Hume, Smith y Ricardo sobre el mercantilismo, el flujo de divisas y la asignación de capitales (III)

Con los alumnos de Economía de la UBA vemos a los clásicos: Hume, Smith, Ricardo, sobre el mercantilismo, el flujo de divisas y la asignación de capital. Los alumnos preguntan:

  1. David Hume, Essays, Moral, Political and Literary, Part II Chapter V «Of the balance of trade»: http://www.econlib.org/library/LFBooks/Hume/hmMPL28.html
  2. Adam Smith, Wealth of Nations Libro IV capitulo 1: Of the principle of the commercial or mercantile system: http://www.econlib.org/library/Smith/smWN12.html
  3. David Ricardo, Principles of Political Economy, Chapter IV, «On Natural and Market Price»: http://www.econlib.org/library/Ricardo/ricP2.html

Pregunta: En el párrafo 4.9 Ricardo explica que el deseo de los emplean el capital de tener mayores ventajas hará que los precios no puedan estar muy lejos de su precio natural por mucho tiempo. En relación a esto, ¿el autor suponía mercados de competencia perfecta? (esta pregunta se basa en el hecho de que existen mercancías cuyos precios pasan largo tiempo por encima de su precio natural por monopolios por ejemplo).

Está, al menos, asumiendo que no hay barreras de ingreso al mercado. Está diciendo que el precio relativo alto de una mercancía genera un mayor margen de ganancias y esto, más temprano que tarde, atraerá a otros capitalistas a ingresar en ese mercado lo cual terminará por reducir el precio debido a la competencia de los nuevos oferentes.

Pregunta: ¿Hay algún bien que debido a la escasez/abundancia del mismo su precio no se vería afectado por una causa accidental o temporal?

No se me ocurre ninguno. Todos los precios de los bienes escasos se verán afectados por una escasez o abundancia temporal; y en los casos de bienes superabundantes ni siquiera serían bienes económicos, o sea que no estarían sujetos a la escasez.

Pregunta: El traspaso de capital de un empleo a otro, ¿Es válido para todos los casos o hay alguna excepción donde dicho traspaso no exista?

Supongo que cuando hay barreras importantes al ingreso. Pensemos, por ejemplo, en la seguridad nacional, la defensa contra un ataque extranjero, que el estado monopoliza; no parece haber allí capitales interesados en ingresar para ofrecer un servicio diferente.

Pregunta: ¿Podría pasar que la utilidad de un bien descienda a tal punto que el capital no desee invertir más en tal empleo y como consecuencia el traspaso fuese total?

Sí, claro, pensemos, por ejemplo, en la gomina. Me parece que ya no se usa más, nadie la quiere, y ningún capitalista va a estar pensando en invertir en ella.

Pregunta: Si bien el autor considera al libre comercio como el régimen más beneficioso para las naciones ¿considera también las dificultades que se generarían en las pequeñas economías que quisieran desarrollarse frente aquellas que ya se encuentren afirmadas en este régimen?

Las economías pequeñas suelen ser las más abiertas, ya que no tiene sentido cerrarse en sí mismas, no pueden auto-abastecerse. Singapur era más pobre que Paraguay hace 50 años. Abrió su economía el comercio y hoy su PIB per cápita es 12 veces superior (60.500 dólares contra 5.000).

Pregunta: Según los conceptos que desarrolla en el texto, ¿Considera posible el desarrollo del libre comercio sin el accionar de los bancos que cuestiona, siendo estos una fuente importantísima para el desarrollo de la industria que el mismo autor apoya?

Hume cuestionaba la expansión bancaria del crédito, no su función de intermediación entre el ahorro y la inversión.

Pregunta: Considerando el régimen del libre comercio ¿No cree que el mismo limitaría la producción de las naciones a aquello que representara una ventaja comparativa beneficiosa con respecto al resto del mundo y, en este caso, dependería exclusivamente de los términos de intercambio que esta mercancía proponga con respecto a todas aquellas que la economía en su conjunto demande?

La teoría de las ventajas comparativas ha evolucionado mucho desde Smith y Ricardo. No tiene mayor sentido hablar de “países” cuando no son ellos los que importan o exportan. Por eso, la teoría del comercio internacional ha avanzado hacia considerar las ventajas comparativas en industrias, primero, y luego en específicas empresas. Eso significa que en el mismo ámbito geográfico de un país habrá empresas que tienen ventajas comparativas para abastecer el mercado interno, otras para eso y para exportar (Arcor, por ejemplo). Ambas competirán exitosamente tanto con empresas locales como extranjeras.

Pregunta: ¿Cuál es, a su modo de ver, la relación entre el dinero papel y su respaldo en metales?

Una relación directa si el dinero papel pretende ser un “recibo” de cierta cantidad de metal, indirecta si no lo es, ya que el incremento de dinero más allá de su demanda elevará el precio de todos los bienes, incluyendo el de los metales.

Pregunta: ¿Debe dejarse sólo a los mecanismos de mercado la regulación del consumo de bienes, fijación de precios?

Aunque pudieran considerar alguna excepción, ésa era la visión de Hume, Smith y Ricardo.

Pregunta: ¿Cómo diría el autor que la inflexibilidad laboral afecta al mecanismo de igualación de utilidades?

Si hace más costosa la contratación de trabajo, hace relativamente más barato el uso de capital, con lo cual tenderá a haber más de éste que de aquel.

Pregunta: El mecanismo descripto en el texto ¿No debería tener como corolario la imposibilidad de la inflación?

No, como se comentó antes, una mayor cantidad de metales podía generar inflación y el mecanismo se ocupaba de eliminar el exceso de dinero, vía su impacto en los precios.

Pregunta: ¿Los equilibrios son algo deseable?

Sí, significan una coordinación completa entre los deseos de los demandantes y de los oferentes. Cumplen, además, con la condición de óptimo de Pareto. Es decir, son eficientes, en el sentido que ya han mejorado su situación todos los que podían mejorarla.

Pregunta: ¿Cómo cree que se garantiza la multiplicidad de oferentes competitivos, frente a la posibilidad de la formación de carteles?

Removiendo las barreras de ingreso al mercado.

Pregunta: ¿Es tan sencilla la modificación de los salarios como el precio de cualquier otro bien, o hay una cierta rigidez a la baja?

Ahora la rigidez a la baja es bastante mayor de la que era entonces, debido a la existencia de regulaciones, laborales y otras, aunque no ha dejado de existir.

Pregunta: Por último, el párrafo 4.7, en la que el autor plantea la época en la que escribe como ‘una excepción’, ¿no puede dar la idea en realidad de que la economía transcurre siempre en épocas excepcionales signadas por circunstancias políticas y sociales, que impiden en cierta medida la movilidad de los factores como plantea?

Pero se refería a la salida de una guerra y eso sí parece una situación excepcional para la mayoría de los países actualmente.

Pregunta: Dadas las variaciones de los precios y subsiguientes decisiones descriptas que tomarían los empresarios: en qué parte de este proceso el mercado se encontraría en equilibrio?

Nunca se alcanza ese equilibrio. Para el momento en que las inversiones de esos capitalistas han madurado, las condiciones del mercado ya son otras, y así el ajuste es constante, hacia el equilibrio, aunque nunca llegue a alcanzarse.

Pregunta: cuando describe el traspaso del capital de un empleo a otro, menciona el empleo que deja un productor (despide obreros) y el empleo que toma el otro (contrata obreros): esta relación es proporcional? ¿podría implicar una variación en la tasa de desempleo?

No es proporcional. Pero no hay que pensar que el ajuste sea siempre negativo, puede ser que los capitalistas desarrollan nuevos proyectos y “se llevan” a los trabajadores desde otras industrias hacia las nuevas, sin tener que dejar a nadie en la calle. De hecho, éste es el fenómeno que explica el gran aumento de los ingresos en el mundo. Ya que, si no, ¿cómo se produjo entonces? De otra forma es pensar, como los luddistas, que las maquinarias destruían empleos. Sin embargo, luego de 250 años de introducir más y más maquinarias hay mucha más gente empleada ahora de lo que había entonces.

¿Si valoramos la libertad en el Mercado de las ideas, por qué no lo hacemos en el Mercado de bienes?

Ronald Coase es un caso especial: ganó el premio Nobel en Economía con solo haber publicado algunos artículos en revistas académicas; ningún tratado general ni libro sobre una temática específica. Pero, claro, muchos de los artículos que escribiera cambiaron el rumbo de la ciencia económica, abrieron nuevos campos de estudio y se encuentran entre los más citados en la historia de esta disciplina: https://ideas.repec.org/e/pco40.html

Uno de ellos es bien interesante. Se llama: “EL mercado de los bienes y el mercado de las ideas”. Allí, Coase plantea una aparente paradoja: ¿por qué se piensa que es adecuada la regulación estatal del mercado de los bienes y no la del mercado de las ideas? En sus palabras:

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“¿Cuál es la visión general que estaré examinando? La que dice que en el mercado de bienes, la regulación gubernamental es deseable mientras que en el mercado de las ideas la regulación gubernamental es indeseable y debería estar estrictamente limitada”.

Se supone que la regulación en el mercado de los bienes es necesaria porque los consumidores no tienen capacidad para realizar las elecciones apropiadas: los productores, sin regulación, no actuarían en el interés público, pero sí lo harían si se trata de los medios periodísticos. La publicidad, por otro lado, es usualmente es considerada parte del mercado de los bienes y no está protegida por la Primer Enmienda, celosa defensora de la libertad de expresión en los Estados Unidos, cuando las mismas opiniones que allí se expresan lo estarían si aparecieran en un libro o diario.

Cita a Aaron Director señalando: “El libre mercado, como un método deseable para organizar la vida intelectual de una comunidad fue demandado como deseable antes de que se lo propusiera para organizar la vida económica. Se reconocieron las ventajas del libre intercambio de ideas antes de que se lo hiciera en los intercambios voluntarios de bienes y servicios en mercados competitivos”.

Para Coase no es de extrañar que los intelectuales y la prensa promuevan la libertad de expresión en su propio ámbito, pero que no hagan lo mismo con el resto.

“Consideremos el caso de la ignorancia de los consumidores que usualmente se menciona como justificación para la intervención gubernamental. Resulta difícil creer que el público general está en mejor posición de evaluar visiones alternativas de políticas económicas y sociales que de elegir entre distintos tipos de comida. Sin embargo, se propone regulación en un caso y no en el otro. O consideren la cuestión de prevenir el fraude, para el cual normalmente se propone una intervención gubernamental. Sería difícil negar que artículos en los diarios y discursos de políticos contienen un número mayor de afirmaciones falsas o engañosas; en verdad, a veces no consisten de otra cosa. Se considera muy deseable el control gubernamental de propagandas falsas o engañosas. Sin embargo, una propuesta para establecer una Comisión Federal de Prensa o una Comisión Federal Política sería inmediatamente rechazada.”

Algo similar parece suceder en el campo de la educación, donde el ‘control de los contenidos’ es muy fuerte.

En definitiva, dice Coase, “tenemos que decidir si el gobierno es tan incompetente como usualmente se asume en el mercado de las ideas, en cuyo caso deberíamos reducir su intervención en el mercado de bienes; o si es tan eficiente como se lo asume en el mercado de bienes, en cuyo caso querríamos aumentar la regulación el mercado de las ideas”.

¿Y? ¿Nuestros alumnos de Derecho, por cuál se inclinan?

Control de cambios, expropiación de divisas, retenciones: se termina subsidiando a las importaciones

En una sección con un título apropiado a nuestra época (El Caos Monetario), Mises explica en 1944 los efectos del control de cambios, parte de una monografía titulada “Una propuesta no inflacionaria para la reconstrucción monetaria de posguerra”:

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“El control de cambios es el corolario del control de precios y salarios internos. El gobierno fija el precio de las divisas extranjeras a un nivel más bajo que el de mercado. Hace que sea un delito comprar o vender divisas a un precio mayor.”

“Esa medida resultará en una prohibición de todos los intercambios de moneda extranjera. La gente que ya posee divisas o las obtienen en el curso de sus transacciones tratará de mantenerla para evitar pérdidas. No habrá oferta de divisas en el mercado, mientras que la cantidad demandada se expandirá precisamente debido a que el precio fue reducido por el gobierno. Casi todas las transacciones comerciales con países extranjeros se frenarán, siempre que el gobierno sea lo suficientemente fuerte como para impedir el surgimiento de un mercado negro”. (Debido a esto, en Argentina y otros países se profundiza este control de cambios con la obligación de los exportadores de vender sus dólares al Banco Central. Si no fuera por esto, no habría oferta en el mercado oficial. Mises sigue con esto ahora).

“Por lo tanto, el gobierno está forzado a avanzar. Debe nacionalizar todos los negocios en moneda extranjera. Expropia a todos los dueños de divisas y oro. Cada residente está forzado a ‘vender’ sus existencias a una agencia gubernamental (en nuestro caso el Banco Central), a la tasa oficial. Así, esta agencia se convierte en el único operador en cambios. Pero aún esta medida fracasa en remediar el mal. No aumenta en absoluto la cantidad de divisas disponibles. Solamente las pone en manos de la agencia gubernamental. Los efectos del decreto del precio máximo se mantienen, esto es, una restricción de las exportaciones y de la oferta de divisas.”

“El gobierno quiere ‘salvar la cara’ y, por lo tanto, sin cambiar las palabras del decreto, mantiene una política del ‘avestruz’. Pretende que su agencia gubernamental cumple exactamente con el decreto. Pero si la agencia realmente vendiera divisas a la tasa oficial, su actividad se convertiría en un subsidio a un grupo privilegiado de importadores, mientras que el resto de los negocios no obtendría ninguna divisa. Por otro lado, si indemnizara a los expropiados dueños de las divisas a la tasa oficial debería cobrar un impuesto, y así frenar el comercio internacional. Como todo esto sería indeseable, aún idiota, el gobierno realiza ciertos trucos de ilusión con su propio decreto. El genio de algunos expertos ha sido inventar varios términos fantasiosos para estos métodos. Pero ya sea que hablen de premios a las exportaciones, subsidios, impuestos a ganancias extraordinarias (¿retenciones?), u otra cosa, la esencia de todos estos métodos es la misma: el gobierno en verdad compra y vende divisas no a la tasa oficial, sino a la tasa de mercado. En la medida que una persona privilegiada, sin embargo, obtiene divisas a la tasa oficial, se convierte en un deliberado regalo a ‘amigos’ del gobierno a expensas del Tesoro.”

“Se ha dicho en favor del control de cambios que los precios del mercado local no cambiaron proporcionalmente con el alza de la divisa. Así, los que se dedicaron al comercio internacional hicieron ganancias extraordinarias cuya confiscación ha de ser justa y no dañar al comercio. Se ha mencionado antes que los precios de los productos se retrasan cierto tiempo detrás de la suba del tipo de cambio. Pero tres cosas deben tomarse en cuenta. Primero, esto no se refiere a productos cuya oferta local depende totalmente o principalmente de importaciones. Segundo, el hecho que todos los precios de los productos importados han de subir muy rápido y que el negocio de exportar se vuelve temporalmente más rentable crea una tendencia hacia la restricción de las importaciones y el aumento de las exportaciones, esto es, hacia una mayor oferta y una menor demanda de divisas. Es contrario al objetivo que el gobierno actúe contra una tendencia que, desde su propia perspectiva, parece beneficiosa. Tercero, con la ausencia de control de cambios esas ganancias extraordinarias de la exportación desaparecerían rápido bajo la presión de la competencia.”

“El control de cambios fue la principal herramienta de las dictaduras europeas. Cuando Hitler llegó al poder en 1933, para imponer su dictadura sobre toda la nación alemana no tuvo que hacer más que aplicar el control de cambios establecido por uno de sus predecesores, M. Bruening, en 1931.”

¿Son un problema los oligopolios? Y, ¿es lo mismo si se generan en el Mercado o por regulaciones? (III)

Los alumnos de OMMA en Madrid, discuten sobre olligopolios en base a este comentario:

¿Se le ocurre algún mercado oligopólico? ¿Cuál sería?

¿Genera esto algún inconveniente? ¿Debería hacerse algo al respecto?

Pongo un ejemplo: ¿no es oligopólico el mercado de calificadores de riesgo? Pues hay básicamente tres: S&P, Moody’s y Ficht’s. ¿Habría que hacer algo?

Sus opiniones:

  • Por oligopolio entendemos un mercado dominado por muy pocas empresas. En este sentido podría mencionar el sector de las telecomunicaciones en España donde el mercado está dominado por Telefónica, Vodafone (ha comprado recientemente ONO) y Orange (que podría comprar recientemente Jazztel). También el mercado eléctrico/gas dominado por Endesa, Iberdrola y Gas Natural. Además, son mercados donde la regulación y los requerimientos de inversión hacen difícil la entrada de nuevos competidores.

Creo que un oligopolio no tiene por qué generar inconvenientes. En el caso de las telecomunicaciones (antes mencionado), la competencia entre las empresas ha sido positivos para los consumidores haciendo que 1) los precios desciendan (principalmente en el ámbito de telefonía móvil) y 2) las prestaciones mejoren (en el caso de acceso a Internet). En el caso mencionado de las eléctricas, los precios no han mejorado, pero se ha debido más (desde mi punto de vista) a las decisiones políticas de sucesivos gobiernos.

Desde mi punto de vista, lo importante es eliminar lo máximo posibles los aspectos regulatorios para que cada mercado sea libre y haya máxima competencia. Y que sean los empresarios los que decidan entrar en un mercado u otro. Si hay libertad, la existencia de oligopolios será por cuestiones empresariales y no políticas.

Desconozco el mercado de calificadores de riesgo. Sin embargo, he oído que estas empresas generan sus ingresos a partir de lo que empresas, fondos,… les pagan por valorar la calidad de sus activos/deudas/… y por tanto puede existir un conflicto de intereses. Además, creo que hay una empresa con mayor “influencia” americana y otra europea. En cualquier caso, creo que la valoración del riesgo que un inversor debe hacer no debe basarse en la calificación que una empresa de riesgos realice, sino de su propia valoración.

  • En el caso de Rumanía, parece haber un Oligopolio en el servicio de los supermercados.

Hay una cadena de supermercados llamada Mega Image que ha ido comprando los pequeños supermercados de la ciudad de Bucarest y se le ha ido quitando terreno a otras pocas cadenas de supermercados existentes en el mercado Rumano, al menos en Bucarest.

Se podría decir que hay unas 4 cadenas de supermercados que dominan el mercado y podríamos decir que estamos en presencia de un Oligopolio en este país.

Como comentan algunos de mis compañeros y estoy absolutamente de acuerdo, sucede que si estas, digamos 4 cadenas de supermercados que han sobrevidido hasta ahora en Rumanía, es porque son las que mejor han podido ofrecer su servicio a los precios del mercado y han sido los consumidores lo que han ido dando pie a esta situación al preferfir hacer la compra en los sitios que ofrecen los mejores precios, la mejor varidedad y el mejor servicio.

Los economistas neoclásicos, critican las situaciones de Oligopolio y demonizan el Monopolio alegando que en estas situaciones se tiende a explotar al consumidor mendiante el alza de los precios de los bienes de consumo porque son los empresarios los que pueden poner el precio que quieran. Pero debemos recordar que son los consumidores de los productos finales o de consumo quienre determinas los costtes de producción, comerialización, etc, siendo los que conforman el oligopolio, o el monopolista que mejor sobrevive a estas condiciones ajustando sus costes para poder vender a los precios que se ajustan a las valoraciones subjetivas de los compradores finales (el consumidor).

De modo que no debería haber inconveniente cuando estamos en presencia de un Oligopolio, o aún un Monopolio, no debería haber inconveniente y se debe dejar funcionar libremente. Eso sí, debe haber una condición, debermos estar en presencia de un libre mercado y debe haber ningún tipo de restricciones para aquellos empresarios que quieran entrar a competir en el mercado.

La presencia de un Oligopolio indica también, que los empresarios y sus recursos que han ido quedando en el camino durante el proceso competitivo, han ido asigando su tiempo, esfuero y redirigido sus recursos a otras actividades empresariales mas productivas, y a satisfacer otras nesidades de la sociedad que no han sido explotadas hasta ahora.

  • Ejemplo muy interesante. Asumo que el consumidor se ha beneficiado de la economía de escala que supone una mejor distribución. ¿Han bajado los precios, se han mejorado la calidad de los productos?
  • Efectivamente un ejemplo claro de oligopolio es la industria que forman las agencias de rating ya que estas tres que comenta el profesor en su ejemplo acaparan el 90% de la cuota del mercado. Esto es así porque existe una fuerte barrera de entrada en este tipo de negocio.

Existen denuncias sobre el presunto comportamiento colusivo de estas agencias, por ejemplo esta noticia en el diario El Economista

Un ejemplo de oligopolio es la industria de la gasolina, las gasolineras que se encuentran próximas tienen precios muy similares. Si una de ellas intentara aumentar su precio, los clientes acudirían a cualquiera de las otras y dicha gasolinera perdería clientes. No obstante, si la misma gasolinera baja sus precios conseguiría nuevos clientes, pero solo hasta que el resto de gasolineras próximas bajaran también sus precios. Estas acciones si no son independientes, es decir, si las gasolineras deciden aumentar simultáneamente sus precios de forma acordada incurrirían en colusión.

  • Cuando hay oligopolios pueden aparecer los cárteles, que son el acuerdo de varias empresas dentro de un oligopolio. Este acuerdo establece el precio que cobraran las empresas por sus productos, por lo tanto el precio no se regula de forma natural y libre por los agentes del mercado sino que están manipulados por unas pocas empresas.

Para que se produzca el fracaso de los cárteles es necesario que aparezcan nuevas empresas que entren en el mercado, que estén incentivadas para vender a precios más bajos, con diferentes estructuras de costes provocadas por estos precios más bajos, de este modo, estas nuevas empresas no cumplen con lo establecido en el «acuerdo» del cártel. Cuanto mayor sea el número de empresas compitiendo libremente más difícil es mantener la «disciplina» del cártel.

  • Existen distintos mercados oligopolicos, lo que solemos ver son oligopolios creados por el poder estatal. Recuerdo ahora mismo el caso del envío de paquetes. Hay pocas empresas que se dedican a esto en España (o por lo menos por mi zona) ¿A que se debe esto? A que el Correos público compite en este mercado, lo que hace que sea muy complicado que haya empresas capaces de competir con ellos.

Luego estan las regulaciones, como es el caso de los bancos y las electricas. En estos mercados oligopolicos es el estado el que se encarga de implantar barreras legales para que otros competidores puedan acceder a estos mercados y asi vallar el cortijo.

Por supuesto esto genera muchos inconvenientes, el principal es que en ausencia de competitividad los consumidores salen perjudicados al no poder acceder a mejores ofertas para satisfacer sus demandas, ofertas que en mi opinión podrian ser dadas por otros empresarios que localizasen esos nichos de mercado y ofreciesen productos acorde a las necesidades de algunos potenciales clientes.

Desconozco el caso de las agencias de Rating, pero de todas formas imagino que algo tan ligado a los poderes públicos debe ser oligopolico por definición. A ningún estado o supraestado le interesa que califiquen su deuda con poca nota así que les interesa controlar esto y por su puesto cuantas menos agencias haya mejor control se puede hacer.

La solución al tema de las agencias de Rating es no hacer mucho caso, los bonos, por ejemplo, deben ser valorados por uno mismo o por una fuente de verdadera confianza antes de tomar alguna decisión de inversion.

  • Todos estos despropósitos son posibles porqué el estado tiene a su mano la Ley, para vulnerar la libertad.

Este ensayo – http://www.elcato.org/la-ley – de 1848 lo deja claro. ¿porqué no se lee este texto en las escuelas?

  • Por hacer un ultimo comentario, yo creo que la mayoria de monopolios/oligopolios considerados y perseguidos por las «autoridades» directamente no lo son. Son simple fruto de la competencia o nacen por las economias de escala. En casi todos los paises hay 4-5 empresas que dominan el sector supermercados. Quizas en Rumania el proceso es mas reciente, pero es asi en muchos paises.

Creo que hay tambien mucho de demagogia y de populismo. Se refuerza la imagen del empresario explotador. Se dice a la poblacion que el estado «defiende sus intereses» y se ganan votos. Se hacen autenticas campañas de desprestigio de empresas como Microsoft, Google que han sido creadores de riqueza a una escala monumental. La politica una vez mas invadiendo el espacio de la libertad individual y economica.

Hume, Smith y Ricardo sobre el mercantilismo, el flujo de divisas y la asignación de capitales (II)

Con los alumnos de Economía de la UBA vemos a los clásicos: Hume, Smith, Ricardo, sobre el mercantilismo, el flujo de divisas y la asignación de capital. Los alumnos preguntan:

  1. David Hume, Essays, Moral, Political and Literary, Part II Chapter V «Of the balance of trade»: http://www.econlib.org/library/LFBooks/Hume/hmMPL28.html
  2. Adam Smith, Wealth of Nations Libro IV capitulo 1: Of the principle of the commercial or mercantile system: http://www.econlib.org/library/Smith/smWN12.html
  3. David Ricardo, Principles of Political Economy, Chapter IV, «On Natural and Market Price»: http://www.econlib.org/library/Ricardo/ricP2.html

Pregunta: Como interfiere que nuestros vecinos mejoren su producción en la rama que les exportamos, sería una pérdida para nosotros.

Pero no sería correcto pensar en términos de “países”. Lo mismo ocurre si tengo un kiosco y el “vecino” de la otra cuadra pone ahora uno. Ya no le vendo (no le exporto). Es el típico resultado de la competencia, que ocurre tanto a nivel local, como regional o internacional.

Pregunta: Si hubo tanto dinero como no se produjo una hiperinflación con la gran cantidad de dinero que circulo en los países Europeos.

Fue un proceso relativamente lento, pero los precios en Europa aumentaron seis veces entre mitad del siglo XV y el todo el siglo XVI (150 años). Se dice también que no aumentaron más porque en ese período también aumentó la demanda de dinero, debido a un mayor crecimiento de la población luego de las enormes pérdidas de la peste negra. Así y todo, el caso habla de la “resistencia” que presentan las monedas metálicas: había que sacarlas, explorar, organizar su tratamiento y transporte, etc. Todo esto llevó tiempo. El dinero fiduciario, por el contrario, se puede multiplicar varias veces de un día para el siguiente. Por eso, tal vez, no hubo “hipers” con moneda metálica, y las hubo con moneda papel.

Pregunta: ¿Considera que existen herramientas que permiten evitar que las desviaciones accidentales y temporales (oferta/demanda) impacten en el precio de las mercancías?

Seguramente, tanto Hume como Smith y Ricardo hubieran aceptado algún tipo de arancel o impuesto pero solamente con carácter muy temporal y acotado.

Pregunta: ¿Teniendo en cuenta este mercado que se auto regula encontrando un equilibrio entre la oferta y la demanda (sin intervención del estado), cree el autor que es posible acercar las clases sociales o por lo menos disminuir su marcada diferencia?

No sé si disminuir su diferencia pero sí elevar el nivel de vida de todos. Desde que escribieran Hume y Smith el PIB per cápita ha crecido en el mundo desde 250 dólares anuales hasta unos 7.000 actualmente. Si consideramos también que esos 250 se multiplicaban por unos mil millones de habitantes, para considerar la riqueza total, y hoy los 7.000 se multiplican por unos siete mil millones de habitantes, la riqueza total creada desde entonces es un fenómeno incomparable. Nunca hubo algo así en la historia de la humanidad. La idea de “progreso” no existía, es fruto de estos últimos 250 años.

Pregunta: ¿Así como la competencia es el generador de precios de las mercancías, los salarios no deberían ser consecuencia de una competencia dentro del mercado laboral entre los mismos obreros?

Lo son. Los salarios son determinados por la oferta y la demanda de trabajo. Y la demanda de trabajo es determinada, en última instancia, por las preferencias de los consumidores respecto a los bienes y servicios que han de producirse.

Pregunta: ¿Cómo es que los capitalistas reconocen esa falta de oferta para lograr sustituir su producción de un bien por otro?

Los emprendedores son quienes tienen esa capacidad de detectar demandas futuras y luego conseguir el capital y la gestión para llevar ese proyecto adelante. Se guían por señales que envían los mercados de capitales, por ejemplo, los precios de las acciones. Aunque estén pensando en un producto que hoy no existe, saben que un nuevo producto o servicio que acierta en satisfacer una necesidad puede recibir un enorme premio. Es lo que ha pasado con la capitalización accionaria de empresas como Google, Facebook o Ali Baba.

Pregunta: ¿Qué pasaría si ante un cambio de preferencias de los agentes hacia otro bien que no es de fácil remplazo, (es decir donde hay barreras a la entrada del mismo), como logrará el mercado ajustar al precio natural?

El mercado “tiende” a ese precio natural, o de equilibrio, pero es un proceso que nunca termina o sea que ese equilibrio nunca se alcanza finalmente. Si hay barreras de entrada, por ejemplo barreras regulatorias, ese proceso se retrasará.

Pregunta: ¿El motor del equilibrio está dado por el interés maximizador de los capitalistas, ahora si rigen controles de capitales (como en la mayoría de las economías del siglo XXI), como supondríamos afecta esto al equilibrio? ¿Simplemente lo retrasa, o lo impide?

Correcto, genera, en última instancia, una mala asignación de los capitales

Pregunta: ¿La verdadera riqueza de una nación en vez del dinero acumulado no sería la capacidad intelectual de todos sus ciudadanos y su deseo de desarrollarse por medio de su esfuerzo?

Sí, ése es uno de los recursos, tal vez de los más importantes en la economía moderna, pero también están los recursos naturales con los que pueda contarse y el capital acumulado. Aunque, en verdad, según los escoceses la capacidad de generar riqueza va a estar dada por la calidad de sus instituciones.

Pregunta: El autor dice que ninguna otra mercancía puede ser tan fácilmente transportada como el oro y la plata. ¿Cómo es el mecanismo de transporte? ¿Habla de llevarlos físicamente o la facilidad que brindan la existencia de letras de cambio y demás documentos?

Así es, y ese tipo de instrumentos financieros buscaban reducir esos costos.

Pregunta: Smith, en el párrafo 33, dice que el descubrimiento del pasaje a las Indias Orientales por el camino de Buena Esperanza amplió aún más el rango del comercio exterior que el descubrimiento de América porque aquellos países eran más avanzados. ¡¿Cómo pueden estos países tener una oferta mayor a la de un continente nuevo sin explotar?!

Bueno, precisamente, había allí ya capital invertido, producción y posibilidades de comercio inmediatas, no había que comenzar desde cero. En América lo único que había inmediato era el saqueo del oro y otros metales que tuvieran los aztecas o los incas.

Pregunta: ¿El autor no toma en cuenta la posibilidad que tienen España y Portugal de poner un precio alto al oro y la plata (ya que tienen casi la hegemonía de su producción) y así obtener riqueza obteniendo más bienes a cambio de ellos?

Pero para ellos la riqueza era poder gastarlos, poder adquirir los bienes y servicios que ahora podían tener. De poco les servía el metal solamente para guardarlo.

Pregunta: El autor dice en los párrafos 21, 22, y 24 que la presencia del papel hace que se tenga un nivel de metal precioso más bajo, ¿significa esto que el papel no tiene respaldo?

Así es, si el sistema monetario y bancario genera moneda papel más allá de la cantidad de metálico existente, su precio se devalúa.

Pregunta: En el contexto de que un país puede incrementar su nivel de dinero subiendo su tesoro público, encerrándolo y previniendo la circulación; el autor dice que un gran Estado (que hace esto) disipa su riqueza en proyectos malos y así destruye su industria. ¿Es esto necesariamente así? ¿Qué pasaría si hiciese inversiones productivas? (párrafo 28)

Smith favorecía la realización de obras de infraestructura, e incluso sugería que se financiaran con peajes. Su argumento contra los mercantilistas era que un país no era rico si su gobierno tenía ese oro acumulado sino si producía más bienes y servicios. Es necesario tener en cuenta que esos estados tenían que “comprar” ese metal, ya que el flujo de metales era el resultado del comercio que realizaban los particulares. Entonces, la pregunta es: ¿es correcto usar fondos públicos para comprar metal y atesorarlo? Tal vez lo sería si se dirigiera a construir una reserva para un cierto imprevisto futuro, pero al margen de esto, si el dinero quedara en manos del sector privado se canalizaría a la inversión y al crecimiento de la economía.

Pregunta: Concuerdo que es la industria y la gente lo que hace a un país rico, pero ¿España era menos rica que otros países con mejor manufactura en la etapa colonial? ¿Las posibilidades de financiamiento no juegan un papel en lo absoluto?

Es un caso típico. La corona española primero se apodera de todo el recurso al establecer la propiedad real de todo el subsuelo. Luego gasta esos recursos, lo que seguramente habrá favorecido a algunos productores locales, pero mucho a comerciantes que abastecían ese consumo con productos de toda Europa.

Vernon Smith sobre el «problema» de Adam Smith: intercambio y reciprocidad de bienes y de favores

Vernon Smith, premio Nobel de Economía 2002 por sus aportes para desarrollar la economía experimental, considera el llamado “Problema de Adam Smith”. ¿Cuál sería? Supuestamente presenta dos visiones contrapuestas del hombre en sus dos famosos trabajos, ejemplificados con estas citas:

“No es de la benevolencia del carnicero, del cervecero, o del panadero, de quienes debemos esperar nuestra cena, sino de la preocupación de estos por sus propios intereses… Esta división del trabajo no está originada en ninguna sabiduría humana, que anticipa y procura la opulencia a la que da lugar. Lo está en la necesaria, aunque muy lenta y gradual consecuencia, de una cierta propensión que observamos en su naturaleza, que sin buscar esa utilidad generalizada, lo inclina al trueque e intercambio de una cosa por otra”.

La riqueza de las naciones, Adam Smith, 1776

“No importa cuán egoísta se suponga al hombre, es evidente que hay ciertos principios en su naturaleza que lo hacen interesarse en la fortuna de los demás, y transforman la felicidad de aquellos en necesaria para él, aunque no obtenga de eso otro placer más que observarla”.

La teoría de los sentimientos morales, Adam Smith, 1759

Para Vernon Smith, como para Coase en un post anterior, no hay contradicción y recurre a la antropología y la sicología evolutiva para concluir:

Vernon Smith - copia

“Sin embargo, estas dos visiones no son inconsistentes si reconocemos como un rasgo distintivo fundamental de los homínidos su propensión universal al intercambio social. Esta propensión se expresa tanto en el intercambio personal en las transacciones sociales en pequeños grupos, como en el comercio impersonal, por medio de extensos mercados de grandes grupos. De esa manera, podemos decir que Smith tenía solo un axioma de comportamiento: “la propensión al trueque e intercambio de una cosa por otra”, donde los objetos de intercambio los interpretaré de tal manera que incluyan no solo bienes, sino también regalos, asistencia y favores, fundados en la simpatía y preocupación por los demás. Esto es, “en la generosidad, humanidad, amabilidad, compasión, amistad y estima” (Smith, 1759).”

“Como se puede observar en los registros etnográficos y en experimentos de laboratorio, ya sea que se intercambien bienes o favores, en ambos casos se producen ganancias, que son las que los seres humanos buscan incesantemente en todas las transacciones sociales. Así, este axioma de Adam Smith, interpretado de manera que incluya el intercambio de bienes y de favores -cuando éste ocurre en distintos instantes del tiempo-, así como el comercio de bienes -cuando éste es efectuado en un instante preciso del tiempo, ya sea por medio del dinero o por medio del trueque por otros bienes-, es suficiente para caracterizar la mayor parte de los emprendimientos sociales y culturales humanos. Esto explica por qué la naturaleza humana parece inducir a las personas a preocuparse simultáneamente de sí misma y de los demás, y permitiría entender el origen y fundamento último de los derechos de propiedad.”

“El derecho de propiedad es una garantía que permite que ciertos actos sean realizados por personas dentro de los marcos definidos por ese derecho. Nosotros automáticamente pensamos en el Estado como el garante contra represalias cuando los titulares del derecho lo ejercen. Pero los derechos de propiedad preceden a los estados-naciones, porque el intercambio social al interior de tribus sin Estado, y el comercio entre estas tribus precede a la revolución agrícola ocurrida hace solo 10.000 años, un mero pestañeo en la escala de tiempo de la emergencia de los humanos. Tanto el intercambio social como el comercio reconocen implícitamente derechos mutuos para actuar que se traducen en lo que normalmente llamamos “derechos de propiedad”. ¿En qué sentido son estos derechos “naturales”? La respuesta, creo, se encuentra en la universalidad, espontaneidad y valor adaptativo evolucionario de la reciprocidad. La reciprocidad en nuestro actuar, que se observa en la conducta humana (y también prominentemente en la de nuestros parientes cercanos, los chimpancés), es el fundamento de nuestro rasgo distintivo como criaturas de intercambio social, intercambio que hemos extendido para incluir el comercio con personas sin parentesco y también con miembros de otras tribus mucho antes que adoptáramos la agricultura y la ganadería como formas de vida.”

 

Licencias para importar: ¿se pueden dar órdenes que no se publican en un sistema republicano?

Los alumnos de Derecho de la UBA tienen como tarea buscar noticias donde se encuentren temas relacionados con la economía y el derecho. En verdad, no es una tarea difícil ya que toda noticia tiene un componente jurídico y económico; sería más difícil encontrar una que no los tuviera. Pero tal vez no lleguen en su búsqueda hasta los suplementos especializados de los diarios.

En uno de ellos, sobre comercio exterior, publicado en La Nación, dos notas comentan un tema que involucra al derecho en su más alto nivel, aquél que hace referencia a los principios sobre los que se basa una república. En particular a esta pregunta: ¿puede un gobernante dar órdenes que no se conozcan hasta que el destinatario las reciba?, ¿puede establecer requisitos para un cierto trámite que no se dan formalmente a conocer?, ¿puede decidir que para realizar cierta actividad hace falta un permiso que luego otorgará a su discreción si se cumplen ciertas condiciones que dará a conocer al interesado?

El tema tiene que ver con la implementación de Licencias para Importar, conocidas como DJAI. Los dos artículos de referencia son:

“Un fallo previsible contra medidas lamentables”, de Enrique Barreira, abogado especializado en derecho aduanero: http://www.lanacion.com.ar/1780688-un-fallo-previsible-contra-medidas-lamentables

“Una decisión cantada, y no por eso menos frustrante”, de Ricardo Xavier Basaldúa, profesor de Derecho Aduanero y comercio exterior en la UBA, UCA, Universidad Austral y Universidad de San Andrés: http://www.lanacion.com.ar/1780845-una-decision-cantada-y-no-por-eso-menos-frustrante

El primer artículo resume así su contenido: “La sanción de la OMC contra la Argentina se basó en un patrón sistemático, no escrito, sancionatorio y duradero de restricciones a las importaciones”. La Organización Mundial del Comercio finalmente sancionó a Argentina por establecer barreras o prohibiciones a las importaciones sin dictar ninguna norma, simplemente “cajoneando” las solicitudes de permisos que no cumplieran con ciertos requisitos que los funcionarios consideraban oportunos.

Estos eran los siguientes: “Se acreditaron las restricciones en diferentes sectores negando las licencias o DJAI a quien no cumplía con estas condiciones: exportar por el equivalente a lo importado; reducir volumen o precio de importaciones; no girar utilidades o repatriar inversiones; realizar o incrementar inversiones, y/o otorgar mayor participación nacional a la producción.”

Estoy seguro que muchos alumnos estarán de acuerdo con alguna o todas esas condiciones. La mentalidad mercantilista es el default, creer que existe tal cosa como el derecho a comerciar, a exportar o importar, a girar utilidades, es la excepción, es solamente un adorno de la Constitución y un derecho arcaico que debe someterse a la voluntad de la mayoría.

Seguramente también serán de la opinión que hubo aquí un error de forma, que si el gobierno hubiera emitido resoluciones introduciendo esos requisitos para otorgar los permisos de importación, entonces todo hubiera estado bien. Ya que la forma jurídica es todo para una visión positivista del derecho. Claro, el problema es que entonces la OMC diría que eso no se puede hacer, que la Argentina disfruta del acceso al mercado de otros países porque todos han aceptado ciertas condiciones entre las que se encuentran que no se pondrán barreras a los productos argentinos exportados a, digamos, Uruguay, basados en criterios tales como que las empresas uruguayas exporten igual volumen hacia la Argentina, o que no remitan ganancias hacia este país, o que agreguen más participación nacional uruguaya en las exportaciones hacia Argentina.

Todo eso, seguramente, tiene mucho sentido. Pero hay un problema más básico que tiene que ver con derechos más fundamentales. Pensemos en los muchachos que producen las zapatillas Páez. Han puesto allí su creatividad y su trabajo, han invertido su capital. Su capital y su trabajo son “su” propiedad: no le han robado a nadie, ni han hecho fraude. ¿Tienen derecho a importar nuevas maquinarias o insumos para su producción, sí o no? ¿Por qué tienen que pedirle permiso a alguien si estarán pagando esas importaciones con su dinero en una transacción en la que ningún tercero puede decir que es perjudicado? Tal vez los alumnos de Derecho tengan respuestas para esto….

La competencia en el mercado del petróleo: ¿hay competencia? ¿Hay un cartel? ¿es sostenible? (V)

La Consultora Accenture informa que las importaciones netas de petróleo de Estados Unidos han caído 56% desde 2005: http://www.accenture.com/us-en/Pages/insight-stats-energy-net-oil-imports-united-states-fallen.aspx?c=glb_acnemalert_10001751&n=emc_0215&emc=20747806:emc-030215

Los alumnos de OMMA en Madrid, discuten sobre la competencia en el mercado del petróleo en base a este comentario (van sin los nombres completos):

“Dice la noticia, ya por todos conocida:

El petróleo de Texas (WTI) rebotó hoy 5,27 % y cerró en u$s 48,69 el barril, terminando la semana con un alza del 0,68 %, la primera subida tras siete semanas de retroceso. Al término de la sesión de hoy en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del WTI para entrega en febrero próximo, que se toman como referencia, subieron 2,44 dólares respecto al cierre del jueves. Tras varios días de fuerte volatilidad, el petróleo de referencia en Estados Unidos cerró la semana con un alza de 33 centavos, lo que le sirvió para romper la tendencia negativa que arrastraba.”

¿Hay competencia? ¿Hay un cartel? ¿Cómo impactarán los costos en la actividad hacia el futuro?

Sus opiniones:

  • José, hasta ahora se mantenia aunque sus costes de producción eran diferentes, porque mantenian un mercado con precios altos y a todos les salian las cuentas. A partir de ahora veremos el camino que toma cada uno.
  • En el mercado del petroleo se está dando una dura competencia entre los agentes productores.

La OPEP quiere recuperar la cuota de mercado que ha perdido en los últimos tiempos por parte de los Estados Unidos que, con la revolución que ha supuesto el fracking, había logrado producir más que Arabia Saudí.

Los productores que tienen costes menores perciben que si el precio baja los productores con un mayor coste saldrán perjudicados y serán expulsados del mercado. Por contra estos últimos si quieren evitar esta situación deberán lograr ser más eficientes reduciendo los costes ya que los precios han bajado (son los precios los que determinan los costes).

En resumen, la guerra de precios está servida, y la consecuencia de esto es que algunos agentes se verán beneficiados, en este caso las economías globales que importan petroleo para sus actividades y los consumidores finales.

Se podría comparar este proceso como una competencia bilateral entre vendedores, la cual beneficia al comprador. El precio quedará fijado entre la valoración del que vende y la del segundo que pedía menos, siendo la valoración del comprador irrelevante.

Yo pienso que si se mantiene este proceso de competencia entre vendedores perjudicará al cartel y cada vez tendrá menos poder en la determinación del precio del petroleo.

  • Sin tener apenas conocimientos en la materia, estoy de acuerdo con la opinión mayoritaria de mis compañeros.

Existe un cártel que durante años ha restringido la oferta con el fin de poder disfrutar de un alto margen de beneficios.

Ello ha llevado a investigar y obtener nuevas tecnicas de extracción. En la medida en que se han ido incorporando al mercado nuevos productores, no petenecientes al cártel, esta teniendo lugar una competencia muy dura actualmente, con un aumento de la oferta. Ello esta llevando al cártel a tener cada vez un peso menor y muchos de sus componentes lo estan pasando francamente mal puesto que sus economías se basan fundamentalmente en su actividad productora y exportadora de petroleo.

Me parece muy interesante el análisis geopolítico que ha compartido Carlos con nosotros. Estoy de acuerdo en que este aspecto, junto con la situación en China, influyen tambien de manera importante en lo que esta sucediendo pero entiendo que el factor necesario y decisivo en todo lo que esta sucediendo viene dado por el avance tecnológico en las nuevas técnicas de extracción.

En la evolución de los precios influirá la evolución de la economía mundial (que determinará que la demanda aumente o disminuya) así como la oferta (habrá que ver de entre las empresas que tienen mayores costes de extracción, cuales son capaces de aguantar el tirón). Tambien, como comenta Jose Teruel, habra que ver la evolución de aquellas energías que puedan sustituir parcialmente o completamente al petroleo y derivados.

  • Hay competencia, por supuesto. El petroleo es una materia prima fundamental en el desarrollo y día a día de la economia de muchos paises y estos países hacen lo que creen que es mejor para sus arcas. En este caso por ejemplo, yo diría que si había una especie de cartel hasta que uno de sus socios se desmarcó y empezó a mirar por su bien y no por el de sus vecinos.

La reducción del coste de esta actividad pienso que beneficiará a la economía global, los costes de energía serán menores (ya se esta viendo en el precio de los combustibles) y esto llevará a un abaratamiento de la producción y de los precios de los productos finales (siempre y cuando los bancos centrales no se vuelvan locos y empiecen a imprimir a lo bestia)

  • Me llama la atención que sea precisamente durante los dos mandatos de Obama que el fracking se haya desarrollado tan exponencialmente.

La primera decisión de Bush hijo una vez asumido el mando fue autorizar la prospección petrolífera en Alaska, empujado por lobby petrolero y enfrentándonos a numerosos lobbies conservacionistas. En cambio, con Obama, no precisamente alineado con lobby petrolero, es cuando realmente se ha vivido la segunda revolución del petróleo en EEUU.

Para los amantes de las teorías conspiratorias y estrategias geopolíticas para con la manipulación del precio del petróleo, cómo es que ha sido con una Administración no intervencionista en asuntos petroleros como la de Obama con la que se han dado todos estos sucesos.

En mi opinión, una vez más, en mercados libres las reglas no son dictadas, surgen de las oportunidades.

  • En el mercado de petroleo SI hay competencia. Hay un numero elevado de oferentes ofreciendo un producto bastante homogéneo (los diferentes tipos de petroleos, q son bastante sustitutivos entre si), y sin normativas estatales que impidan el libre acceso como oferentes a este mercado (ya que el petróleo se produce y se distribuye, gracias a dios, en un gran numero de países diferentes).

La mejor demostración de que hay competencia en este mercado es la fuerte caída del precio que ha habido en el mismo; es mas, la caída del precio ha sido mucho mayor (en proporción) que la aparente» o esperada» caída del consumo, lo cual solo puede ser explicado por la fuerte presión de a competencia entre los diferentes jugadores (aparte de las teorías conspirativas).

Existe un cartel, la OPEP, pero no es un cartel viable porque ya no puede controlar ni los precios ni las cantidades que se ofertan en el mercado.

Respecto de los costos, y dado nuestro enfoque austriaco, hemos de pensar que si los precios de venta del petróleo siguen bajos (a 50$ el barril), los costos de producción también bajaran para adecuarse a este precio de venta.

Recordemos que según los austriacos es el precio de venta el que va determinar los costes de los factores de producción, y no al revés.

  • ¿Hay competencia?

Existe una competencia limitada. Intento explicar: si se analiza la tabla de producción por país, uno se da cuenta de que la cuota de mercado más alta la tienen los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), controlando los recursos de petróleo más grandes y más accesibles del mundo. En el pasado, se han esforzado muchísimo en colaborar para maximizar sus beneficios colectivos a través de restricciones de la producción. Cuestión que un economista «mainstream» definiría como una «falla del mercado», pero que humildemente considero que se trata de una condición particular en la que los recursos están en manos de unos pocos países (casi todos ellos con gobiernos tiránicos (excepto: Noruega, EEUU y UK)

¿Hay un cartel?

No al 100%. Existe un número importante de competidores que no están afiliados a la OPEP.

¿Cómo impactarán los costos en la actividad hacia el futuro?

Con una bajada de precios, de casi el 50%, en mi opinión se producirán tres cosas: a) algunas empresas quebrarán, b) otras, gracias a los empresarios, descubrirán mejores formas de extraer y procesar petróleo para atender la nueva estructura de precios.

Para los norteamericanos el principal problema es el gobierno: ¿éste gobierno o todos los gobiernos?

Una reciente encuesta de Gallup muestra que para los norteamericanos el principal problema de su país es “el gobierno”, superando a la economía y el desempleo: http://www.gallup.com/poll/181946/americans-name-government-no-problem.aspx?utm_source=alert&utm_medium=email&utm_content=morelink&utm_campaign=syndication

Encuesta

¿Será que están descontentos con ‘este’ gobierno, o con los gobiernos en general? Por un lado, suele ser obvio que los votantes se cansan de los gobiernos de turno y quieren cambiar por otro del cual se cansarán también en su momento. Pero David Boaz también interpreta la existencia de una tendencia más general entre los norteamericanos hacia posiciones que llama ‘libertarias’ y, por lo tanto, que rechazan al estado más allá de ciertas funciones básicas en la defensa de derechos fundamentales. Así dice en su libro “The Libertarian Mind: http://www.cato.org/libertarianmind

“Una serie de encuestas de CNN mostró que un apoyo total para una combinación de posiciones libertarias había crecido un 30% entre 2002 y 2012. Los periodistas ahora hablan de una fracción libertaria en el Congreso y en el electorado. Las organizaciones libertarias florecen.”

“Y no es de extrañar. En los últimos años los políticos nos han dado muchas razones para dudar de la eficacia y la sabiduría de un gobierno grande y activista. Guerras interminables. Colapso económico. Salvataje a grandes corporaciones. El mayor gasto público y endeudamiento de la historia. Un nivel inimaginable de espionaje sobre los ciudadanos.”

“Hay mucha variedad de ‘libertarios’, por supuesto. Algunos son gente que se describe como ‘conservadores fiscales y liberales sociales’, o dicen que quieren al gobierno “fuera de su billetera y su dormitorio”. Algunos creen en la filosofía de la Declaración de Independencia y quieren que el gobierno se mantenga dentro de los límites de la Constitución. Algunos simplemente tienen la creencia instintiva en la libertad o la aversión a que les digan qué hacer.”

“El reciente resurgimiento libertario ha tomado muchas formas. Libros tales como “La Rebelión de Atlas” de Ayn Rand y “Camino de Servidumbre” de Hayek se volvieron bestsellers, igual que copias de las Constitución. Grupos de estudiantes libertarios han surgido y crecido rápidamente.”

“Cuando estalló la crisis financiera en 2008, los políticos de Washington tuvieron una respuesta: emitir dinero y salvar a las grandes empresas. Primero Bear Stearns, luego Fannie Mae y Freddie Mac, luego casi todo Wall Street a través del programa TARP. Pero los votantes tuvieron una respuesta diferente. Las encuestas mostraron un rechazo generalizado a los salvatajes, y la ira de los votantes hizo fracasar el primer intento de voto en Diputados del plan TARP. Finalmente, el Congreso lo aprobó en un segundo voto, y los lobbystas triunfaron. Wall Street obtuvo su rescate. Y podemos dar fecha al nacimiento del Tea Party en la semana que el Congreso desafió a la gente y rescató a Wall Street.”

“Un par de años más tarde emergió otro movimiento de base, Occupy Wall Street. Fue percibido como izquierdista y anti-empresas, tal como el Tea Party fue visto como de derecha y anti-Obama. Pero hubo muchos temas libertarios en las protestas de Occupy: preocupaciones por la guerra y el imperio, rescates y deuda, capitalismo de amigos, abuso policial y los enormes poderes de la Reserva Federal. Podían verse banderas de “Terminemos con el FED” y “No me pisen”, tanto en los eventos del Tea Party como en los de Occupy.”

“Los dos grupos tienen otra cosa en común: ambos recibieron una no deseada atención por parte del IRS, el FBI y el Departamento de Seguridad Interna”.