Calidad Institucional: los peores países del mundo. Por ahora, Corea del Norte no tiene rivales

Con la Fundacion Libertad y Progreso presentamos los resultados del Índice de Calidad Institucional 2016. Antes vimos los países con mejor calidad, ahora los peores:

Corea del Norte tiene el destacable logro negativo de aparecer en la última posición tanto en el indicador general como en los dos subíndices. La zona está poblada de países de África y aquellos de Asia que no han sabido acompañar o imitar a los otros países exitosos de la región. En cuadro también llama la atención acerca de la presencia de dos países latinoamericanos: Cuba en la posición 171º y Venezuela en la 183º. ¿Cuba mejor que Venezuela? Es discutible, aunque ciertos avances recientes en la isla y tantos retrocesos en Venezuela podrían estar justificando esto. También puede ser resultado una determinación metodológica que afecta el resultado. Se refiere esto a cuál es el criterio para incluir a un país dentro del ICI si no aparece en los ocho indicadores que se toman en cuenta. Tomar solamente a los que aparecen en los ocho hubiera sido muy restrictivo, por lo que se decidió que se considerarían a los países que aparecieran al menos en cuatro de ellos, y al menos también, con uno en alguno de los dos subíndices. Es decir que un país puede aparecer en el ICI si a su vez aparece en, digamos, tres indicadores sobre las instituciones políticas y uno de las de mercado. Algo así es el caso de Cuba, como se verá más adelante, y al no aparecer en algunos indicadores de mercado puede esto mejorar su posición relativa en relación a Venezuela. Nótese que Cuba aparece por debajo de Venezuela en cuanto a esas instituciones se refiere.

Esto refiere, inevitablemente, a si existe un cierto grado de discrecionalidad en la conformación del ICI, y la respuesta es afirmativa. Y es también, inevitable. Por ejemplo, los subíndices de instituciones políticas y de mercado reciben la misma ponderación: ambos aportan el 50% del ICI cada uno. ¿Es así como debería ser, o debería tener uno mayor ponderación que el otro? Podríamos discutir décadas sobre esto, y otra asignación sería tan discutible como ésta. El criterio para asignarle la misma ponderación (y también la misma a cada uno de los ocho indicadores considerados) es que la libertad es una sola que se refleja tanto en las acciones políticas como económicas y dada la importancia de las decisiones que tomamos en uno u otro ámbito, resulta entonces conveniente esa asignación. Por otro lado, la misma ponderación similar a cada índice plantea el dilema que ciertas cuestiones están siendo consideradas en más de un indicador. No solamente hay dos índices de libertad económica (aunque no son lo mismo y presentan resultados relativamente diferentes) sino que ciertos componentes aparecen en unos y otros, dándoles entonces una mayor ponderación de facto. Por ejemplo, la protección del derecho de propiedad aparece en el índice del respeto a la Ley, y también en los de libertad económica. Pero no solamente no sería posible eliminarlo de alguno de los indicadores mencionados sino que su misma presencia en ellos sería una señal clara de su importancia y, por ende, merecer una ponderación mayor.

Ahora bien, ¿cuáles son las peores tragedias en materia de calidad institucional? Desde ya se ha señalado a aquellos países que consistentemente ocupan los últimos lugares desde el inicio de este ejercicio evaluativo. Dos décadas en las peores circunstancias institucionales no ofrecen resultados recomendables para nadie. Pero también pueden ser tragedias, tal vez menos intensas que esas otras, aquellos países que han perdido la mayor cantidad de posiciones. Así, por ejemplo, desde 1996, Bolivia ha perdido 100 puestos, Argentina 99, Ecuador y Venezuela 74, señalando un particular deterioro en América Latina bajo la influencia del “socialismo del siglo XXI”, la nueva vertiente populista que trajo el nuevo siglo. Por supuesto que la magnitud de la caída tiene que ver también con la posición de partida. Bolivia y Argentina pierden más porque comenzaron de más arriba que Ecuador y Venezuela, aunque este último país haya llegado más abajo que todos ellos.

Otras ‘tragedias’ en el período han sido Zimbabwe (-66), Líbano (-61), Papúa Nueva Guinea y Djibouti (-59), Belice (-58). De todos estos, sin embargo, Ecuador y Zimbabwe han mejorado su posición en el último, siete y seis posiciones respectivamente, y Venezuela una, aunque es probable se deba más al deterioro de otro país que estuviera arriba suyo que a una mejora que no parece haber ocurrido, ni siquiera en esa magnitud.

¿Cuáles son los 15 países con peor calidad institucional del planeta?

Vimos antes cuáles son los 15 países con mejor calidad institucional. Ahora veremos cuáles son los peores. Al ver la lista, tal vez surja la pregunta si debería estar Cuba entre ellos. ¿Tiene Cuba mejor calidad institucional que Venezuela? En fin, un tema que se podría discutir. Pero aquí sucede que Cuba ni siquiera aparece en tres de los ocho indicadores que se toman en cuenta para hacer el Índice, todos ellos vinculados con la calidad de las instituciones de Mercado, que allí no existen o lo hacen en forma muy precaria.

Corea - Kim

La evolución de las últimas posiciones es la siguiente:

Año 2014 2013 2012 2011 2010 2009 2008 2007 Dif. 2007/2014
País
Congo 177 177 174 176 173 175 183 166 -11
Guinea-Bissau 178 172 172 174 171 173 165 159 -19
Afganistán 179 182 180 187 181 182 179 164 -15
Rep. Centro Africana 180 175 176 178 176 168 177 163 -17
Angola 181 179 179 181 174 179 178 171 -10
Uzbekistán 182 184 185 184 184 178 164 177 -5
Siria 183 169 161 165 161 160 158 151 -32
Venezuela 184 183 181 185 180 174 172 161 -23
Myanmar 185 180 190 193 191 191 188 184 -1
Zimbabue 186 187 184 188 187 188 186 179 -7
Guinea Ecuatorial 187 185 182 186 185 185 181 175 -12
Congo, Dem. Rep. 188 188 187 191 188 186 184 182 -6
Chad 189 186 183 189 186 187 185 178 -11
Eritrea 190 189 186 190 183 183 176 162 -28
Turkmenistán 191 190 189 192 189 189 187 181 -10
Corea del Norte 192 191 191 194 190 190 189 183 -9

 

Corea del Norte continúa en la última posición, su resultado descendente en los ocho últimos años se debe al incremento del número de países comprendido en el índice. Las noticias sobre este país, los testimonios de detenidos políticos y las purgas internas entre miembros del mismo gobierno son una muestra de la violación de los derechos individuales, tanto políticos como económicos. La presencia de Venezuela en ese grupo ratifica el deterioro observado en ese país. Es, también, reflejo de una visión sobre la democracia que otros gobiernos de la región comparten, aunque no llegan a esos extremos. Se trata de la idea de que una mayoría electoral otorga un poder absoluto al gobernante, un poder tal que le permite avasallar los derechos de las minorías.

Esa visión “populista” de la democracia tiene larga data, y encubierta en el prestigio de ésta, genera gobiernos en definitiva totalitarios. Los derechos individuales no están sujetos a votaciones mayoritarias, son derechos previos a la misma constitución de un gobierno que ninguna mayoría circunstancial puede derogar. Es precisamente el respeto por los derechos individuales, el respeto de las minorías y la limitación a los abusos de gobierno lo que genera calidad institucional.

Los últimos puestos en el índice consisten en regímenes dictatoriales o en democracias populistas totalitarias que violan libertades tales como la de expresión y de prensa, de propiedad, de traslado, de asociación. En el subíndice de instituciones políticas las cinco últimas posiciones, partiendo del último puesto, corresponden a Turkmenistán, Corea del Norte, Uzbekistán, Eritrea y Guinea Ecuatorial. En el de instituciones de mercado lo son Corea del Norte, Cuba, Sudán del Sur (esta nueva nación se incorpora este año al ICI), Chad y Eritrea. Venezuela ocupa la posición 175 en instituciones políticas y 186 en instituciones económicas.