es absolutamente clara en el caso del turista en vacaciones, pero también es posible en cualquier otro mercado. El turista impaciente que prefiere pagar más caro y no gastar tiempo y dinero en averiguaciones sobre el mercado, y el compañero suyo que dedica varios días a un estudio intensivo del mercado de bazares, proceden de acuerdo con sus preferencias y la praxeología no puede considerar más racional al segundo que al primero. Además, no hay manera de medir los excedentes del consumidor, ganados o perdidos en el caso de ambos turistas. En consecuencia, debemos aceptar que el establecimiento de precios multiformes, en el caso de bienes revendibles, no distorsiona en absoluto la distribución de los factores productivos; por el contrario, es compatible con ella y, en el caso del turista, es la única manera de fijar precios compatibles con la satisfacción de las preferencias del consumidor.”

Mason & Dunung y las distintas estrategias para los negocios internacionales

Con los alumnos de UCEMA en la materia Empresas y Negocios Internacionales vemos el Cap. 10 de Mason & Dunung sobre las estrategias internacionales, y aquí explican lo que es una estrategia multidoméstica:  

Estrategia multidoméstica  

La estrategia multidoméstica maximiza la capacidad de respuesta local al otorgar autoridad para la toma de decisiones descentralizadoras a las unidades de negocios locales en cada país para que puedan crear productos y servicios optimizados para sus mercados locales. Una estrategia multidoméstica sería apropiada, por ejemplo, donde la tesis del mundo plano de Thomas Friedman no es aplicable. Una estrategia multidoméstica se centra en la competencia dentro de cada país y maximiza la capacidad de respuesta local.  

Asume que los mercados difieren y, por lo tanto, están segmentados por fronteras nacionales. En otras palabras, las necesidades y deseos de los consumidores, las condiciones de la industria (por ejemplo, el número y tipo de competidores), las estructuras políticas y legales y las normas sociales varían según el país.  

Mediante una estrategia multidoméstica, la empresa puede personalizar sus productos para satisfacer las preferencias y necesidades específicas de los clientes locales. Como resultado, la empresa puede competir de manera más efectiva en cada mercado local y aumentar su participación en el mercado local. Sin embargo, la desventaja de una estrategia multidoméstica es que la empresa se enfrenta a más incertidumbre debido a las estrategias adaptadas a los diferentes países.  

Además, debido a que la empresa está siguiendo diferentes estrategias en diferentes ubicaciones, no puede aprovechar las economías de escala que podrían ayudar a reducir los costos para la empresa en general. La estrategia multidoméstica ha sido más utilizada por las empresas multinacionales europeas debido a la variedad de culturas y mercados que se encuentran en Europa.  

Como se mencionó anteriormente, ¡YumBrands tiene un fuerte incentivo para competir internacionalmente con sus conceptos de restaurantes (es decir, KFC, Pizza Hut, Taco Bell, A&W Restaurants y Long John Silver’s). ¡Mmm! persigue una estrategia multidoméstica tratando de localizar tanto como sea posible. La firma no abre restaurantes usando solo el modelo estadounidense. Dondequiera que la empresa tenga ubicaciones, se adapta constantemente a los gustos locales y negocia bien cuando cambian los climas culturales y políticos: “En Japón, por ejemplo, KFC vende tiras crujientes de tempura. En el norte de Inglaterra, KFC hace hincapié en la salsa y las patatas, mientras que en Tailandia ofrece arroz fresco con salsa de soja o chile dulce. En Holanda, la empresa elabora una croqueta de patata y cebolla. En Francia, vende pasteles junto con pollo. Y en China, el pollo se vuelve más picante cuanto más al interior viajas. Cada vez más, si es solo una marca estadounidense sin un atractivo regional, será difícil de comercializar «. [1]  

Reconociendo esta limitación, ¡Yum! introduce sus productos en los mercados extranjeros que se encuentran a la distancia de «sabor» más corta de sus mercados nacionales tradicionales. [2] Por lo tanto, se adhiere a áreas de alta población en las que la cultura estadounidense también tiene cierto atractivo.